La economia de fichas

Economía de fichas

Es una técnica que tiene sus orígenes desde épocas muy antiguas, pues existen datos de su uso en civilizaciones como la griega y la cina donde se usaba como sistema para castigar o premiar a las personas por ejemplo los solados debido a sus logros o dar sanciones su no tenían una conducta adecuada. Se uso también en los años 1800 para rehabilitar presos en Australia, en estados unidos se uso en 1985 en el ámbito educativo. En el ámbito de la psicología fueron Thorndike y Pavlov quienes lo emplearon por primera vez asociando estímulos y respuestas, con estas técnicas de condicionamiento operante se inicia el uso franco de la economía de fichas, primero con animales y posteriormente con humanos.

Consiste específicamente en utilizar un registro de puntos o logros conductuales que hacen ganar fichas, estas fichas equivalen a puntos obtenidos y pueden canjearse en un momento determinado por reforzadores, es decir premios o recompensas que propiciaran que la conducta deseada se repita.

Esta estrategia se emplea en la actualidad y desde su creación en diversos ámbitos como los hospitales psiquiátricos, escuelas y en el hogar, logrando erradicar o disminuir conductas no favorables y lograr la repetición de las que se espera tenga el sujeto. Existen variables que determinan o influyen en la función de la estrategia por ejemplo la selección de la conducta problema, la selección de la población, la participación del equipo en la terapia, las instrucciones al equipo, el contacto interpersonal, el feedback, el modelado, las variables demográficas y el cambio de hábitat.

Para su aplicación en el ambiente educativo se tiene que llevar a cabo primero un proceso de implantación del sistema en el que se busca que el alumno se motive y mejore las conductas y un proceso de desvanecimiento posteriormente, en el que la conducta deberá mantenerse aun en ausencia de los reforzadores, esto se logra de manera gradual desvaneciendo el sistema, ya sea aumentando la dificultad de la obtención de puntos o mediante el aumento en los lapsos para el canje de los reforzadores. Para que su implementación En el aula sea exitosa es necesario que se pongan en lugares visibles el grupo de conductas deseadas, y los puntajes que se obtendrán con cada una de ellas junto con los lapsos o plazos que se le darán, y asignar o no los puntajes de manera más positiva que punitiva, buscando motivar y no castigar.

Siempre debe explicarse cuando obtenga una ficha por que la obtuvo o por que razón no la obtiene, para lograr una comprensión adecuada del sistema, al inicio debe ser más frecuente la entrega de fichas de puntos para después ir espaciándolas, también debe otorgarse mayor puntaje a las conductas mas deseadas y siempre tener a la vista del alumnado los reforzadores que podrán obtener además del registro gráficos de puntos. La funcionalidad del sistema dependerá de la constancia, y la evaluación adecuada antes de determinar las conductas a premiar y reforzar, se requiere el apoyo de padres y una vez que se ha establecido una motivación adecuada será posible utilizarlo para conductas diversas.

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