El libro Negro de las Marcas.

El Libro Negro de las Marcas.

Este libro escrito por Klaus Werner y Hans Weiss es uno que no tiene un tamaño excesivamente grande pero desde un inicio se nota que no será una lectura de los más común o sencilla.

La introducción de este libro, a diferencia de la de otros best-sellers, no fue escrita por algún crítico o editor de renombre, sino por los mismos autores del mismo.

Desde el comienzo del libro se expone de que se va a estar hablando e incluso plantea algunos ejemplos las “marcas negras” y todas las atrocidades que estas hacen para maximizar sus ganancias aun mas, sin embargo, también mencionan que hay mucha gente que no esta dispuesta a que sigan existiendo cosas como el trabajo infantil, explotación a los trabajadores, destrucción del medio ambiente entre otras muchas injusticias.

Este libro se divide en dos partes, la primera que consta de nueve capítulos que exponen de manera detallada, diversas problemáticas o practicas cuestionables que han llevado a cabo varias multinacionales y la segunda parte consta de un catálogo de marcas que explica una a una, todas las cosas que han hecho estas compañías.

En el capitulo 1 del libro se habla de algunos de los casos  más conocidos de la explotación laboral de empresas, su daño al medio ambiente, su doble moral, su esclavitud, entre otras acciones típicas de las empresas trasnacionales. No obstante, pese la mención de muchos casos, en ninguno se detienen lo suficiente como para hacer un análisis. Una buena forma de adentrarte sin lugar a duda.

En los siguientes capítulos se cuenta como los autores se hacen pasar por traficantes de Tántalo (material utilizado para dar color a televisiones o teléfonos celulares), cosa que a mi parecer fue un acto de gran valor por parte de los autores, ya que arriesgaron sus vidas al adentrarse en negocios con gente peligrosa con tal de exponer algunas verdades e injusticias que todos debemos conocer.

En capítulos mas avanzados, se habla como corporaciones como Nestlé explotan a sus trabajadores de manera inhumana y fabrican productos que crean una dependencia a los consumidores, capitalismo puro en su máxima expresión diría yo.

A pesar de todo esto, pienso que los autores solo se enfocan en el mal que causan las coorporaciones sin fijarse en el bien que generan, no esta bien defenderlas por todo lo que hacen, pero tampoco solo atacarlas. Muchas empresas con sus patrocinios en áreas como deportes, arte educación entre otras son indispensables para dar oportunidad a mucha gente de llevar a cabo este tipo de cosas.

Por otra parte; las empresas tienen como aliados más cercanos los gobiernos corruptos, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Los países pobres, los más frecuentemente explotados por los europeos desde hace siglos, frecuentemente tienen gobiernos Corruptos extremadamente endeudados.

Los gobiernos corruptos con frecuencia piden préstamos, y éstos generalmente son utilizados en obras públicas innecesarias para un pueblo en la miseria, o en su defecto, es robado por la gente en el poder. El FMI tiene mucha culpabilidad en esto, los préstamos con frecuencia se condicionan sí y sólo sí se reduce el gasto público en educación e infraestructura, entre otros gastos necesarios para la prosperidad.

Las colonias desaparecieron, pero las explotaciones no; ahora, los gobiernos han dejado de dominar, ahora lo hacen las marcas. Y el FMI, una mera extensión de su poder.

En conclusión: Las empresas generan muchas injusticias alrededor del mundo de la mano de muchos gobiernos corruptos, es una realidad que solo podría cambiar en un mercado utópico de competencia perfecta, cosa que no va a suceder.  

Lo que cada uno puede hacer es, si se tiene un negocio propio, no caer en la tentación de realizar actos ilícitos y como consumidor, mucha gente tiene la errónea idea que al dejar de comprar con una marca e ir por la competencia se combate el problema sin darse cuenta de que la empresa competidora probablemente haga lo mismo en cuestión. La mejor opción sería apoyar a los pequeños negocios locales.

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