“OBSOLECENSIA PROGRAMADA Y ÉTICA DE LA PRODUCCIÓN.”.

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UNIVERSIDAD SAN JOSÉ

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS

ÉTICA DEL DERECHO

“OBSOLECENSIA PROGRAMADA Y ÉTICA DE LA PRODUCCIÓN.”

DANIA ARIAS GAMBOA        

JENNIFER BRENES SÁNCHEZ.

CIUDAD QUESADA, Costa Rica

SETEIMBRE, 2015.

TABLA DE CONTENIDOS

CAPITULO I        3

 INTRODUCCIÓN  A LA OBSOLESCENCIA PROGRAMADA Y ÉTICA DE LA PRODUCCIÓN        4

 OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS        6

CAPÍTULO II        7

2.1 MARCO REFERENCIAL        8

OBSOLECENCIA PROGRAMADA:        8

V PACKARD THE WASTERMARKERS:        8

ECONOMÍA DEL CRECIMIENTO, SOCIEDAD DE CONSUMO:        10

TIPOS DE CONSUMO        3

TEORÍA DEL DECRECIMIENTO        4

TIPOS DE OBSOLESCENCIA        5

DEFERENTES CASOS OBSOLESCENCIA PROGRAMADA Y ÉTICA DE LA PRODUCCIÓN:        7

CONSECUENCIAS OBSOLESCENCIA PROGRAMADA Y ÉTICA DE LA PRODUCCIÓN        21

CONSECUENCIAS POSITIVAS        24

CAPÍTULO III        25

CONCLUSIONES        26

RECOMENDACIONES:        27

BIBLIOGRAFÍA        30

CAPÍTULO I

1.1 INTRODUCCIÓN

Desde los orígenes de la economía basada en el capital a comienzos del siglo XX, con la Revolución Industrial y la Producción en Masa, la mentalidad responsable de fabricantes y productores para con los consumidores y con el medio ambiente fue prácticamente inexistente. La Tierra era y continúa siendo vista como un universo de recursos destinados a ser explotados por el hombre.  Para la industria, la necesidad de implementar medidas con el fin de estimular el consumo en la sociedad confluyó en uso de unas prácticas llamadas “Obsolescencia Programada” que en líneas generales se basa en fabricar productos para que se vuelvan obsoletos de manera planeada. Estrategia por la cual se estimula la demanda al alentar a los consumidores a comprar de forma artificialmente acelerada nuevos productos si desean seguir utilizándolos, sentándose así las bases de la sociedad de consumo actual, basado en la idea de abundancia en sustitución de la idea de suficiencia.

Esta elección necesaria de las empresas para mantener y alimentar el capital influyó enormemente en la decisión de las mismas sobre el cambio en la arquitectura interna de producción, generándose de esta manera el tener que considerar si utilizar componentes tecnológicos más económicos satisface o no la proyección de vida útil que estén interesados en darle a sus productos.

En ningún lugar del mundo se está lejos de esta realidad que azota el mundo desde varias décadas atrás después de ciertos ingeniosos de la economía vieron la gran posibilidad de salir de una Crisis que acompañaba el mundo es ese momento sin tomar en cuentas los daños a futuro que hoy se presenta a lo largo de los continente estuación se empezó a percibir con mayor fuerza en el momento que la  tecnología electrónica se adueñó de las personas, de esa gran necesidad que surge de obtener las estos aparatos solo por seguir una moda, y tener así lo más nuevo que ha podido lanzar al mercado las diferentes compañías. Provocando en un excesivo consumismo en las personas, obteniendo y considerante esencial el poseer diferentes componentes.

La ética, el razonamiento ante esta eventualidad es casi nula, si no es que completamente nula. No se analiza no se piensa no se mide lo que está ocurriendo el gran impacto que en la Tierra este sistema está contrayendo al mundo los problemas a futuro que se pueden y se están viendo representados en la gran contaminación ambiental principalmente que esto deja

Muchos de los consumidores consideran que no cooperan a este problema, pero existen diferentes maneras de pertenecer a este desenfrenado proceso de obsolescencia y consumismo, volviéndose así adictos a la necesidad de estar obteniendo lo último en tecnología y dependientes de los aparatos electrónicos.

