Actividades Desarrolladas De Lenguaje Escrito

III. Situaciones de aprendizaje desarrolladas

Las situaciones de aprendizaje “…se definen como formas de organización del trabajo docente que buscan ofrecer experiencias significativas a los niños y que generen la movilización de sus saberes y la adquisición de otros” (SEP, 2012, p.173).

Estas actividades se registran por medio de la planeación. “La planificación didáctica representa una oportunidad para la revisión, análisis y reflexión que contribuyen para orientar su intervención en el aula” (SEP, 2012, p.167). Dicho formato contiene ciertos elementos que se deben tomar en cuenta para su elaboración: aprendizajes esperados, competencias, campos formativos, estándares, estrategia a utilizar, tiempo, organización, espacio, recursos, inicio, desarrollo y cierre de la situación de aprendizaje.

Los aprendizajes esperados son el referente por el cual se orienta la planificación, se presentan en el programa de manera gradual, indicándonos cuáles son los principales a atender y una vez trabajados podremos continuar con los que siguen. Por otro lado los campos formativos nos ayudan a tener un equilibrio en cuanto a las áreas atendidas, también nos muestran las competencias y la forma en que podemos favorecerlas.

Considerando lo anterior, dentro del inicio de la descripción en la planeación de cualquier situación de aprendizaje, se procura cuestionar a los niños y dar lugar a un diálogo amplio en el cual manifiestan lo que saben sobre determinado tema, en el desarrollo se da una descripción más detallada sobre la organización de la situación de aprendizaje y sobre lo que el docente espera que el alumno ejecute, por último el cierre debe dar lugar a la reflexión por parte del grupo, analizando sus capacidades y las posibles dificultades que enfrentaron.

Para llevar a cabo la planeación también se deben considerar los conocimientos previos, intereses y principalmente las necesidades de los alumnos. Así mismo, es importante diseñar un plan de trabajo que se desarrolle y dé lugar a un ambiente rico en aprendizaje, aprovechando en lo posible la flexibilidad que ofrece nuestro programa. “La flexibilidad en la planificación posibilita que el docente cuente con la libertad de elegir entre distintas propuestas de organización didáctica, por ejemplo, talleres, situaciones didácticas, proyectos, entre otros” (SEP, 2012, p.173).

En mi práctica docente, tomé en cuenta todos estos aspectos que acabo de mencionar. Tener pleno conocimiento sobre qué elementos debía llevar la planeación, me facilitó la elaboración de la misma, me permitió llevar un control sobre mi trabajo en el aula, además de que me fue de gran utilidad para conocer las posibilidades que tenía de organizar los aprendizajes de los niños, así como para identificar y utilizar cada una de las modalidades que podía manejar en el trabajo, por supuesto tomando en cuenta las necesidades e intereses de los alumnos.

Durante el ciclo escolar, tuve oportunidad de trabajar con algunas de las modalidades, las que más utilicé fueron las situaciones didácticas, después un poco con proyectos y talleres. Por último, mencionaré que una vez aplicada la situación de aprendizaje me disponía a evaluar, de ésta forma determinaba si había logrado lo que pretendía y/o identificaba las principales dificultades que enfrentaban los alumnos. Para esto existen diversos instrumentos, por ejemplo, listas de cotejo, rúbrica, portafolios, registro de observación, evidencias, entre otras.

A continuación, nombraré algunas de las actividades que me sirvieron de apoyo para favorecer el desarrollo del lenguaje escrito dentro del aula. Una de las primeras situaciones didácticas que se desarrollaron durante el ciclo escolar fue, “letras por aquí, letras por allá”, dentro de ésta situación se llevaron a cabo dos actividades que en lo personal considero, fueron exitosas.

La primera actividad “¿Cómo se llama?” favoreció la competencia: utiliza textos diversos en actividades guiadas o por iniciativa propia e identifiquen para qué sirven, dentro del lenguaje escrito. Tenía como aprendizaje esperado: explora diversidad de textos informáticos literarios y descriptivos, y conversa sobre el tipo de información que contienen partiendo de lo que ve y supone. La estrategia utilizada fue trabajo con textos e imágenes, se llevó a cabo dentro del aula y fue de manera grupal, los recursos utilizados fueron láminas con diferentes objetos y animales, además de tarjetas con los nombres de los mismos por separado.

