“ EDUCAR NO ES DAR CARRERA PARA VIVIR, SINO TEMPLAR EL ALMA PARA LAS DIFICULTADES DE LA VIDA”. PITÀGORAS. DOCTORANTE:

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TEORÌAS  DEL  APRENDIZAJE

D R A .   S U S A N A   C U E V A S   A L V A R E Z

ENSAYO:

FRASE:      “ EDUCAR NO ES DAR CARRERA PARA VIVIR, SINO TEMPLAR EL ALMA PARA LAS DIFICULTADES DE LA VIDA”. PITÀGORAS.

DOCTORANTE:

                       DIANA OCAMPO MORENO

Ixtapan de la Sal, México a 17 de Noviembre  del 2015.

INTRODUCCIÓN

        En la actualidad, la sociedad a escala mundial, atraviesa por una crisis de valores, en particular de valores morales y valores éticos. Evidencia de ello lo vemos a diario por los medios de comunicación social: televisión, radio, etc.; casi ninguna sociedad queda exenta de esta problemática. Las instituciones educativas no se escapan,  y en muchos casos son el reflejo de las sociedades en las que la crisis se acentúa.

        Las demandas de la misma sociedad para resolver este problema son urgentes e imprescindibles. Por lo tanto toca a los docentes y a la familia asumir el reto de solventar la crisis axiológica por lo que se caracteriza la humanidad en vísperas del tercer milenio.

        Hablar de Axiología es referirnos a la rama de la Filosofía que estudia los valores, hablar de Axiología en la Educación es adentrarnos al compromiso que tenemos como docentes en la contribución a la  formación en valores con carácter ético, social y cultural  en el alumno, ya que con ello, expresa actitudes y conductas, aspiraciones e intereses, sentimientos y acciones destacables en su educación para la vida, de ahí que se  debemos guiarlos a la reflexión y análisis sobre aquello que le es valioso.

         Se trata de lograr en el proceso pedagógico, que el alumno, asuma como parte integral de su vida una formación axiológica, que vaya en coherencia con aquellas convicciones que posee y considera correctas.

        En la sociedad actual, todo individuo debe ser capaz de afrontar nuevos retos y desafíos en la vida cotidiana, pero esta posición debe ser asociada desde la familia y la escuela, pues la misión educadora se ejerce justo de esos dos espacios, contribuyendo a que descubra por sí mismo los valores y las herramientas que le permitan poner en práctica los conocimientos y conductas que va adquiriendo a lo largo de su desarrollo personal y profesional.

        De ahí el interés por analizar una frase destacable de Pitágoras:   Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para la vida.  

DESARROLLO

        El aprendizaje es un proceso que se va construyendo en el interior del individuo. No solo con la transmisión de información de alguna área en específico,  sino también en la construcción de un esquema mental basado en principios y valores mediante la interacción con el entorno y sus propias experiencias.

        Por un lado, la familia es reconocida como la primer escuela de la vida, y es aquí donde se intenta transmitir a los hijos una formación axiológica, a través del amor familiar, la comprensión, y la entrega. Esos valores van formando una persona íntegra, con sentimientos y capaz de convivir en una sociedad a la que sea integrado; por otro lado la escuela, contribuye considerablemente en el seguimiento a la formación de valores permanentes.

        Touriñàn (2005) p.9 dice: Familia, escuela y sociedad civil se encuentran en una nueva encrucijada de responsabilidad social compartida respecto de la educación que nos obliga a reformular el sentido de la educación en valores. Si bien es cierto, la escuela, la sociedad y principalmente la familia deben reorientar esa formación valorar  justo en estos tiempos, pues los alumnos están faltos  de esos valores que los hacen tener esa plusvalía como personas, ante una sociedad globalizada y preocupada solamente en la economía, la política, y algunos otros temas de actualidad.

        Retomo la frase de Pitágoras: Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida,  para la cual realizaré una panorama general de Pitágoras, con el fin de afirmar que su frase ha sido bien planteada y que se debe retomar en la actualidad  por las situaciones que se están viviendo en nuestro país tanto en política, educación y economía.

        Lo importante de este filósofo es que, fue creador de un nuevo estilo de vida, mantuvo su doctrina un principio de ética de purificación para la salvación del alma inspirada en diferentes doctrinas.  El objetivo de su escuela no era tan sólo enseñar doctrina, sino aplicar los principios de dicha doctrina a la juventud, en donde los jóvenes se ejercitaban físicamente, podían manifestar sus opiniones, de modo que los maestros por medio de ello observaban y leían el fondo de su alma y de ahí se formaban una idea de los futuros discípulos. En esa escuela les desarrollaban la intuición; comenzaban con los sentimientos, los deberes naturales del hombre y su relación con las leyes universales. Enfatizaba el amor a los padres, asimilando la idea de padre a la de Dios y la de madre a la naturaleza, y así el hijo-discípulo  debía honrar a ambos por ser grandes divinidades. Fomentaba la amistad, aconsejando que es necesario escoger a los amigos, enseñaba también la tolerancia.

        Así, la enseñanza moral preparaba el camino a la enseñanza filosófica, en donde se iniciaba con el estudio de las matemáticas (por lo cual es destacado en la actualidad Pitágoras con su famoso teorema) y posteriormente todo el cúmulo de ciencias que iban a formar a sus pupilos filósofos.

        Su trabajo fue inmenso, y su influencia en la filosofía es en síntesis, unidad y armonía. Pitágoras fue  un gran iniciado que poseyó la vista del espíritu, la clave de las ciencias ocultas y del mundo espiritual, con lo que pudo expresar la unión de la ciencia, la moral y la religión manifestada en su doctrina.

        De ahí que su frase radica en lo moral, en lo ético y porque no hasta el la religión, en donde  en la actualidad, dentro de estos tres aspectos hace mucha falta que enseñen tanto en la casa como en la escuela para poder lograr ese estilo de vida que Pitágoras en ese tiempo pudo lograr; sin embargo, desde el proceso que nos toca llevar en la escuela debemos empezar por guiar a los alumnos a que descubran todos esos valores que los hacen ser seres especiales y extraordinarios en la vida y que más que una profesión es el sentido humano es el que hace sobresalir de lo demás. Dando más peso al papel que tiene la familia de ser los primeros forjadores del creer en sí mismos y en las posibilidades que la vida de va dando en el trascurso de la formación personal y profesional.

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