Por otra parte, otro tema importante de resaltar es la ética de la producción ya que bien es cierto si los productos elaborados no son creados con la reglamentación adecuada, no pasarían control de calidad para la venta de los mismos, pero entonces utilizan las grandes compañías ciertos productos de “calidad” para que pasen toda prueba pero la duración del producto no es de tan larga vida útil o bien de la calidad idónea para el precio que se paga por los tales productos. Todo esto no por falta de conocimiento sino más bien como una táctica de las empresas para vender aún más. Por lo cual, el tema de obsolescencia programada y ética de la producción van muy de la mano ya que uno es consecuencia del otro.

1.2 Objetivos

1.2.1 Objetivo general.

Investigar  qué es obsolescencia programada y la ética en la producción.

1.2.2 Objetivos específicos

• Diferenciar los diferentes tipos de obsolescencia que se presentan en la obsolescencia programada.
• Conocer las maneras en que la obsolescencia afecta al mundo, creando una conciencia consumista.

CAPÍTULO II

2. DESARROLLO TEÓRICO

2.1 MARCO REFERENCIAL

OBSOLESCENCIA PROGRAMADA

La obsolescencia programada es la programación del fin de la vida útil de un producto o servicio, de modo tal que tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante o por la empresa durante la fase de fabricación del producto, éste se declare obsoleto, no funcional, inútil o inservible.

Se dice que este nuevo estudio del mercado surgió cuando Bernard London propuso terminar con la Gran Depresión, a través de esta práctica. Su fin era que las empresas fabricaran productos que rápidamente se deterioran para así, más rápido tengan que ser sustituidos y así reactivar la industria y la demande de los productos

El concepto de la obsolescencia programada surgió entre el 1920-1930, cuando, en la revolución industrial, la producción dio lugar a un nuevo modelo de mercado, la cual es la  clave para el desarrollo o el fracaso de la empresa. Surgió la idea de crear productos que se dañaran en un determinado periodo de tiempo, a pesar de existir los conocimientos que hagan a ese producto tener una vida útil mucho mayor, lo cual se llegó a prohibir mediante el cártel.

V PACKARD (1960) THE WASTERMAKERS:

“La obsolescencia programada no es tan mala si bien en 1954 con la depresión de E.E U.U logro producir trabajo y más aún agilizar la economía. También ha logrado desgastar los recursos de nuestro mundo haciendo un lado el concepto de reparación por el de sustitución”

La obsolescencia programada asegura una continua demanda y, por tanto, una continua oferta. Esto implica un grandísimo desarrollo de la economía. Consiste en crear objetos breves que, mediante la innovación, crean sucesivamente necesidades en el consumidor, en la cual lo mantienen con la necesidad de consumir. La obsolescencia programada puede ser funcional, cuando el producto se deteriora de forma predeterminada; de diseño, que consiste en que un bien quede obsoleto al pasar de moda; o bien tecnológicamente, cuando el producto queda obsoleto dado a su tecnología diferenciada y, en ocasiones, incompatible con los nuevos avances y actualizaciones tecnológicas.

Con la obsolescencia programada se consigue un dinamismo económico, ya que da pie a la creación de puestos de trabajo en fábricas, transportistas de bienes, dependientes, servicio de reparación.

El problema más grave de este sistema es las consecuencias que conlleva: ¿qué pasa con todos los productos desechados, a dónde van? Pese a iniciativas creadas por las empresas que aseguran un mantenimiento ecológico de sus residuos, incluso en ocasiones ofrecen un servicio al que llevar el producto antiguo donde la empresa se encarga de su eliminación; la realidad muestra que, efectivamente, existen graves consecuencias. Toneladas de estos productos desechados van a parar a países tercermundistas, donde la basura y la contaminación perjudican muy gravemente a sus habitantes.

Por otro lado, con la obsolescencia programada se obliga al ciudadano a comprar y comprar. Se estudia el diseño de los productos que conlleve un fin de los mismos. Ante esto surge la pregunta sobre si esto es realmente ético, si es ético crear para destruir. Pero, ¿Qué pasaría si no existiera la obsolescencia programada? Esta es la pregunta transcendental.

Si la obsolescencia programada no existiese, la consecuencia más inmediata de que los productos no se averíen, es que no existe la necesidad de comprar uno nuevo, por lo que la demanda de estos productos desciende hasta prácticamente hacerse inexistente. Esto conlleva a la eliminación de miles de puestos de trabajo, ya sean de ejecutivos, empresarios, dependientes, transportistas de estos bienes, incluso la disminución de la demanda de materias primas. Como vemos, los puestos de trabajo se reducen a la producción de bienes caducos por naturaleza, como los alimentos; y otros servicios como la educación y la sanidad.

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