Contrato de suministro mercantil
Enviado por 100486a • 4 de Octubre de 2016 • Síntesis • 5.131 Palabras (21 Páginas) • 836 Visitas
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UNIVERSIDAD AUTONOMA DEL ESTADO DE HIDALGO
ESCUELA SUPERIOR ACTOPAN
LICENCIATURA EN DERECHO
SEPTIMO SEMESTRE GRUPO UNO
DERECHO MERCANTIL III “CONTRATOS”
EL CONTRATO DE SUMINISTRO
BIBLIOGRAFIA
AGENDA MERCANTIL (CODIGO DE COMERCIO). (2015). MEXICO: ISEF.
AHUMADA, R. C. (2008). DERECHO MERCANTIL: PRIMER CURSO. MEXICO: PORRUA.
GARGOLLO, J. A. (1996). CONTRATOS MERCANTILES ATIPICOS. MEXICO: PORRUA.
GARGOLLO, J. A. (s.f.). CONTRATOS ATIPICOS (CONSIDERACIONES PARA EL DERECHO MERCANTIL MEXICANO). INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURIDICAS DE LA UNAM, 12.
MERCADO, O. V. (2008). CONTRATOS MERCANTILES. MEXICO: PORRUA.
VARA, R. D. (2000). ELEMENTOS DE DERECHO MERCANTIL MEXICANO . MEXICO: PORRUA.
INDICE
BIBLIOGRAFIA
INTRODUCCIÓN
I. CONCEPTO
II. CARACTERISTICAS
III. CONTRATOS AFINES
IV. CLASIFICACION DEL CONTRATO DE SUMINISTRO
V. ELEMENTOS
VI. OBLIGACIONES DEL SUMINISTRADOR
VII. OBLIGACIONES DEL SUMINISTRADO
VIII. MODALIDADES
IX. TERMINACION DEL SUMINISTRO
CONCLUSIÓN
CONTRATO DE SUMINISTRO
INTRODUCCIÓN
El presente trabajo consiste en una tesina en donde fue recabada información de carácter mercantil referente al contrato de suministro y la cual tiene por objeto comprender y analizar a fondo en que consiste dicho contrato y como se puede llevar a cabo en la vida real.
El contrato de suministro es un contrato que no se encuentra regulado en nuestra legislación, por lo cual se le considera un contrato atípico, cabe mencionar que dicha característica no lo excluye de los demás contratos mercantiles, al contrario es uno de los contratos atípicos de suma importancia y de gran utilidad para que los comerciantes puedan usarlo en sus actividades mercantiles, es de esta manera únicamente en que el Código de Comercio solo lo menciona como un acto de comercio en el artículo 75 fracción V.
El suministro es un contrato muy practicado en nuestro derecho mercantil mexicano, ya que cumple con las necesidades de los comerciantes para que no se queden sin mercancía, es decir que no se les agoten y puedan surtir de una manera rápida y eficaz a su clientela; de lo anterior recaigo en la importancia que tiene dicho contrato pues para satisfacer las necesidades de los comerciantes es necesario que ellos puedan tener siempre la disponibilidad de su mercancía para poder realizar su actividad comercial es de ahí que el suministro subsiste en entregas periódicas y a través del tiempo.
En el presente trabajo nos daremos cuenta que aunque al contrato de suministro se le equipare con el contrato de compraventa mercantil, tiene sus cualidades y diferencias especificas por las cuales lo conforman como una figura distinta a la compraventa mercantil.
“EL CONTRATO DE SUMINISTRO”
CONCEPTO
El suministro es un contrato por el cual una parte se obliga, a cambio de un precio, a realizar a favor de otra, prestaciones periódicas o continuadas de ciertas cosas.[1]
Una de las partes, proveedor, asume la obligación mediante un precio unitario de entregar periódicamente a otra (suministrado), cosas en cantidad, tiempo y forma fijados en el contrato. Se trata de un contrato en el que las partes cumplen prestaciones correspectivas de manera continuada. Es un contrato de cambio pero no de venta. El proveedor no se obliga a transmitir la propiedad de una cosa, sino más bien a suministrar a entregar esta.[2]
En la doctrina se le define como “el contrato por el que una parte (suministrador) se obliga mediante un precio, a ejecutar a favor de otra (suministrado) prestaciones periódicas o continuadas de cosas.”
El contrato de suministro es considerado como un contrato de empresas de ahí que el Código de Comercio, al hacer la enunciación de los actos de comercio, se refiera a las empresas de abastecimiento y suministro.[3]
Es un contrato que está estrechamente ligado con la actividad mercantil en su evolución.
Es un contrato de suma utilidad práctica y cuya razón de ser esta está en el deseo de hallar satisfacción rápida, segura y económica, a las necesidades constantes en la vida moderna, que sería más tardado y gravoso si se celebrara un contrato distinto cada vez que se tuviese la necesidad de obtener bienes y o servicios.[4]
Es un contrato que se celebra para cumplir las necesidades del consumidor, sin que se agote en un solo acto, sino que su eficacia dura en el tiempo. Negocio jurídico en el que una parte se obliga frente a otra a cumplir prestaciones periódicas y continuas por el pago de un precio determinado.
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