El Mal Comportamiento

Mireya define a “la mala conducta de los estudiantes como aquello que se ve reflejado dentro y fuera la institución, agresiones físicas y verbales entre estudiantes, salidas de los estudiantes de la Institución sin autorización, desorden dentro del aula, desertar de las actividades y la falta de motivación.” Debido a esto, las actividades no se realizan de manera correcta y surgen las diferencias entre los estudiantes y el docente, esto influye de manera negativa para que no se quieran trabajar con las actividades grupales.

Así, al hablar de mal comportamiento, nos remitimos a encontrar factores que influyen en este, por ejemplo el ambiente social en el que se encuentran y las personas con las que se convive, la influencia que tienen en nuestro entorno y como pueden definir la personalidad de terceras personas y su conducta.

Sin embargo, el contexto real que se aborda en este apartado es sobre la mala conducta del alumno en el aula de clases, definiéndolo como una situación real, siendo un problema cada vez más frecuente dentro de las instituciones escolares. El mal comportamiento siempre va tomado de la mano de diversos factores que envuelven al alumno, estos influyen de manera negativa en su desempeño en el salón de clases; el alumno tiende a presentar problemas de actitud, posee una actitud provocadora, falta de motivación y rebelión ante las normas y ante la figura del profesor; sin dejar a un lado el núcleo familiar y el entorno social.

Pero también se debe de tomar en cuenta que los alumnos tienden a imitar la conducta de los adultos, así que uno debe de ser el ejemplo a seguir de cada uno de ellos para no provocar o inferir en el desarrollo de la conducta de los estudiantes.

Podemos identificar que si un estudiantes utiliza un mal vocabulario con sus compañeros dentro del salón de clases, varios elementos pudieron haber influido en esto, ya sea por la falta de atención en el hogar por parte de su familia o por la integración en un grupo al que desea pertenecer; pero influye mucho el ambiente social en el que convive, podemos observar que este comportamiento también se da conforme a la relación personal que tienen los estudiantes, sin embargo una solución para este problema es, platicar con el alumno a solas y de manera suspicaz e identificar cuáles son los factores que están influyendo en que su conducta haciendo que esta sea de vista mal por los demás individuos que se encuentran conviviendo con él. De esta manera se puede dar una solución, abordando cada aspecto sin necesidad de que el estudiante se sienta incomodo al estar expresando sus ideas, haciéndolo sentir en confianza y con la necesidad de dialogar que es lo que le incomoda dentro del salón de clases.

Pero al hablar de mala conducta que el estudiante presenta dentro del aula de clases nos remitimos a “la agresión física con sus compañeros”; conducta que si bien no se toma como un aspecto que hace que los estudiantes se alejen de agresor por el motivo de que él hace que con su mala conducta no sea tomado en cuenta como un elemento agradable dentro del salón de clases, pero hablemos de como los subgrupos dentro del salón de clase influyen mucho en la mala conducta de los estudiantes debido a que no solo comparte una forma de actuar similar, sino establecen normas en las que cada uno debe de seguir. Reglas que son la base de su formación y que pueden o no influir en la conducta.

Después de haber dado un breve panorama de lo grave que es la mala conducta dentro del salón de clases, veremos algunas soluciones para dirigir al estudiante a una mejora de su conducta para tener una convivencia sana con sus compañeros de clase.

Pero la pregunta es ¿Cómo solucionar el mal comportamiento dentro del salón de clases? Una pregunta que si bien no es difícil de responder, es difícil de abordar, ya que la conducta de los alumnos no solo se pueda dar dentro del salón de clases sino bien hasta puede tener origen en su entorno social como lo establece el autor Rudolf Dreikurs define el comportamiento inadecuado como los “objetivos erróneos” en la que expone que los niños adoptan una conducta de rebeldía por la necesidad de imitar a los adultos, buscando objetivos erróneos donde se busca la atención y la necesidad de ser tomados en cuenta”.

Los objetivos erróneos las defino como aquellas conductas que el alumno posee para conseguir algo de la otra persona, sin embargo no siempre la actitud mala es la que hace que consigan lo que se quiere, aunque a decir verdad la dominación sobre el otro compañero hace que el alumno se sienta motivado a agredir a las personas que se encuentran a su alrededor; pero bien, una solución para que el estudiante agresor deje de hacer esto, es que el docente dentro de su jurisdicción tome las medidas necesarias para conocer cuáles son las razones que hacen que el alumno se comporte mal, buscar entender porque el alumno no pone atención a la clase y por qué se encuentra distraído dentro de la misma. Se ve una tarea fácil, pero no lo es, como docente te imaginas infinidad de elementos que pueden estar haciendo que el alumno modifique su conducta, algunos ejemplos de ellos son: la familia, los amigos, problemas familiares, etc.; lo que se tiene que hacer en este caso es que el alumno sea motivado con estrategias de convivencia con otros compañeros del salón de clases o bien que cambiar al alumno de lugar para que perciba una manera diferente de convivencia, esto, en ciertos casos puede funcionar, dado que cuando los seres humanos dejamos de convivir en un núcleo social y nos adentramos a otro, tendemos a hacer lazos de amistad para no sentirnos solos.

Según Kenneth E. Barber, Ph.D. hace mención a que

“Los niños tienen muchas razones para tener un mal comportamiento, un ejemplo de esto es: cuando tienen sueño, tienen hambre, han hecho mucho ejercicio o no lo suficiente. Un niño que está cansado puede ser caprichoso, un niño con hambre puede estar irritable,

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