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Psicología Evolutiva Niñez Cat. I


Enviado por   •  1 de Mayo de 2018  •  Trabajos  •  2.419 Palabras (10 Páginas)  •  115 Visitas

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Psicología Evolutiva Niñez Cat. I

Prof. Adj. Reg. a cargo: Dra. María Elisa Pizzo

Trabajo de Campo

· Integrantes:

 ·BRANDO, Andrés                        33.913.022         martinba9@hotmail.com       

            

 ·RICCI TERAN, Jazmín                 39.165.041         jazlong_12@hotmail.com

· Comisión N°: 04


· Docente: VAZQUEZ, Bárbara

· Fecha: 1º cuatrimestre año 2017

Índice

Datos de la niña………….…………………………………………………………..…………… 2

Consigna padres…………………………………….………………......................................... 3

Descripción espacio de trabajo………………………………………………………………….. 4

Descripción de la niña…………………………………………..………………………………... 4

Observación……………………………………………………………………………………….. 5

Datos de la observación……………………………………………..…………………………... 8

Datos del niño o niña

Nombre: Leonela

Edad: 10 meses

Fecha de nacimiento: 9 de junio de 2016

Sexo: femenino

Escolaridad (si posee): -

Datos de la familia

- Padre

Nombre: Pablo        

Edad: 28 años

Ocupación: empleado farmacéutico

Nivel de escolaridad alcanzado: secundario completo

- Madre

Nombre: Natali

Edad: 25 años

Ocupación: ama de casa

Nivel de escolaridad alcanzado: secundario incompleto

- Hermanos

Nombre: -

Edad: -

Fecha de nacimiento: -

Sexo: -

Escolaridad: -

- Otras personas que conviven

Nombre:  -

Edad:  -

Sexo: -

Escolaridad: -

Consigna a padres

En la búsqueda del niño para realizar la observación, acudimos a personas conocidas que pudieran facilitarnos un contacto. El mismo se dió a través de la hermana de uno de los integrantes, quien nos otorgo el número telefónico de una amiga suya que tiene una niña pequeña.

A partir de esto, nos contactamos con ella por WhatsApp. Le comentamos que buscábamos a alguien que quisiera participar de nuestro trabajo de campo que consistía en observar la conducta espontánea de un niño de entre nueves meses y diez años y nueve meses. Le señalamos que el objetivo es comprender el desarrollo infantil de los niños y que la observación era anónima. Comentamos también que como condición, no podía realizarse mientras el niño estuviera realizando actividades como comer, dormir o bañarse y que además tenía que ser en un lugar habitual del niño. Ella rápidamente aceptó y ese fin de semana acordamos visitarlos el miércoles para poder realizar la observación.

El miércoles llegamos a la casa a las 19:00hs. Nos recibió Natali a través de un gran portón verde. Caminamos atravesando el patio con la piscina y subimos hasta su hogar. Una vez dentro, el papá de la niña nos saludó con Leonela en brazos. Seguido esto, nos aclararon que ellos eran los únicos que vivían en el lugar.

Nos presentamos y le comentamos que somos estudiantes de segundo año de la Facultad de Psicología de la U.B.A., que ambos estamos cursando la materia de Psicología Evolutiva: Niñez. Le explicamos que dicha materia se trata de la disciplina que se ocupa de la naturaleza y regulación de los cambios estructurales, funcionales y conductuales significativos que se manifiestan en los niños durante su crecimiento y maduración, que intenta pensar en función de la continuidad y el cambio en el tiempo. Nos sentamos en unas sillas frente a la tv, nos ofrecieron jugo de mandarina para beber, y comenzamos nuestra observación.

Iniciamos a las 19:15hs y la dimos por finalizada 19:50hs. Nos despedimos, dimos las gracias y comentamos brevemente acerca de la próxima visita que les haríamos para la entrevista.

Descripción del espacio de trabajo

La casa se encuentra ubicada en un segundo piso al cual se accede por una escalera caracol metálica vieja. Previo a la escalera hay un gran patio con una piscina.

Dentro, el lugar es amplio, con gran iluminación, tiene tres grandes ventanas con largas cortinas blancas, dos dando vista al patio y una a la calle. La cocina se encuentra apenas se ingresa, es muy pequeña y está separada del comedor por una medianera de ladrillos. Las paredes son de color naranja fuerte. Existe otra puerta en la pared opuesta a la de entrada, donde también hay una ventana. En otra de las paredes hay una tv grande amurada y a su costado un mueble para pc y otro mueble alto de cocina, ambos marrones. Junto a estos se observan banquetas agrupadas, y un pasillo que conduce a la habitación de la familia. En la pared restante se ubica la otra ventana, a su lado el corralito de Leonela, y a la vez otro gran mueble pero blanco. Entre la tv y la ventana adjunta al corralito hay una mesa central de madera con cuatro sillas. Cerca del corralito hay muchos juguetes dispersos sobre el suelo. El piso es de cerámicas blancas. Junto a la puerta que no es la de entrada se encuentra una silla para comer de bebes y un cochecito.

 

Descripción de la niña

Leonela es una nena de pelo corto castaño claro. Tiene 10 meses de edad. Presenta una piel blanca y grandes ojos marrones con largas pestañas. Su cabello es lacio y abundante. Es robusta y cachetona. Lleva puesto un buzo gris polar, unos pantalones rosa con detalles florales y unas medias lisas rosas oscuras. En las orejas tiene unas pequeñas perlitas plateadas.

