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El Buen Consejo


Enviado por   •  23 de Octubre de 2014  •  1.252 Palabras (6 Páginas)  •  291 Visitas

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REFLEXION: BUEN CONSEJO

(Job 5:8)

INTRODUCCIÓN: tiempo, lugar y circunstancias. El libro más antiguo de la Biblia.

1. Consejo dado por un sabio a otro sabio. Ese consejo es aplicable a nosotros, hoy.

2. «Lo que yo haría». «Buscaría a Dios». Elifás se pone en el lugar de Job, su amigo.

3. Sin duda ni vacilación: «Ciertamente». Hay que acercarse confiadamente al Señor.

4. Todos tenemos negocios que arreglar, así espirituales como temporales.

5. Todos cometemos errores en el arreglo y desempeño de nuestros negocios.

6. Dios es un administrador ideal: infalible, constante y fidelísimo.

7. «Depositaría en él mis negocios». Deposítalos. «Yo sé a quién he creído» (2 Ti. 1:12).

CONCLUSIÓN: hay que tomar el consejo hoy mismo. «Buscad al Señor» (Is. 55:6).

JOB

Hombre íntegro y piadoso del AT. Vivió en el país de Uz (Jb. 1:1). La primera mención de Job en cualquier otro libro del AT se halla en Ez. 14:14, 16, 20. Este patriarca vivió en alguna parte al este de Palestina, en las proximidades del desierto, en una época en la que los caldeos hacían incursiones hacia occidente (Jb. 1:17). No existe razón alguna para dudar de la historicidad del libro de Job ni de la autenticidad de sus experiencias notables, que se describen, con una gran audacia poética, en el libro que lleva su nombre. El tema es el siguiente: ¿Por qué permite Dios los sufrimientos al justo? Estas experiencias han dado ocasión a un espléndido poema filosófico.

JOB LIBRO.

Forma parte de la literatura llamada sapiencial. Se trata de un libro poético que relata los sufrimientos de Job y el debate entre sus amigos y él acerca de las causas de su desgracia y del gran problema del sufrimiento. En prosa se hallan el prólogo (Jb. 1:1-3:2), las introducciones a los diversos discursos, particularmente la introducción al discurso de Eliú (Jb. 32:1-5), y el epílogo que narra la bienaventuranza recibida por Job por la bendición de Dios (Jb. 42:7-17).

Si el tema del libro es por qué sufren los justos, su objetivo esencial es el de refutar la teoría según la cual el sufrimiento sería una señal de la ira de Dios, y tendría siempre como causa el pecado de aquel que sufre. El AT declara con frecuencia que la rectitud atrae la prosperidad, en tanto que la maldad provoca la desgracia (Éx. 23:20-33; Lv. 26; Dt. 28; Sal. 1; 37; 73; Is. 58:7-13; Jer. 7:5-7; 17:5-8, 18-27; 31:29, 30; Ez. 18).

Las excepciones aparentes a esta norma de las retribuciones constituían un motivo de profunda perplejidad. El antiguo pensamiento hebreo tenía la tendencia a pensar que, por cuanto el sufrimiento era la consecuencia del pecado, todo sufrimiento, incluido el caso de un justo, se debía necesariamente a la comisión de una transgresión específica. Sin embargo, esta conclusión es errónea, bien que todos los hombres hayan nacidoen pecado y susceptibles de caer. Por otra parte, las personas dependen unas de otras, y los inocentes pueden sufrir a causa de los injustos o de los culpables; la maldad no es siempre descubierta y triunfa en ocasiones, al menos momentáneamente. Job no pretende ser absolutamente sin falta, pero mantiene que su castigo está más allá de toda proporción con su pecado.

Al comienzo del libro, Job es muy rico. Posee varios rebaños de ganado mayor y menor, tiene una multitud de siervos y una numerosa familia.

Satán pide y recibe permiso para probar la fe de Job. Todos sus bienes le son arrebatados, y después pierde todos sus hijos. Satanás, que no cede en su intento de quebrantar a Job, obtiene a continuación autorización para atacar su cuerpo.

La fe de Job triunfa en medio de todas las pruebas; finalmente recupera

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