ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Cuales osn los Aspectos del desarrollo


Enviado por   •  8 de Mayo de 2018  •  Resúmenes  •  2.426 Palabras (10 Páginas)  •  218 Visitas

Página 1 de 10

Aspectos del desarrollo en la infancia (187-194)

DESARROLLO DE LA CONFIANZA

 La primera de las ocho etapas de desarrollo psicosocial, propuestas por Erikson es la de confianza básica frente a desconfianza básica. Esta etapa comienza en la infancia y continúa más o menos hasta los 18 meses. En este periodo, los bebés desarrollan un sentido que les permite detectar el nivel de confiabilidad de las personas y los objetos de su mundo. Necesitan desarrollar un equilibrio entre la confianza (que les permite formar relaciones íntimas) y la desconfianza (que los habilita para protegerse). Si predomina la confianza, como debería ser, los niños desarrollan la virtud de la esperanza: la creencia de que pueden satisfacer sus necesidades y cumplir sus deseos. Si predomina la desconfianza, los niños verán al mundo como un lugar poco amistoso e impredecible y les resultará difícil establecer relaciones. El elemento crucial para el desarrollo de la confianza es un cuidador delicado, sensible, y constante. (el momento de la alimentación es crucial)

Confianza básica frente a desconfianza básica  (Según Erikson) primera etapa del desarrollo psicosocial , en la cual los infantes desarrollan un sentido de confiabilidad de personas y objetos.

DESARROLLO DEL APEGO

El APEGO es un vínculo emocional recíproco y duradero entre el infante y su cuidador, cada uno de los cuales contribuye a enriquecer la calidad de la relación. Desde una perspectiva evolutiva, el apego tiene valor adaptativo para los bebés, pues asegura la satisfacción de sus necesidades psicosociales y físicas. De acuerdo con la teoría etológica, los infantes y los padres tienen una predisposición biológica a apegarse entre sí, relación que fomenta la supervivencia del bebé.

Estudio de los patrones de apego.

La situación extraña, una técnica de laboratorio diseñada para evaluar los patrones de apego entre el infante y un adulto. Por lo regular, el adulto es la madre (aunque también han participado otros adultos) y el bebé tiene entre 10 y 24 meses de edad.

Encontraron tres patrones principales de apego: el apego seguro y dos formas de apego ansioso o inseguro, el apego evasivo y apego ambivalente o resistente.

Los bebés con un apego seguro lloran o protestan cuando el cuidador sale, pero son capaces de obtener el consuelo que necesitan y demostrar con eficacia y prontitud flexibilidad y resiliencia cuando se enfrentan a situaciones estresantes. Por lo regular son cooperativos y muestran poca irritación.

Apego seguro  Patrón en el cual un infante llora y protesta cuando el cuidador principal sale y lo busca activamente a su regreso.

Los bebés con un apego evasivo no se muestran afectados cuando el cuidador sale o regresa. Exhiben poca emoción positiva o negativa.

Los bebés con apego ambivalente (resistente) muestran ansiedad incluso antes de que el cuidador salga y se muestran más molestos cuando parte. Una vez que el cuidador regresa, los bebés ambivalentes demuestran su malestar y enojo tratando de establecer contacto a la vez que se resisten a él con patadas o contorsiones.

Lo que determina la categoría de apego en la que caen los niños no es necesariamente la conducta que exhiben cuando se aleja el cuidador, sino su conducta cuando el cuidador regresa. Esos tres patrones de apego son universales en todas las culturas en que han sido estudiados. Sin embargo, las conductas de apego difieren entre las culturas.

Apego evasivo:  Patrón en que es raro que un infante llore cuando es separado del cuidador principal y evita el contacto a su regreso.

Apego ambivalente (resistente): Patrón en que un infante muestra ansiedad antes de que salga el cuidador principal, se muestra muy molesto durante su ausencia y a su regreso lo busca y a la vez se resiste al contacto.

Hay un cuarto patrón de apego: el apego desorganizado-desorientado, que es el menos seguro. Los bebés que siguen este patrón parecen carecer de una estrategia organizada para lidiar con el estrés de la situación extraña. Más bien muestran conductas contradictorias, repetitivas o mal dirigidas (buscan la cercanía con el extraño en lugar de la madre). Parecen confusos y temerosos.

Apego desorganizado desorientado: Patrón en que, después de la separación del cuidador principal, a su regreso el bebé muestra conductas contradictorias, repetitivas o mal dirigidas.

La probabilidad de un apego desorganizado aumenta cuando están presentes múltiples factores de riesgo, como la insensibilidad de la madre aunada a la discordia marital y al estrés de la crianza. El apego desorganizado es un predictor confiable de problemas posteriores de conducta y de ajuste.

Algunos se las arreglan para establecer apegos organizados a pesar de la crianza atípica, mientras que otros que no fueron expuestos a la crianza atípica forman apegos desorganizados. Una explicación podría ser la interacción entre genes y medio ambiente. Otra explicación podría ser una correlación entre genes y medio ambiente. Las características innatas del bebé pueden imponer demandas inusualmente estresantes para los padres y provocar de este modo conductas de crianza que facilitan el apego desorganizado.

Cómo se establece el apego.

 A partir de las interacciones del bebé con la madre, el niño construye un “prototipo” de lo que puede esperarse de ella. El modelo se sostiene en la medida que la madre actúe de la misma manera. Si su conducta cambia (no una o dos veces sino de manera sistemática) el bebé puede corregir el modelo y la seguridad del apego puede cambiar.

Los bebés con apego seguro han aprendido a confiar, no sólo en sus cuidadores, sino también en su capacidad para obtener lo que necesitan.

Métodos alternativos para el estudio del apego

Debido a que el apego influye en una variedad de conductas mucho mayor de lo observado en la situación extraña, otros investigadores han ideado métodos para estudiar  a los niños en escenarios naturales. El Conjunto Q de Apego (CQA) pide a las madres o a otros observadores instalados en el hogar que clasifiquen un conjunto de palabras o frases descriptivas (“llora mucho”, “tiende a aferrarse”) en categorías que van de más o menos características del niño y que comparen luego esas descripciones con otras de expertos del prototipo de niño seguro. Estudios neurobiológicos pueden ofrecer otra manera de estudiar el apego. Ciertas áreas del cerebro de la madre se activaban ante la sonrisa o el llanto de su bebé pero no cuando veían a otros niños que mostraban esas conductas, lo que indica que el apego puede tener una base neurológica.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (15.2 Kb)   pdf (183.3 Kb)   docx (16 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com