Aplicación de la Ergonomía al proceso: Ergonomia

Aplicación de la Ergonomía al proceso:

La Ergonomía es una ciencia aplicada que trata del diseño de los lugares de trabajo, herramientas y tareas que coinciden con las características fisiológicas, anatómicas y psicológicas y las capacidades del trabajador.  Busca la optimización de los tres elementos del sistema (hombre-máquina-ambiente), para lo cual elabora métodos de estudio del individuo, de la técnica de la organización del trabajo.

La ergonomía física se preocupa por las características anatómicas, antropométricas, fisiológicas y biomecánicas humanas, en tanto que se relacionan con la actividad física.

Sus temas más relevantes incluyen posturas de trabajo, sobreesfuerzo, manejo manual de materiales, movimientos repetitivos, lesiones músculo-tendinosas (LMT) de origen laboral, diseño de puestos de trabajo, seguridad y salud ocupacional.

Medidas preventivas:

1. utilizar máquinas y utensilios con el marcado CE (amasadoras, laminadoras, batidoras, etc.) que dispongan del documento que acredite el grado de conformidad sobre los requisitos esenciales de seguridad y salud exigidos en la Unión Europea para que se puedan comercializar en los países comunitarios, así como el manual de instrucciones.
2. Equipar con resguardos o dispositivos de protección toda parte de una máquina que presente peligro de atrapamiento, corte, abrasión o proyección. Nunca se deberá anular o puentear cualquier dispositivo de seguridad de que disponga la máquina, ni tampoco retirar las protecciones o resguardos.
3. situar los mandos de puesta en marcha alejados de zonas peligrosas y éstos sólo podrán accionar de forma intencionada. Cada máquina debe ir equipada con dispositivos de parada de emergencia que permitan detenerla en condiciones de seguridad. Deben ser visibles y de fácil acceso, de color rojo sobre fondo amarillo.
4. Manejar los cuchillos y otras herramientas de corte con precaución y mantenerlos correctamente afilados para evitas movimientos descontrolados que puedan cortar o herir al propio trabajador que los maneja a otro compañero. Después de usarlos, hay que limpiarlos y guardarlos en un lugar seguro (cajones o soporte especifico para cuchillos) para evitar que caigan o tropezar con ellos.  También hay que tener en cuenta que deben usarse empujadores para presionar los alimentos en las máquinas y nunca realizar esta operación directamente con las manos.
5. Eliminar diariamente los desechos y cualquier otra suciedad del suelo o de las instalaciones, al igual que los derrames de las materias primas (harian, azúcar, grasa, etc.) estos deben ser colocados en recipientes adecuados.
6. Adecuar la altura de las mesas  del obrador  a la estatura de las personas que trabajen ahí. la medida adecuada debe estar entre 85 y 95 cm para los hombres y entre 85 y 90 para las mujeres.
7. Procurar que la distancia de alcance que la distancia de alcance horizontal de la mesa de los trabajadores no supere los 60 cm., con el objetivo de evitar posturas forzadas  de la espalda. En actividades como, por ejemplo, estirar la masa con el rodillo es aconsejable poner una marca reconocible por el trabajador en el límite del máximo alcance recomendable. Este recurso informa sobre un riesgo (mala postura de la espalda), al mismo tiempo que indica cómo evitarlo (no sobrepasar la marca indicada).
8. Evitar permanecer mucho rato de pie, en una misma posición, por lo que es recomendable favorecer la alternancia de posturas y los descansos. También conviene apoyar una pierna en una banqueta, alternando las dos piernas, para mantener la espalda más descansada.
9. Levantar los sacos u otras cargas pesadas siguiendo las reglas básicas de manipulación manual de cargas, separar los pies hasta conseguir una postura estable, doblar las rodillas, acercar al máximo el objeto al cuerpo, levantar el peso gradualmente y no girar el tronco mientras se está levantando la carga; es preferible pivotar sobre los pies. Tener en cuenta que es mejor sustituir los levantamientos de los sacos por empujes o arrastres.
10. Pedir ayuda a los compañeros cuando haya que manipular objetos pesados. Cumplir especialmente esta norma cuando una persona tenga que levantar un peso superior a 30 Kg. y su trabajo habitual no sea el de manipulación de cargas, así como cuando el objeto sea muy largo y una sola persona no pueda trasladarlo de forma estable. Con frecuencia, el trabajo en panaderías implica transportar material u objetos a mano,
    sin ayudas mecánicas, con el consecuente riesgo que esto puede representar para la espalda (ver medidas sobre pesos máximos recomendados).
11. Usar recipientes accesorios de poca capacidad, que permitan realizar el trabajo sin necesidad de manipular grandes pesos. Por ejemplo, usar palas o recipientes con asa para tirar la harina en la amasadora, en lugar de hacerlo directamente del saco, como suele ocurrir en numerosas ocasiones.
12. Intentar almacenar las mercancías pesadas a la altura de los codos para que resulte más fácil
    cogerlas. Realizar el aprovisionamiento de materiales lo más cerca posible de donde tengan que ser usados (estanterías cerca de la mesa de trabajo).
13. Establecer pausas periódicas que permitan recuperar las tensiones físicas y descansar. Favorecer la alternancia o cambio de tareas para conseguir que se utilicen distintos grupos musculares y, al mismo tiempo, se disminuya la monotonía en el trabajo.

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