Tratamiento Cognitivo Conductual De La Obesidad
Dulcearellano18 de Octubre de 2011
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INTRODUCCIÓN
Actualmente la obesidad en nuestro país se ha incrementado, logrando ser México el 25 de Enero del 2010 el primer lugar en obesidad tanto infantil como adulta, siendo el presidente Felipe Calderón quien hiciera oficial el dato proporcionado. Es por eso que la obesidad se ha convertido en una de las problemáticas actuales y de mayor preocupación porque dicha problemática en vez de que disminuyera está aumentando y lo preocupante es que las personas que la presenta no hace nada para detenerla, logrando con esto tener repercusiones negativas a nivel emocional y de salud.
La obesidad afecta emocionalmente a las personas que lo padecen, esto debido porque en los últimos años se han producido una mayor exigencia en los modelos estéticos de las personas, otorgando aprobación y aceptación aquellas personas que tenga una figura delgada, esbelta y atlética, logrando en ocasiones problemas psicológicos como son el miedo e inseguridad personal, pérdida de la autoestima, desorden de conductas alimentarias, perturbación emocional por hábitos de ingesta erróneos, distorsión de la imagen corporal, tristeza e infelicidad, ansiedad, depresión y frigidez e impotencia.
Es por esto que mi ensayo va encaminado hacia la manera de ofrecer un tratamiento cognitivo conductual para todas aquellas personas que tengan obesidad y que quieran conocer un tratamiento que los ayude a tratar el sobrepeso que padezca, con la finalidad de que obtenga buenos resultados y se sientan mejor emocionalmente y físicamente.
En el desarrollo de el ensayo se encontraran la etiología, causas, características especificas de la obesidad y el abordaje terapéutico de la obesidad con el enfoque cognitivo conductual.
La obesidad es un exceso de tejido adiposo que origina un aumento de peso corporal. En condiciones normales el cuerpo humano contiene una cantidad de tejido graso que varía entre un 15% y 18% en el hombre joven y entre un 20% o 25% del peso corporal en la mujer. La obesidad es una enfermedad crónica, que se caracteriza por un exceso de grasa, que a su vez se traduce en un aumento de peso. La obesidad es el trastorno metabólico más frecuente de las sociedades desarrolladas. La cantidad de grasa normal varía según el sexo y la edad.
Se podría hipotetizar que con el conocimiento disponible en la actualidad, parece bastante estimable que el antecedente de todos los trastornos del comportamiento alimentario es la obesidad, aun cuando la causa de la obesidad está todavía siendo muy debatida.
La mayoría de los casos de obesidad son de origen multifactorial, se reconocen una serie de factores los cuales se explicaran a continuación:
Gasto energético: La obesidad exógena o por sobrealimentación constituye la principal causa. Si se ingiere mayor cantidad de energía de la necesaria ésta se acumula en forma de grasa. Si se consume más energía de la necesaria se utiliza la grasa como energía. Por lo que la obesidad se produce por exceso de energía, como resultado de las alteraciones en el equilibrio de entrada/salida de energía.
Factores de aprendizaje: Los primero tratamientos conductuales se basaron en la idea de que la obesidad, al menos la que no tenía una etiología médica clara, era efecto de una causa única: el aprendizaje incorrecto de una serie de hábitos o conductas alimentarias distintas de las del no obeso. En concreto se creyó que el obeso ingería mayor cantidad de alimentos, de manera más rápida y respondía más a estímulos externos asociados con la comida (vista y sabor de los alimentos, sitios y actividades relacionados con el comer, etc.) que a estímulos internos de hambre.
Factores sociales: Es necesario recalcar que la obesidad no es un problema individual si no social. Entre los factores sociales destacan tanto el aumento de la ingesta de alimento como la reducción de la actividad física, picoteo entre comidas, el consumo de productos ricos en grasa y azúcares, promocionados a través de magníficos anuncios publicitarios y de acceso fácil, el desconocimiento de conceptos básicos de nutrición, de esta manera se considera a estos factores ser los más importantes en la etiología de la obesidad hoy en día. Mientras que por un lado promueven el aumento de peso, por el otro lado la sociedad lanza al mercado el valor supremo de la delgadez y esbeltez corporal, esta moda se encuentra plasmada en modelos cuyo peso se encuentran muy por debajo de la medida ciudadana y que revierte en la ropa disponible más tarde en el comercio, repercutiendo más tarde en la imagen corporal de las personas
Factores psicológicos: Aunque en general se puede decir que el obeso no difiere psicológicamente del no obeso, algunos estudios han encontrado que los obesos comen más que los no obesos cuando se encuentran enfadados, deprimidos o ansiosos. Por otro lado y en estrecha relación con los estados afectivos, tenemos la evaluación de pensamientos o frases que el paciente se dice a sí mismo y que le llevan a comer en exceso. Es evidente que la obesidad no es origen de trastornos psicológicos, aunque puede ser un factor de vulnerabilidad para padecer alteraciones emocionales. Con frecuencia los pacientes obesos tienen sentimientos de culpa, vergüenza y una deficiente imagen corporal, al no ser capaces de lograr y de mantener un peso más adecuado a los valores estéticos vigentes. Los fracasos reiterados en el tratamiento conducen a una deficiente autoestima, cuadros depresivos, inestabilidad emocional, ansiedad, sentimiento de culpa y autorreproche.
