Según los estudiosos, la personalidad se define en los primeros 7 años de vida de todo ser, es por ello que, durante esa primera etapa observamos; en el infante

Contacto Afectuoso ( I )

Según los estudiosos, la personalidad se define en los primeros 7 años de vida de todo ser, es por ello que, durante esa primera etapa observamos; en el infante, la necesidad de descubrir lo fascinante y a su vez lo amenazador de este hermoso mundo.  Es así como nos descubrimos cada día como destructores de juguetes pero al mismo tiempo creadores de otros con los restos de los juguetes ya destruidos, manejándose en la polaridad “destrucción – construcción”. Es en esta etapa de vida donde los padres necesitamos desbordar toda nuestra atención sobre ellos para orientar sus pasos.

Es importante destacar que nuestros modelos conductuales van a ser papá y mamá, de los que fijaremos todas las acciones, que en el transcurrir del tiempo se convertirán en rasgos de personalidad, y tomando en cuenta que, al nacer traemos una carga genética que nos proporciona una gran información.

Pero descubrimos que nuestros padres están sumergidos en la vorágine que implica vivir en las grandes ciudades, siempre de carreras para llegar a tiempo al trabajo, a la escuela, a la casa, al parque de diversiones y por supuesto, con poco tiempo para el contacto afectuoso con nosotros, que es lo verdaderamente importante para todo ser humano en cualquiera de sus etapas.

Este contacto afectuoso, es lo que, como padres, hemos dejado a las llamadas TIC´s, lejos de inter actuar con nuestros hijos en esos momentos de travesuras y de tremenduras, donde el niño se siente confortable y además reconocido entonces, ya no nos basta con llegar siempre tarde o no llegar a la cita con él sino que, lo reprimimos, lo regañamos, lo maltratamos y hasta lo marginamos porque ocupan nuestro apreciado tiempo, y es allí donde se insertan como padres sustitutos los videos juegos propios de la era cibernética como, los Ds o Nintendos, los WII, los Playstation, y más adelante las computadoras y los teléfonos inteligentes con toda la gama de conexiones al ciberespacio y hacia las llamadas “redes sociales”.

Ya en la pre adolescencia y en la adolescencia misma, con los cambios corporales y hormonales propios del desarrollo y con toda la experiencia que traemos en el manejo de los  dispositivos y equipos electrónicos, nos enfrentamos a la necesidad de mayor arraigo que, no es otra que, la necesidad de “pertenencia” donde las redes sociales nos ofrecen un sin numero de posibilidades para identificarnos y llenar así esa gran necesidad, es aquí donde se empiezan a desarrollar los signos adictivos y por tanto la rebeldía hacia el núcleo que hasta ahora lo ha marginado, es decir, la familia.

Buscamos los elementos nutritivos en la web o en cualquier otro contexto como la droga, el alcohol, el sexo, etc; y no en el núcleo familiar, con el único objetivo de sentirnos pertenecer a algo que nos ofrezca una mayor identidad, aunque sea falsa.

Es necesario que como padres nos mantengamos atentos para adecuar nuestros momentos y lograr mayor afectividad frente a nuestros hijos, dado que como modelos seremos siempre su objetivo conductual.

LESKY LUQUE

lesky_luque@hotmail.com 

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