DILEMAS Y DESAFIOS QUE ENCONTRAMOS A LA HORA DE ENFRENTARNOS A LA SISTEMATIZACIÓN

En este ensayo se cree pertinente abarcar e identificar los diversos tropiezos que se pueden encontrar cuando se habla de sistematización de la práctica y de allí, analizar aquellos aspectos relevantes que nos dan para ver la importancia de No Sistematizar.

Quiero, en primer lugar, agradecerle por la oportunidad que nos da de participar con usted en este tema, de intercambiar opiniones y reflexionar sobre la sistematización de las prácticas que el hombre desempeña y quizás la importancia de esto en el diario vivir que debe llevar cada profesional consigo mismo.

Primeramente se debe recordar y tener claro el término de sistematización, para así mismo hablar con más claridad del tema. Se entiende por sistematización como (todo objetivo que relaciona la práctica con la teoría, o aquella actividad que produce conocimientos a través de la práctica y nos permite conocer los hechos o acciones de la realidad).

Por otro lado cabe identificar y reconocer los términos de Dilema y Desafíos que en este texto se pretenden manejar. En primer lugar el dilema, se concibe como la aparición de cualquier tipo de invalidez en un trabajo que pruebe su eficacia, siendo así considerada como una falacia. Continuamente un Desafío se ve como toda acción, efecto o competencia, reto o provocación de algo que se quiera iniciar.

Teniendo claro lo anterior, entraremos a hablar de no solo Sistematizar experiencias y entender por qué este es el proceso que se está desarrollando de esa manera, es el único que da a entender e interpretar lo que está aconteciendo, a partir de un ordenamiento y reconstrucción de lo que ha sucedido en dicho proceso.

El dilema está en no quedarnos sólo en la reconstrucción o transcripción de lo que ha sucedido, sino pasar a realizar una interpretación crítica. El eje principal de preocupación se traslada de la reconstrucción de lo sucedido y el ordenamiento de la información, a una interpretación crítica de lo acontecido encerrando y definiendo el contexto para poder extraer aprendizajes que tengan una gran utilidad para el futuro.

Por consiguiente, no debemos apartar que para una buena sistematización, no solo se debe contar con una buena opción o impulso propio de sistematizar adecuadamente según las condiciones reales. Simplemente poder elegir una modalidad o enfoque adecuado que permita encerrar todo lo que se quiere expresar y se pueda evitar el momento de sistematizar las prácticas y esto haga más sencillo el trabajo a realizar.

Este dilema no sólo lo podemos enfrentar con una gran capacidad creadora y no se necesita de poseer ninguna receta: lo cual significa que tenemos que tomar opciones ante una gran variedad de modalidades posibles. La única “receta” es que la modalidad depende de las circunstancias, el tipo de institución, el objetivo específico que queremos alcanzar, el tipo de experiencia que queremos comunicar, el

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