Constitucional

¿Qué opinas de lo establecido en el artículo 39 constitucional? “La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.” Particularmente por lo que hace al último enunciado: “El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno”.

Antes que nada debemos partir que en nuestro país, desde el siglo XIX la Constitución declara y establece el poder soberano del pueblo mexicano. Nuestra actual Constitución de 1917 en su articulo 39 señala: “Artículo 39. La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno”.

El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.

Este precepto constitucional, nos habla de soberanía nacional y no de la soberanía popular pero se establece que el detentor es el pueblo. Sin embargo, no es extraño el que se interpreten como sinónimos pero el análisis de nuestro derecho deja en claro que es el pueblo el verdadero titular de la soberanía. Nuestros legisladores siempre han concebido al pueblo como el autentico titular de la soberanía. Es el pueblo quien tiene la autoridad incontrovertible, intransferible y absoluta. No tiene porqué haber confusión, para nuestros constituyentes soberanía nacional y soberanía popular son lo mismo.

Ya ha quedado claro que nuestra tradición y en nuestra legislación se reconoce la soberanía del pueblo pero falta precisar si realmente puede ejercer esta soberanía.

¿Es realmente el pueblo quien se gobierna?, ¿Son los ciudadanos quienes se dan sus leyes?, ¿Puede el pueblo darse el tipo de gobierno que desea o cambiarlo en todo tiempo?

Los críticos afirman que la soberanía popular es solo una utopía o que es un precepto sin validez. Ciertamente la aplicación pura del concepto tiene múltiples dificultades prácticas y logísticas para su realización. Si utilizáramos las formulas de Aristóteles en su clasificación de formas perfectas y degeneradas de gobierno podríamos decir que la soberanía popular se podría degenerar en anarquía.

Es aquí donde vemos la enorme importancia de nuestro precepto constitucional. Recordemos que el artículo 39 inicia diciendo “la soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo…”

Insisto habla de la soberanía nacional y una de las características en la teoría clásica es que la soberanía nacional se traduce en un régimen representativo. O sea que el pueblo podrá ejercer su soberanía, podrá crear sus leyes, podrá alterar o cambiar su forma de gobierno, pero por conducto de sus representantes. En este sentido lo que es importante que la constitución y el Estado garanticen es la libertad, transparencia y legitimidad para poder elegir a sus representantes. Garantizar la legalidad en la elección

del Poder Ejecutivo que hará la acción de gobernar, garantizar la elección de los diputados y senadores que harán las leyes para el pueblo y desde luego, el nombramiento que hacen por medio de sus representantes, de los magistrados, del Poder Judicial para la aplicación de la ley. En este sentido considero que el pueblo si tiene la facultad de ejercer su soberanía.

El pueblo instituye no gobierna ni hace leyes y menos juzga, el pueblo instala y crea las instituciones

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