Observación

Leonela está sentada en el piso del comedor. Su mirada y sus gestos se dirigen a nuestra dirección. Gatea hasta la cocina siguiendo a la madre que prepara algo de comer. Cuando su mamá vuelve a la mesa, regresa con ella. Mueve el cuerpo mientras suena la música que sale de uno de sus juegos, un libro de cuentos con canciones y luces. Lo presiona repetidamente con fuerza haciendo sonar la música. La mamá le coloca juguetes alrededor, entre ellos su libro, una pandereta rosa grande, un piano de juguete y una muñeca rosa. Ella mastica una galletita que le da Natali. Pablo se sienta en la esquina del comedor, al costado del corralito de ella, con una lata grande de galletitas. Leo lo mira y gatea hacia él. Su papá activa una canción del piano musical. El celular de Pablo suena y él se levanta. Leo levanta su mano con la que tiene la galletita en dirección a Natali, mientras ella le responde diciéndole que no quiere comer. Luego, gatea en dirección al pasillo donde se dirigió su padre, balbuceando suavemente. Se arrastra por el piso mientras la mamá le dice repetidamente que vuelva al comedor. Luego se acerca a la bebe, la levanta y la lleva nuevamente al centro del comedor. La apoya en el piso y la sostiene de una mano. Leo se suelta y mantiene el peso del cuerpo sobre una pierna flexionada. Toma una galletita que estaba sobre el suelo y se la mete en la boca. Seguidamente la quita de su boca y la arroja, para luego agarrar otra más grande. Intenta masticarla llevándosela a la boca mientras nos mira a los dos observadores y a su madre. La pequeña mueve su cuerpo sentada en el piso y su mamá activa la música de un pequeño pato que emite sonidos. Leo se da vuelta y balbucea. Ella gatea en la dirección de su mamá mientras una de sus manos no suelta su galletita. Mira hacia arriba, mueve las manos y su pedacito de galletita sale volando lejos. Natali le ofrece otra del paquete sobre la mesa. Su papá se arrodilla junto a ella en el centro del comedor y hace sonidos con la pandereta rosa grande mientras la niña ríe y va gateando hacia él. Estira su brazo hacia él con la galleta en la mano, para luego llevársela a la boca. El papá se para y ella vuelve a estirar el brazo. Se pone a jugar brevemente con la pandereta y la vuelve a dejar a un costado. Se acerca a la mesa central donde estamos e intenta pararse sosteniéndose de una pata de la mesa. Comienza a toser, y su papá rápidamente le alcanza una mamadera con agua que Leo toma con sus dos manos y bebe. Luego, su papá toma una pequeña pelota marrón, la lanza al aire repetidas veces y la pequeña sonriendo la sigue con la mirada. Enseguida se dirige a la pelota y la empuja con la mano. Esta  rebota en un juguete en el piso y se escapa lejos de ella. Nuevamente, comienza a observar en nuestra dirección, con una mirada fija. Después, desvia la mirada y toma del piso un pulpo esponjoso azul brilloso y lo lleva a su boca. Ahora cambia el objeto por una galletita que estaba sobre el suelo, e intenta masticarla. Mira a la mamá y le sonríe. La mamá va hasta la habitación y vuelve con un mono verde y grande que hace música. Leo mira a la mamá, balbucea y toma mono. Luego, lo apoya en el suelo, lo suelta, se da vuelta y gatea hasta la ubicación del padre que está sentado en la silla al costado del corralito. Èl la agarra de las manos y Leo queda de pie. Comienza a moverse con la ayuda y se agarra de la red del corralito. Con las manos empuja la red y con un pie pisa una cajita de música con botones y esta hace sonidos. Pablo ubica su celular y un video musical con animalitos en el interior del corralito. Ella lo observa con atención, se sienta nuevamente y mueve todo su cuerpo de un lado a otro. Vuelve a encontrar una galletita cerca de ella y deja de mirar.  Cambia la galletita por la pandereta rosa y se pone a agitarla mientras se ríe. Luego de un momento la descarta a un costado suyo y gatea hacia el corralito donde se encuentra el celular con música. Leo nos mira y levanta su mano derecha con la galletita enseñándola. Observa a su mamá. Mira la galletita y con las dos manos la aprieta. Se cae la galleta y la busca. Mira a la mamá y mueve su cuerpo. Tuerce el cuerpo hacia la derecha, la mamá se ríe y la niña también. Gatea hasta el padre y se empieza a mover nuevamente con pequeños saltitos. Agarra la pandereta y la tira lejos. Su padre se arrodilla y la sostiene mientras Leo se pone de pie nuevamente. Ella sigue bailando mientras escucha “La gallina Turuleca” que suena en el celular. Se sienta en el piso y gatea hasta el corralito. Pablo la agarra de las manos y la vuelve a sentar en el piso. Leo mira el teléfono y se mete el dedo índice en la boca. Apoya las dos manos en el piso, mientras oye el celular. Se arrodilla con una pierna y la otra la pone firme. Cerca suyo se encuentra el piano de colores, lo toma y presiona sus teclas. Lo esconde bajo el corralito y lo vuelve a sacar repetidas veces. El piano queda a medio sobresalir por debajo del corralito. Mira a su papá y balbucea. Revolea un juguete y lo mira a lo lejos. Agarra un sonajero y se lo mete en la boca. Comienza a gritar, el papá se vuelve hacia ella y le da la pequeña pandereta. Leo la agarra y la revolea nuevamente. El papá comienza a aplaudir y ella mueve sus manos. Gatea hasta la posición de Pablo que la ayuda a pararse y continúa bailando. Su papá mueve sus dedos y le hace caras y ella se ríe muy fuerte. Le comienza a decir “papá” varias veces y le grita mientras él se ríe. Sigue repitiendo la palabra “papá” mientras se agarra de la pierna de él hasta pararse.

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