EL TIEMPO HISTÓRICO Y SU ENSEÑANZA

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Campus San Felipe

Departamento Disciplinario de Humanidades

Pedagogía en Historia y Geografía

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INFORME 1[pic 4]

EL TIEMPO HISTÓRICO Y SU ENSEÑANZA

Profesor

Juan Gonzalo Saldaña Álvarez

Alumno(a)

Gustavo Samuel San Martín Reyes

San Felipe

Fecha

20/11/2020

Introducción        

                El informe realizado a continuación, trata sobre el artículo titulado como “EL TIEMPO HISTÓRICO Y SU ENSEÑANZA”, creado por la Profesora y Licenciada Dora Frías. El documento trata de un tema teórico y conceptual propio de la disciplina historiográfica, el cual es, como nosotros como docente enseñamos a nuestros estudiantes a pensar históricamente, dentro del desarrollo del documento, se tratan aspectos como el conflicto entre el plan educacional y la verdadera responsabilidad del profesor con sus estudiantes en cuanto a los contenidos que enseña y como su trabajo puede facilitar que los mismos comprendan su presente.

        Respecto a la autora, al buscar en la web, no se ha encontrado ningún tipo de información respecto a otras obras y su estado actual, por lo tanto, no hay manera de realizar una semblanza sobre ella. Por otro lado, en cuanto a aspectos formales del informe, se presentarán las ideas fuerza de la autora, posteriormente se realizará un mapa conceptual para resumir las más relevantes y luego se pasará a una etapa analítica y de reflexión.

Ideas fuerza del documento

                La autora expone en el documento varias ideas principales, la primera de ellas trata sobre el “para que” de la enseñanza de la historia en la sala de clases, a partir de esta pregunta se desarrollan las ideas. Para la autora, existe un conflicto entre lo que la escuela y el curriculum nacional desea enseñar y la construcción de identidad de los propios estudiantes, ya que, se busca formar la idea de pertenencia a una nación y en el proceso se pasa por alto la individualidad de los estudiantes.

        Continuando con las ideas principales, la autora expone que el profesor debe descentralizar al Estado nacional como el punto de atención exclusivo a la hora de realizar las clases, el profesor tiene que ser capaz de proponer alternativas a la hora de enseñar y no solo responder a lo que el estado le solicite, para lograr esto, debe incorporar innovaciones que han surgido en la disciplina durante los últimos tiempos (por ejemplo, usar la historia oral, social, cultural y otros).

        Dentro de esta enseñanza basa en el uso de estrategias menos tradicionales, la autora señala el problema central de todo el documento, este es: la enseñanza del tiempo histórico. Para ella, que los estudiantes comprendan su propio tiempo histórico facilita la comprensión del presente, además, define al tiempo histórico de la siguiente manera:

“El tiempo histórico no es sólo cronología, periodización o un contenido procedimental, donde la construcción de líneas o gráficos pareciera concretar la idea de su enseñanza (no hay búsqueda de relaciones, preguntas, conclusiones).” (Frías s/f).

        Otra de las ideas fuerza de la autora, está referida al deber del docente en cuanto a la enseñanza del tiempo histórico,

“Es decir, el profesor debe enseñar el tiempo histórico, el aprendizaje dependerá del grupo de alumnos que tiene, de su desarrollo cognitivo, de sus dificultades para pensar la temporalidad, pero, es necesario enseñarlo para que los alumnos se ubiquen en su presente y se vean como actores activos que están haciendo su futuro “dentro de un tiempo plural y complejo como el tiempo que les ha tocado vivir”. (Frías s/f).

Como última idea principal, tenemos que, para la autora, cada reflexión sobre el pasado histórico consiste en una interrogación al mismo, se busca obtener respuestas que nos lleven a una comprensión del presente que vivimos. Este ejercicio de interrogación al pasado permite también que los estudiantes se vean así mismos como actores sociales que están construyendo el futuro.

Como ideas secundarias, que emanan de lo anterior, tenemos que para lograr este ejercicio de pregunta y respuesta en función del pasado, debemos conocer ciertos conceptos, tales como la cronología y periodización del tiempo histórico, comprender los aspectos básicos relacionados con el tiempo permite que los estudiantes puedan hacer esquemas mentales lógicos que entreguen respuestas a sus inquietudes, la respuesta a estas inquietudes permite que tengan una mayor comprensión de su realidad social.

        Por último, la autora considera que el profesor debe tener en cuenta todos los elementos temporales que trabaja a la hora de analizar un hecho o acontecimiento, debe ser capaz de establecer relaciones entre ellos para que el alumno comprenda que si bien el presente se vive en simultáneo, cada sociedad humana está pasando por procesos distintos, los cuales, conforman su estructura futura.

Mapa conceptual

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Análisis

                La información expuesta por la autora da lugar a una crítica para el docente respecto a su labor en la sala de clases, el tema expuesto es de gran importancia, ya que, es una alternativa para combatir con la supresión de la historia local por parte del plan de estudio del estado, el cual, está diseñado con fines específicos de adoctrinamiento de la población. La reflexión histórica en el aula y el trabajo del tiempo histórico suponen una herramienta de ayuda para cambiar poco a poco el pensamiento colectivo, creando así una valoración no solo de la historia oficial, sino que también de la local.

                Enseñar la temporalidad histórica requiere también de algo específico, no solo es necesario abarcar temas conceptuales previos, es necesario que los temas abarcados sean de interés para los estudiantes, ya que, si no existe un interés respecto a los sucesos históricos tratados, difícilmente la actividad vaya a ser un éxito en la sala. La cita expuesta a continuación sintetiza esto perfectamente:

“La historia que se enseña en muchas escuelas del mundo es una historia que el alumnado no identifica o relaciona con su presente, una historia que solo existe en los libres de texto y en las escuelas. Y desde luego una historia que no tiene ninguna relación con su futuro. Por ello es valorada por una gran parte del alumnado como un conocimiento poco útil para su futuro. Por esta razón, diversos autores insisten en señalar que en la enseñanza de la historia y de la temporalidad ha de poner más el énfasis en la necesidad de partir del presente y de sus problemas.”^[1]

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