Arte y Tiempo en la Obra de M. Restrepo

Arte y tiempo

Introducción

El tiempo sigue siendo un tema abordado por múltiples artistas, en obras de toda índole. Al entrar a la exposición de “¿Es inútil sublevarse?” (Guayaquil, Museo Antropológico de Arte Contemporáneo MAAC, noviembre 2016) del colectivo artístico la Artefactoría, se esperaba encontrar una obra de artista Marco Restrepo-uno de sus miembros fundadores- que siguiese su línea de trabajo, usando o haciendo referencia al cuerpo humano en diferentes formas , como lo había hecho desde la década de los ochenta en su obra “El Cuerpo de Cristo” (1985) , hasta su primera exposición en solitario en el año 2013, en galería DPM. Pero con lo que se encuentra es un conjunto de estalagmitas en un recinto oscuro, que simula una caverna realizada por el paso del tiempo.

Lo que recuerda en parte a la visión de lo que es el tiempo para Martín Heiddeger, aquella temporalidad efímera pero presente y vivencial, lo que también nos lleva a pensar en Paul Ricoeur, que en parte comparte esta visión subjetiva, múltiple y para nada lineal de lo que es el tiempo. Ahora, lo que nos lleva a cuestionarnos es cómo teorizar esta obra de Restrepo dentro de las concepciones del tiempo para ambos teóricos y de cómo esta gana aún más significados gracias a la interpretación de sus procesos que en el tiempo mismo de su realización.

La obra

La instalación es una obra expuesta en el Museo antropológico de Arte Contemporáneo (MAAC). Lleva al espectador a una zona oscura, apenas iluminada por una luz azul como si proviniese de una gruta, la misma que simula la caída de agua en la misma sobre un suelo lleno de pierdas y arena, materiales primos que se encuentran en las cavernas. El sonido claro del goteo más la iluminación proporcionada, dan la apariencia de un ojo de agua formándose en ese único punto con luz. Más no es todo lo apreciable en la obra: vemos en su centro unas tres estalagmitas grises, una colgando, y las otras en el suelo. Si una persona no tiene cuidado, podría tropezar como en cualquier rincón oscuro, por lo que, en algún momento es necesario encender una luz, como si en verdad se estuviese caminando en una vena rocosa; al encender dicha luz adicional -como la de una linterna o la del flash de un celular -, se puede encontrar con estalactitas en todo el recinto, arriba y abajo, muy puntudas o rectas, todas ellas brillando peligrosamente a la altura de un adulto promedio.

Un hecho curioso es que la mezcla de materiales primarios y rudimentarios como el metal -el latón, que está relacionado generalmente con el tiempo, su uso en sus relojes, su durabilidad y difícil corrosión- , y la piedra, junto con los nuevos medios y tecnologías al alcance de las personas como lo son el proyector, la luz artificial y la sonoridad para la recreación de un espacio que podría mimetizar no solo con el contexto del tiempo como una experiencia, sino también el ver como es la mente del artista para con el mundo, mostrando un todo pero que solo es visto o descubierto por quienes tienen las herramientas y conocimiento necesario, mismo que solo es adquirido por la inversión del tiempo del mismo espectador para con la obra.

En el texto curatorial que se encuentra presente a la entrada de la instalación indica que es una metáfora ante el tiempo invertido en el proceso de creación de la obra como tal, una mímesis a la naturaleza que tarda miles de años en transportar por medio del agua, los minerales necesarios para la creación de estas formaciones rocosas. <<La metáfora de la obra compara estos cúmulos con la experiencia-tiempo implícita en toda obra de arte: ella nos transporta al lugar de los sucesos>>

El autor

Marco Restrepo es uno de los seis miembros fundadores del grupo de artistas Artefactoría, mismo que marcó un hito en la historia del arte contemporáneo de la ciudad de Guayaquil. Oriundo de Catarama, provincia de Los Ríos y uno de los generadores de cambio en el campo del arte, siendo uno de los profesores fundadores del Instituto Tecnológico de Artes del Ecuador, ITAE, hoy conocido como la Universidad de las Artes. Ejerce su oficio como artista desde muy joven, participando a los quince años en un Salón de Julio y ganando un premio nacional de pintura a los diecinueve años, poco después de haberse graduado del Colegio de Bellas Artes en Guayaquil.

No hay como hablar de Restrepo sin nombrar a la Artefactoría, colectivo de artistas formada en el año de 1982, como uno de sus miembros fundadores tomaba referencias en un principio de los cuadros de El Bosco, como la mayoría de los integrantes, que les era complicado conseguir información del mundo del arte a nivel global, y que sus máximas referencias cercanas, eran con mucha suerte, las primeras Vanguardias Artísticas; hasta la llegada de Juan Castro, quien les empezó a mostrar obras modernas y contemporáneas que se estaban dando en países del primer mundo como Alemania y Francia, dónde este último había estudiado.

No había un estilo definido como grupo más que los mensajes políticos para el contexto histórico en el que nace la agrupación, durante el gobierno de Ing. León Febres-Cordero. Sintiendo una mayor predilección por la pintura y la instalación, una de sus obras más reconocidas durante uno de los últimos eventos producidos por la agrupación llamado “Arte en la calle”(1987), se llama “Levantamiento de cuerpos” , que eran siluetas hechas en el suelo de las calles, simulando los cuerpos desaparecidos, y de las personas asesinadas al estilo de las películas estadounidenses de la época, no solo juega con el espacio, sino también con el tiempo y la historia que representa su acción dentro de la obra.

El tiempo, la narración y la multiplicidad de tiempos

El tiempo y la narración según

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