Moda O Vida

¿MODA O VIDA? EL PODER DE LA SOCIEDAD Y LA TECNOLOGIA

Los seres humanos vivimos en una sociedad llena de grandes avances tecnológicos y ésta exige hacerlos parte de tu vida, ellos han proporcionado mejoras en cuanto a la comunicación, trabajo más ligero, educación, información constante y muchas más.Pero ¿será que todas estas mejoras compensan el perjuicio para nuestra vida?

“El progreso tecnológico ha contribuido a aumentar la diversidad y complejidad de los desechos que contaminan el medio ambiente. El gran crecimiento en la producción de aparatos eléctricos y electrónicos que, gracias a la innovación tecnológica y la globalización del mercado, acelera su sustitución y por lo tanto su desecho, lo que produce diariamente toneladas de basura electrónica” (Benítez, 2006, Párr. 1). La tecnología es valiosa en la sociedad en la que día a día nos movemos, ya que principalmente ha “reducido” la distancia entre las personas, permitiendo una comunicación eficaz y eficiente aun cuando estamos a kilómetros de distancia. Por eso adquirimos muchos aparatos electrónicos y tecnológicos en poco tiempo, en algunos casos con el fin de una comunicación y en el peor de los casos por estar a la vanguardia o a la “moda”.

Lo que muchos no sabemos es a dónde van a parar todos esos aparatos tecnológicos que adquirimos y de qué están hechos. Existe lo que llaman “la economía de materiales; distribución – consumo – descarte” (Leonard, 2010a url: http://www.storyofstuff) en su documental La historia de las cosas. Y no los muestra como un proceso lineal que rige nuestra sociedad y que sin darnos cuenta nos está llevando a dejar una huella ecológica.

Básicamente inicia en el momento en que empieza la explotación excesiva y desperdicio de los recursos naturales con que contamos, que son utilizados para producir todos esos aparatos tecnológicos de alta gama que el mundo de hoy nos ofrece (Led, portátiles, ipad, iphone, blackberry, etc.). Así mismo estos son producidos con un montón de químicos y componentes tóxicos perjudiciales para los seres humanos, incluso hasta en las almohadas se encuentran todos estos tóxicos que nos están haciendo daño inconscientemente y aun así adquirimos todos estos aparatos por estar a la moda.

La economía actual se basa principalmente en el consumo “en el mundo desarrollado uno de los más grandes problemas ambientales hasta el momento, el consumismo” (Zapata. 2012) y es aquí donde nos enfrentamos a dos fenómenos como lo son “la obsolencia planificada que consiste en producir elementos que se vuelvan inservibles en el menor tiempo posible”; y por otro lado “la obsolencia percibida que utiliza la estética y la moda para desechar elementos que son perfectamente útiles” (Véase el documental de Annie Leonard: La historia de las cosas (The Story of Stuff, url: http://www.storyofstuff, o consúltese: Leonard, 2010b). Gracias a estos fenómenos es donde dejamos a un lado de que están hechos todos esos aparatos y por tener el “mejor” seguimos comprándolos.

Por otro lado gracias a los dos fenómenos anteriores (obsolencia planificada y obsolencia percibida) desechamos en muy poco tiempo todos estos equipos, incluso cuando algunos aún están en buenas condiciones o son útiles; ellos siguen liberando todos esos tóxicos con los que fueron producidos, durante su vida útil y es el organismo quien los capta afectando incluso las neuronas, aparte de toda la contaminación o perjuicio que le hacen al ambiente con sus led o luces infrarrojo que muchos de ellos contienen y todo esto nos va afectando a nosotros ya que somos parte del ambiente.

Castro (1992) afirma "El deterioro acelerado y creciente del medio, es hoy día, posiblemente el peligro a largo plazo más grave que enfrenta toda la especie humana en su conjunto, y muy en particular el aún llamado Tercer Mundo........En lo que respecta a los países subdesarrollados, es uno de los factores que agrava con más fuerza las condiciones de vida de cientos de millones de personas en el Tercer Mundo". Esta es una realidad que ya estamos percibiendo, en 1992 cuando Castro hizo su escrito hablaba de un peligro a “largo plazo” y ese largo plazo ya pasó.

Si miramos las noticias de actualidad en la prensa, todo lo que está ocurriendo con el clima, como se derriten los polos; nos damos cuenta de que lo que antes veíamos como un peligro a futuro, hoy ya lo estamos viviendo por falta de conciencia y en el peor de los casos por desinformación. La huella ecológica que desde los inicios de la tecnología

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