Factores socioeconómicos: Estos factores influyen fuertemente en la obesidad, sobre todo entre las mujeres. En algunos países desarrollados, la frecuencia de la obesidad es más del doble entre las mujeres de nivel socioeconómico bajo que entre las de nivel más alto. El motivo por el cual los factores socioeconómicos tienen una influencia tan poderosa sobre el peso de las mujeres no se entiende por completo, pero se sabe que las medidas contra la obesidad aumentan con el nivel social. Las mujeres que pertenecen a grupos de un nivel socioeconómico más alto tienen más tiempo y recursos para hacer dietas y ejercicios que les permiten adaptarse a estas exigencias sociales.
Factor genético: A pesar de que no se ha encontrado aún un marcador genético específico de obesidad, existen algunos estudios que han intentado determinar la importancia del componente genético en comparación con las influencias del ambiente, con resultados controvertidos en favor de uno u otro, según el estudio. Se sabe que el genotipo tiene mayor influencia sobre la grasa visceral que sobre el tejido adiposo subcutáneo. Además, hay estudios que sugieren que el genotipo es responsable de una fracción significativa de las diferencias individuales en el gasto energético de reposo, efecto térmico de los alimentos y el gasto energético por actividad fisica. Últimamente se ha descubierto una proteína producida en el tejido adiposo, denominada proteína ob o leptina, que tendría un rol regulatorio del apetito y de la actividad física a nivel hipotalámico.
Factor endocrinológico: Sólo un pequeño porcentaje (2 a 3%) de los obesos tendrían como causa alguna patología de origen endocrinológico. Entre estas destacan el hipotiroidismo, síndrome de Cushing, hipogonadismo, ovario poliquístico y lesiones hipotálamicas.
Fármacos: Ciertos fármacos utilizados frecuentemente causan aumento de peso, como la prednisona (un corticosteroide) y muchos antidepresivos, así como también muchos otros fármacos que se utilizan para curar los trastornos psiquiátricos.
Bouchard, en 1989, determina que la variabilidad en la grasa corporal se debe en un 25% a factores genéticos, en un 30% a la transmisión cultural, y en un 45% a factores ambientales no transmisibles.
Las 3 causas fundamentales de la obesidad son las siguientes: En primer lugar el momento en que la comida rápida desplaza a la tradicional esto debido al alto índice de consumo de alimento industrializados en donde se incluye todo lo que es considero comida rápida, segundo lugar las campañas de mercadotecnia acerca de los alimentos que inducen al consumo de alimento comerciales como son las golosinas, refrigerios empacados, etc. y en tercer lugar los estilos de vida como el sedentarismo, provocadas por la falta de un habito hacia el ejercicio, flojera, las aficiones a la televisión o internet.
Para el diagnostico diferencial de la obesidad en primer lugar, es necesario identificar a la obesidad como el principal problema que presenta el paciente. Es decir un paciente puede estar ansioso o deprimido acerca del hecho de estar obeso, pero la ansiedad o depresión serán una consecuencia, no una causa, de su problema. Por otro lado, hay que descartar la presencia de síntomas indicativos de otros problemas alimenticios como la bulimia y la anorexia. Asimismo, es importante determinar hasta qué punto se encuentra al paciente obsesionado con peso. Una vez identificada la obesidad como el problema principal, es necesario determinar el grado de obesidad que presenta esa persona en cuestión.
Una distinción importante que algunos autores realizan es la de sobrepeso y obesidad. Así el sobrepeso, según el IMC, sería de 25 a 30 kg/m y la obesidad por encima de 30km/m. Para obtener el IMC resulta de dividir el peso (en Kg.) por el cuadrado de la talla (en cm): IMC= P / T (2). Es actualmente el método de referencia como parámetro de obesidad en todos los estudios clínicos.
Las mediciones de peso y talla deben realizarse de la siguiente manera: El peso se obtiene a través de una balanza electrónica o de balancín que tenga intervalos mínimos de 100 en 100 gramos y para
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