Al comienzo de la actividad los niños comentaron sobre si algunos ya sabían o no escribir y si conocían la inicial de su nombre, algunos de ellos mencionaban que sí, que no sabían escribir pero si identificaban como comenzaba su nombre. Después observaron una serie de imágenes que estaban colocadas en un extremo del pizarrón, mencionando cada uno de los nombres de los objetos, por ejemplo: mesa, casa, ratón, etc. Comentaron sobre con qué letra comenzaba cada nombre del objeto o animal que habían identificado y analizaban su sonido, luego de esto se les presentó una serie de palabras del otro extremo (nombre de cada cosa o animal), se les explicó que se irían relacionando texto con imagen. Pasaron la mayoría de los niños a relacionar cada uno, mientras el resto del grupo apoyaba al buscar la palabra correcta perteneciente a cada imagen, se repasaba el sonido de cada inicial y se fueron relacionando poco a poco. Al finalizar para comprobar el aprendizaje de los pequeños se les entregó una hoja con diferentes dibujos de los que se habían visto durante la clase, y debajo una línea donde tendrían que tratar de escribir el nombre de cada objeto o animal.

Los niños se mostraron muy interesados en la actividad y dispuestos a participar, además de que la actividad despertó de forma atractiva el interés de los niños ya que analizaban el sonido de cada palabra que mencionaban, no tuvieron dificultades ya que se les brindó apoyo, logrando registrar el nombre de cada objeto mediante el copiado.

La segunda actividades fue “Somos escritores”, favoreció la competencia: utiliza textos diversos en actividades guiadas o por iniciativa propia e identifiquen para qué sirven, dentro del lenguaje escrito. Tenía como aprendizaje esperado: explora diversidad de textos informáticos literarios y descriptivos, y conversa sobre el tipo de información que contienen partiendo de lo que ve y supone. La estrategia utilizada fue trabajo con textos e imágenes, se llevó a cabo dentro del aula, originalmente se realizaría de forma grupal pero para mejores resultados se trabajó en parejas, los recursos utilizados fueron papel, lápiz, tijeras, pegamento y recortes. Aquí se invitó a los alumnos a observar los libros que se tenían en área de biblioteca, los alumnos observaron y comentaron sobre las características que tenían los libros, por ejemplo uno de los alumnos comentó que los libros tenían una portada con el nombre del libro, otros comentaron que tenían letras y dibujos, y ya por último les hice ver que cada libro tenía un autor que es quien escribe el cuento o el libro y que además cada uno tiene un inicio, un desarrollo, y un cierre.

Después se les cuestionó si les gustaría realizar su propio cuento, los alumnos se mostraron muy entusiasmados y respondieron positivamente ante la propuesta, entonces se les repartió el material y cada pareja comenzó a idear su historia utilizando cosas de su imaginación y algunos recortes, el tiempo destinado a esta actividad fue de media hora; al finalizar algunos compartieron su cuento y el resto se colocó en área de biblioteca para después continuar con su exposición. Los alumnos manifestaron actitudes de satisfacción ante su trabajo y se mostraron muy contentos al poder trabajar con otro compañero.

Éstas y otras actividades me permitieron trabajar el lenguaje escrito, además de que no fue tan complicado favorecer éste aspecto por medio de otras actividades que tuvieran como principal objetivo favorecer otros campos formativos. Por ejemplo, otra situación de aprendizaje que promovió el lenguaje escrito fue “Seamos chefs”, ésta actividad favorecía principalmente el campo formativo de desarrollo físico y salud, sin embargo ya que realizarían una receta, aproveché la oportunidad para favorecer de manera transversal la competencia: interpreta o infiere el contenido de textos a partir del conocimiento que tienen los diversos portadores y del sistema de escritura.

Aquí los niños observaron la receta de manera escrita, además de que incluía dibujos para que fuese más sencilla la comprensión de dicho texto, los niños interpretaron las imágenes fácilmente. La estrategia utilizada fue trabajo con textos e imágenes y los recursos fueron la cartulina con la receta y otra de la receta con dibujos, los ingredientes del sándwich, platos, manteles, cubiertos, plástico, etc. Los alumnos observaron y prestaron atención a los pasos a seguir, comentaron sobre lo que creían que mencionaba el texto, guiándose también con los dibujos y la numeración pudieron realizar la receta sin mucha dificultad. Los pequeños se mostraron muy interesados en lo que estaban realizando, les gustó mucho la actividad ya que comentaron nunca antes haber preparado algo por sí solos, además de que se sintieron satisfechos al haber comprendido lo que decía la receta.

Otra de las situaciones en las que pude infiltrar el lenguaje escrito fue en la de “los animales domésticos”, dentro de la actividad “conociendo al pez”, el aprendizaje esperado fue que describieran características de los seres vivos (partes que conforman una planta o un animal) y el color, tamaño, textura y consistencia de elementos

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