Cátedra: Currículum y diversidad

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Modelos curriculares.

                                                                        Nombre: Carolina Torres Alarcón

 Docente: Alejandro Delgado Horta

                                                                     Cátedra: Currículum y diversidad

                                                                       Fecha: Santiago, 17 de mayo  2018.

Contenidos: Unidad N°1, semana N°2

Introducción:

En el día de hoy con las últimas estructuraciones educativas se han abierto las puertas a la diversidad, la inclusión y la pluralidad, generando con ello paradigmas, modelos educativos, formas de investigación y medios de comunicación en donde se desarrollan habilidades, como la del pensamiento, al servicio del enriquecimiento de las dimensiones pedagógicas, para generar nuevas propuestas de solución a problemas a las distintas necesidades educativas actuales.

Junto al siguiente trabajo podremos observar los modelos curriculares, en donde se muestran cambios en la educación, modificaciones, reestructuraciones y propuestas que se encuentran a disposición para poder entender y atender, las demandas que ha requerido nuestra sociedad.

Actualmente en las escuelas, los modelos educativos que se utilizan se han venido renovando a través del tiempo, los que han logrado avances, son los que atienden las necesidades que se han observado de los educandos, en función de alcanzar una educación más justa igualitaria y de calidad.

1. Fundamentos filosóficos del currículum en el contexto de la educación especial.

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2.  Modelos Curriculares y su relación con la educación especial.

La Educación Especial (EE) es una de las áreas de la educación que tiene mucha significancia para aquellas y aquellos niños que presentan alguna Necesidad Educativa Especial (NEE). Para ello, se utiliza un currículum nacional basado en las dificultades de cada estudiante.

Conductismo

Dentro de la mirada del Conductismo y de la educación especial, se cree en el interés de la Psicología conductual por los procesos de adquisición y el mantenimiento de nuevos repertorios conductuales en los discentes.

Sus avances, no sólo en el ámbito de las teorías generales del aprendizaje y del desarrollo, sino también respecto a técnicas e instrucciones para el trabajo con niños poseedores de diversos requerimientos especiales de enseñanza, por presentar algún déficit en su desarrollo ya sea físico, sensorial o psíquico.

Considerando las aportaciones teóricas, cabe resaltar el trabajo de Bijou respecto a su concepción de déficit en el desarrollo. Comprende en él un problema funcional, analizando los factores en la expresión conductual del desarrollo humano. Esta concepción conlleva varias implicaciones que determinan la manera de abordar, tanto teórica como metodológicamente, los casos que en la literatura tradicional se denominan como autismo, problemas de lenguaje, socialización, aprendizaje, hipoacusia, entre otros.

Cognitivismo

Los modelos didácticos cognitivos ofrecen posibilidades conceptuales y prácticas en el campo de la EE, tanto en la interpretación de las dificultades de aprendizaje como en la intervención didáctica. Los modelos didácticos que se fundamentan en esta teoría del aprendizaje, lo hacen desde el paradigma de la Psicología Cognitiva.

Tradicionalmente se concibieron las estrategias cognitivas como el resultado del aprendizaje de contenidos. En cambio el modelo cognitivo concibe que la adquisición de las estrategias de aprendizaje no son una alternativa a los contenidos o las habilidades. Por el contrario, se comprende que los contenidos se transmiten a través de procesos cuya adquisición permiten el desarrollo de la capacidad cognitiva.

Los modelos cognitivos de aprendizaje son varios, si bien hay algunas características comunes a todos ellos, lo que podría interpretarse como un  modelo básico del que se derivan variantes. A partir de esta pluralidad conceptual se produce una multiplicidad también de enfoques en la evaluación y en la intervención didáctica, teniendo por uno de los modelos básicos el procesamiento de la información.

Dos notas esenciales caracterizan el proceso de enseñanza-aprendizaje en este modelo:

1) El papel activo del alumno;

2) La mediación del profesor o del adulto.

 Aunque estas dos características, de algún modo, están presentes en todos los modelos, la diferencia entre ellos radica en el énfasis puesto en una u otra dimensión dentro del proceso didáctico.

Constructivismo

El desarrollo del modelo constructivista ha sido ampliamente aplicado en la intervención educativa diferencial. Sus principales aportes se ubican en el trabajo con bebés y preescolares, sin embargo, su aplicación se ha extendido a otros niveles educativos. Muchos instrumentos de evaluación poseen este enfoque.

Este modelo está fuertemente influenciado por Piaget y por psicólogos del desarrollo. Sus postulados teóricos señalan que todos los seres humanos desde el nacimiento progresan a través de los mismos pasos o etapas de desarrollo. Se considera entonces que el desarrollo de los niños discapacitados sigue las mismas etapas de un niño sin NEE en las distintas áreas de desarrollo, pero en ritmos y velocidad diferentes. De esta manera es posible conocer la secuencia que sigue el desarrollo y ayudar a los niños con necesidades educativas especiales a consolidar sus etapas a través de programas de estimulación.

Pese a sus contribuciones este modelo encuentra en los niños con NEE múltiples o con retardo cognitivo severo, sus principales limitaciones. Generalmente estos menores presentan un desarrollo muy disarmónico, logrando ciertas adquisiciones, sin manifestar haber logrado la completa secuencia del desarrollo, del mismo modo que en algunos casos en donde los niños aparentemente no presentan progresos, como un niño con parálisis cerebral, que al ser evaluado por escalas de desarrollo evolutivo no supera los 6 meses de edad de desarrollo motor, probablemente por años.

Aunque el hecho de que un menor no presente progresos, teniendo en consideración las escalas de desarrollo, no significa en ningún caso que ese niño no haya tenido progresos. Muchas veces sus adelantos son cualitativos y muy significativos para su desarrollo. En este aspecto, se fundamenta la necesidad de contar con instrumentos de evaluación y programas de trabajo mucho más finos y funcionales, que nos permitan valorar los avances de nuestros educandos.

Humanista

La mirada humanista es una visión del desarrollo de la personalidad que considera la capacidad que tienen las personas para propiciar se autodesarrollo, sano y positivo, a través de habilidades humanas como la elección, la creatividad y la autorrealización.

Esta orientación humanista se desarrolló en las décadas de 1950 y 1960 en respuesta de lo que algunos psicólogos consideraron como creencias negativas respecto a la naturaleza de cada persona. Los seguidores de la corriente humanística, y los más representativos autores contemporáneos, sostienen que las personas poseen la capacidad para ejercer control y regulación de sus propias vidas sin importar la edad que tengan.

Destacan el potencial para un desarrollo sano y positivo. Cualquier característica negativa es resultado de un daño causado sobre la persona en desarrollo. La corriente humanista pretende expandir y enriquecer las vidas humanas ayudando a las personas a entenderse y desarrollarse en su máxima capacidad.

Estudiar la vida de las personas en su totalidad ayudaría a comprenderla mejor para el diseño de estrategias y actividades orientadas hacia el logro de todas las facultades de un individuo. Para la teoría humanista resulta innecesario clasificar a la gente en subgrupos de acuerdo con sus funciones, el etiquetar a un alumno por lo que puede o no hacer en lugar de motivarlo lo perjudica, las etiquetas contribuyen a conformar una percepción inadecuada de los alumnos y además condiciona al resto en la expresión de actitudes y conductas frente a tal o cual rotulación.

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