Calidad Total: Logro máximo Del Control De Las Operaciones

Calidad total: logro máximo del control de las operaciones

Johan Vitaliano

En el universo empresarial, y mucho más, en el industrial, el término calidad total es cada vez más usado, y relacionado no solo a procedimientos específicos, sino que a todos los procesos que conforman el engranaje operativo de la Compañía. Calidad se conceptualiza como el grupo de propiedades inherentes, que permiten juzgar sobre el valor de aquello que cuenta con esta característica, en consecuencia, calidad total es un término que representa la evolución de la calidad que décadas atrás se relacionaba únicamente con las características del producto y/o servicio que finalmente se ofrecía y era recibido y consumido por los clientes, ahora bien, este estado evolucionado de la calidad al que aspiran y llegan las Compañías está relacionado al alcance de la eficacia a nivel de todos sus procesos, haciendo énfasis en el proceso de mejora continua.

La calidad total es un objetivo logrado por medio del monitoreo cercano y exhaustivo de las operaciones en busca de identificar eventos y/o hallazgos con situaciones de mejora en busca de la efectividad, con un enfoque de orientación al cliente, de gestión participativa, de control, de asegurar la calidad y de uso de herramientas que permiten analizar la gestión de calidad de cada Compañía. He aquí la importancia que representa la adopción de este enfoque, dado que en definitiva, influye en la satisfacción final de la necesidad del cliente, esto considerando el nivel de exigencia de calidad causado tanto por la globalización, como por el nivel de competencia que se encuentra en el mercado, ante esto es necesario que las compañías adopten un Sistema de Calidad Total, enfocado en la satisfacción de la necesidad del cliente, para cuya gestión se cuenta con el TQM (Total Quality Management), en este sentido se sostiene que el control de calidad no se limita al solo producto de la empresa, sea este un bien o un servicio, sino que se extiende a todas las funciones y todos los servicios involucrados en el proceso. Podemos decir entonces, sobre la base de lo hasta ahora expuesto, que para alcanzar el objetivo de la calidad total es imprescindible monitorear constantemente las operaciones de la Compañía en busca de mejorar continuamente el proceso de satisfacción de la necesidad del cliente, y además en este proceso, se deben involucrar todas las áreas que forman parte del aparato de gestión y de producción que trabaja en este sentido.

Según Joseph Kelada, la calidad total es un enfoque de gestión direccionado al alcance del éxito, lo cual se arraiga a la filosofía de cada empresa. De acuerdo a lo indagado sobre la filosofía de los japoneses al respecto, considerando este país como la referencia principal en cuanto a la aplicación de este enfoque, nos encontramos con la definición TQC (Total Quality Control ), el cual representa al control de calidad constante que conlleva a la concepción de la entrega de un producto acabado capaz de satisfacer al cliente. Adicionalmente se declara respecto a esto, que el control de calidad no se limita solo al producto de la empresa, sino que debe aplicarse por todos lados, en todas las funciones y en todos los servicios que para esto se involucran. Además se logra identificar que en el término utilizado para denominar a este enfoque de gestión, la palabra “total” se refiere tanto al nivel de control como al nivel de calidad

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