PRODUCTOS MODULO I

PRODUCTO 1

Documento de reflexión sobre la importancia de la complejidad en el abordaje de los problemas ambientales y su vinculación con el campo de la educación ambiental

Al afirmar Edgar Morin que el problema ambiental es, en la sociedad postindustrial un imperativo histórico: o lo resolvemos o nos extinguimos como especie, asume que eso que hasta ahora hemos entendido y denominado “progreso”, no es tal. Al confundir el avance tecnológico con la evolución humana, existe latente peligro, el reloj sigue su curso y el cambio climático presagia cada vez más devastación, basta con ver las estaciones del año, tan cambiantes y tan irregulares en lo largo y ancho del planeta, que trae consigo repercusiones en la economía, la salud, la política, la producción, el turismo, la educación e inclusive la reproducción y preservación de especies animales y vegetales. Por eso, la afirmación que Einstein lanzó el siglo pasado, es hoy más pertinente que nunca: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”. Hasta hace unos años, la problemática ambiental se trataba con la visión de algunas disciplinas del conocimiento que no acostumbraban comunicarse entre sí (multidisciplinariedad), pero que cuando decidieron articular temas y objetivos comunes, lograron dar respuesta a algunos de los retos más urgentes del tema, como la creación de fuentes de energía alterna, el desarrollo sustentable o la arquitectura bioclimática (interdisciplinariedad) sin embargo, esto no ha sido suficiente. Desde la perspectiva de Morin, las parcelas del conocimiento, como las conocemos hoy en día, tienen que ser repensadas para trascender todo lo que es conocido hasta hoy pero que no ha dado respuestas a la problemática ambiental (transdisciplinariedad).

No es fortuito que Enrique Leff afirme que la crisis ambiental es también una crisis del conocimiento, pues interpela las disciplinas en las que el hombre ha dividido al mismo para su estudio y asume que no hay tales, solamente saberes rigurosos que articulados para responder a las necesidades de un entorno cambiante y contingente. Y es precisamente en el campo de la educación ambiental donde es posible abordar la complejidad que Morin señala para tratar los temas que han producido lo que denominamos “campos emergentes”, porque los puntos en común propios de cada disciplina, dependen de la imaginación del estudiante, maestro o investigador. “En época de crisis, la imaginación es más importante que el conocimiento” dijo Einstein y Morin, por supuesto, está de acuerdo.

PRODUCTO 2

Documento. Reflexión crítica sobre el tema de la interdisciplina en la educación ambiental en el sistema educativo, que entregará al inicio de la sesión 3

En los cursos de planeación que se han desarrollado y se han impartido bajo el esquema de la RIEB, surgieron preguntas como: ¿Qué es la transversalidad? ¿Cómo se aborda en el aula? ¿Es exclusiva de la RIEB? ¿En qué asignaturas se puede aplicar?; si bien en este escrito no se pretenden contestar o abordar a profundidad cada una de las respuestas a dichas cuestiones. Es sabido que aun a la fecha todavía siguen estando presentes en la mayoría de los profesores, será porque apenas se encuentran implementando a con dudas o inseguridades el plan 2011.

En ciclos pasados se abordó la creación de los llamados "Ambientes de Aprendizaje" como una estrategia para vehicular los contenidos transversales que reflejan los grandes y graves problemas sociales que aquejan a nuestro país, tales como:

• Igualdad de oportunidades entre personas de distinto sexo

• Educación para la salud

• Educación vial

• Educación del consumidor

• Educación financiera

• Educación ambiental

• Educación sexual

• Educación cívica y ética

• Educación para la paz

Si se observa parece una propuesta más de la Secretaría de Educación Pública para "actualizar" la práctica docente; sin embargo, hay que tomar algunas consideraciones que son importantes y que no se deben eludir a partir de estas iniciativas "reformadoras".

Los ambientes de aprendizaje, llamados también ambientes educativos, no son nuevos. Ya desde el siglo XVIII Pestalozzi incluyó este concepto en su obra "Gertrudis y yo" o "Leonardo y Gertrudis" donde expone sus teorías acerca de la reforma social a través de la educación, haciendo énfasis en lo que hoy se retoma: La cultura tiene una parte pedagógica.

Los problemas que aquejan al país son enormes, pero no es nuevo que los profesores den cuenta de ellos en carne propia: espacios insuficientes e insalubres para llevar a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje, bajos salarios, inseguridad, escaso o nulo apoyo de los Padres de familia, entre otros retos que se enfrentan en la realidad, no en la teoría. Ahora se pide que los docentes den cuenta a través de la transversalidad de situaciones que escapan del radio de acción y de las que siempre han sido tan conscientes y que se han vivido y seguido en carne propia.

La autora, Jakeline Duarte, hace referencia al declive de la hegemonía de la institución escolar, algo que se debe profundizar en otro momento y que se tomara distancia desde ahora.

La institución escolar es una célula con vida propia por sí misma, cuya función, además de ser formadora es certificadora de aquellos saberes que garantizan que el alumno tiene los conocimientos para acreditar el grado o su educación primaria. Este enfoque no es nuevo, desde los años 60´s en el Brasil de Freire, se pronunciaba que la escuela y los libros eran vehículos de adoctrinamiento de las masas, por lo que se establecía un postulado en donde se hacía referencia que los niños se podían educar en cualquier espacio, convirtiéndolo en un verdadero ambiente educativo, pero con ello no existía la figura del Maestro, sino del Educador, ni la del alumno, sino la del educando, en el marco de un proceso de enseñanza aprendizaje muy particular, en el cual "nadie enseña a nadie, los individuos se educan unos a otros en comunidad" (¨Pedagogía del Oprimido":17)

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