La importancia del juego en el desarrollo de los niños

La primera lectura habla de cómo se ha analizado el término “juego” por diferentes autores y en distintas épocas. Se señala que es una actividad importante en el desarrollo de la vida del niño para su vida futura.

Nos hace mención que el juego constituye una actividad importante durante un periodo de la vida y generalmente se piensa desde el punto de las actividades, lugares donde se realizan y del conjunto de la situación, que es difícil encontrar características comunes a los distintos juegos. Lo que si parece evidente en todas las actividades de juego es que los que las realizan encuentran un placer claro en ejecutarlas y lo hacen por la satisfacción que les produce.

Los psicólogos atribuyen una gran importancia al juego en el desarrollo del niño, y sostienen que es una actividad completamente necesaria para un crecimiento sano.

Para poder dar una mejor explicación sobre el origen del juego se toman aspectos de cuatro teorías:

La teoría del exceso de energía: Frederich Schiller donde sostienen que el juego sirve para gastar el exceso de energía de un organismo joven, que no necesita trabajar para subsistir, ya que sus necesidades son satisfechas por otros. Otro que explica esta teoría es Herber Spencer quien sostenía que los sentimientos estéticos derivan del juego, y que ambos se caracterizan por no buscar ventajas ulteriores; los fines próximos son sus únicos fines de tal manera que “el juego es el ejercicio artificial de energía que, a falta de su ejercicio natural, llegan a estar tan dispuestos a gastarse, que se consuelan con una actividad simulada.

La teoría de la relajación: donde Lazarus, sostuvo que los individuos tienen que realizar actividades difíciles y trabajosas, que producen fatiga, y que para recuperarse de ellas llevan acabo otras actividades que les sirven para relajarse.

La teoría de la recapitulación: donde varios autores sostendrían que los niños juegan por una memoria de la raza que les llevaría a realizar actividades que nuestros antepasados llevaron acabo en otras épocas. Stanley Hall parte de la posición darwinista, según la cual el desarrollo del individuo reproduce el desarrollo de la especie. Por eso el niño durante la infancia reproducirá la historia de la especie humana y realizará en el juego esas actividades que nuestros antepasados llevaron acabo hace mucho tiempo. Dicha teoría también esta basada en la concepción Lamarkiana en la que las capacidades adquiridas en un determinado momento son heredadas por los descendientes.

La teoría de la práctica o del pre ejercicio: por Groos sostiene que el juego es necesario para la maduración psicofisiològico y que es un fenómeno que está ligado al crecimiento. El juego consistirá en un ejercicio preparatorio para el desarrollo de funciones que son necesarias para los adultos y que el niño ensaya.

Los juegos motores, los juegos de actividad física, le permiten desarrollarse desde el punto de vista físico, lo juegos simbólicos prepararse para actividades posteriores de carácter social.

Para Freud el juego está relacionado con la expresión de las pulsaciones y en partícular las de placer.

Para Vigosky el juego es una actividad social en la cual se logran adquirir papeles que son complementarios del propio. (se ocupa sobretodo del juego simbólico).

Dentro de esta misma lectura nos hace referencia a la importancia del juego de los animales donde según Groos a través del juego los animales adquieren conductas muy importantes para su supervivencia. Algunas de ellas son: un control absoluto del propio cuerpo, un control absoluto sobre los medios de locomoción, una gran agilidad para perseguir a la presa y especial capacidad para luchar.

Para los animales el juego proporciona medios de exploración y adaptación del ambiente. Según Garvey menciona que los animales que alcanzarán en la etapa adulta una conducta más flexible jugaran más. El juego de los animales tiende a ser social.

De lo anterior parte la idea de que si los animales juegan, en el hombre el juego alcanza una importancia muy superior ya que el hombre juega más y durante más largo tiempo.

Huizinga señala que al hombre se le debería asignar la calificación de homos ludens hombre que juega, ya que éste es un aspecto fundamental de su actividad, y, según el la cultura brota del juego.

Esta lectura trata de dar respuesta a la interrogante ¿por qué juega el niño?

El juego no constituye un fin en si mismo, sino un medio eficaz para educar al niño.

Aquí nos habla de dos tipos de juego

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