Ensayo Cuaderno De Maya

Introducción

En el presente ensayo se ha utilizado como material de análisis la novela “El Cuaderno de Maya” de la escritora chilena Isabel Allende. El libro fue publicado en junio de 2011, en la editorial Sudamérica. La obra está narrada en primera persona y donde la escritora proyecta en la protagonista características de sus tres nietos. Isabel Allende define a esta novela como "una historia medio policial".

Maya Vidal es una joven norteamericana quien vive feliz con sus abuelos en Berkeley; sin embargo, su vida cambia cuando su abuelo fallece. Pues empezará a juntarse con malas compañías y se verá envuelta en un mundo de alcohol, drogas, prostitución y narcotráfico. Felizmente su Nini, la abuela, decide que Maya se refugie en una nueva ciudad llamada Chiloé, en la cual encontrará tranquilidad

Maya tiene 19 años, mide un metro ochenta, pesa cincuenta y ocho kilos cuando juega futbol, tiene piernas musculosas, manos torpes, ojos azules o grises según la hora del día y es rubia. Ella es hija única de Andrés Vidal y vive con sus dos abuelos: Nidia y Felipe Vidal.

A los pocos días de nacida, Maya fue dada en custodia por su madre y a la edad de ocho años conoció a su mamá, cuando sus abuelos la llevaron a Dinamarca.

La abuela de Maya siempre defendía las causas perdidas y en la biblioteca tenia un grupo de lectura de criminales en la hora para adultos. Maya entendía a su abuela y defendía junto con ella sus ideales, como por ejemplo la tala abusiva de árboles.

Hasta ese entonces, Maya había tenido una vida en lo posible alegre; sin embargo, cuando su abuelo se enferma de cáncer ella cambia su carácter, cae en una depresión que la lleva al alcohol, drogas y prostitución.

Después de unos meses, Maya es internada en un hospital al tener un accidente en su bicicleta estando bajo los efectos de las drogas, pero tan pronto el médico le dio de alta, su papá la llevó a una academia de Oregón, donde iban a parar adolescentes inmanejables. Estuvo en el centro de rehabilitación por algunos meses, pero escapa de allí tras haber un incendio.

Al escaparse se encuentra desorientada y lo único que desea es volver con su Nini, pero conforme Maya va dirigiéndose en búsqueda de llegar con su familia, se encuentra con un joven quien le dio mucho alcohol, la drogó y abusó sexualmente de ella. Luego conoce a un sujeto llamado Brandon, quien convenció en trabajar con él, en el tráfico de drogas. Esto la beneficiaría a ella porque tendría mucho dinero y él le abastecía varias cosas a Maya. Trascurrió el tiempo y su trabajo con Brandon era fructífero, pero un día las cosas se tornaron sombrías y difíciles. Él le estaba pidiendo más discreción y Maya comenzaba a tener miedo, queriendo desertar de todo para irse de una vez por todas a California, que era su destino principal. Días después Brandon es asesinado por sus propios socios y también planeaban arrebatarle la vida a Maya. Con la ayuda de Freddy, un amigo que se hizo mientras trabaja con Brandon, Maya logra escapar, pero al tiempo después, es encontrada por los socios, raptándola y llevándola al lugar en donde solía vivir unos días atrás. Nuevamente llega Freddy, en un momento en que los asesino salen del edifico, y la salva.

Por último, su abuela Nini la envía a Chiloe, puesto que la policía estaba detrás de ella para sacarle información sobre Brandon y su hermano Adam, quien era su fuente de falsificación de billetes. Así es como llega a la casa de Manuel Arias quien le da refugio en su casa, protección y confianza. Además Maya descubrirá cosas sobre ella misma que pensaba que habían quedado en el olvido. En este pueblo irá conociendo poco a poco a los demás habitantes a quienes les tendrá mucho afecto e incluso su vida tendrá un espacio para el amor, experiencia a la cual no había tenido acceso.

Elegimos al personaje de Maya Vidal ya que es la protagonista principal de la novela, además de contar con una personalidad difícil y antisocial, tiene un pasado que la condena y un presente nada prometedor, pero que a su vez presenta a una joven indefensa, emocionalmente inestable, confiada, impulsiva y sobre todo carente de afecto . También tiene deseos y esperanzas de querer un cambio en su vida, de intentar eliminar todos sus malos recuerdos y para dar ese paso necesitará empezar por un esfuerzo de ella misma. De esta manera, este personaje es rico en análisis ya que posee rasgos de su personalidad y características cognitivas que nos permitirá poder analizar su personalidad de una gran gamma de personalidades.

Ahora, la perspectiva elegida es la Perspectiva Fenomenológica realizada por Rogers ya que ésta se focaliza en que la persona es la única y capaz de mejorar y cambiar su propia personalidad y esta personalidad solo se puede comprender a través de la propia conciencia de la persona, basándose en las propias experiencias subjetivas. Es en esta teoría en donde las emociones y sentimientos del momento cobran gran importancia; la persona tiene una tendencia a la realización, en la cual la persona tiene la meta de llegar a funcionar completamente, terapia centrada en la persona.

Todo individuo vive de sus experiencias, las cuales cambian permanentemente, existe un campo perceptivo, el organismo se actualiza conserva y se concentra en las experiencias.

Análisis de Maya Vidal:

Rogers plantea un carácter general del desarrollo sano de la persona. Para Rogers el desarrollo de la personalidad es una congruencia entre el campo fenoménico de la experiencia y la estructura conceptual del yo, de llegar a lograse tal congruencia se experimentaría la libertad, es decir sin ansiedades internas y la libertad de la tensión posible, permitiéndonos un alto grado de adaptación orientado a la realidad (Rogers, 1951).

En el personaje de Maya se puede observar la realización, en estos dos fragmentos:

“He pasado muchas noches de mi vida sin dormir, antes contaba corderos, ahora cuento cisnes de cuello negro o delfines de panza blanca. Paso horas en la oscuridad, una, dos, tres de la madrugada, escuchando la respiración de la casa, el susurro de los fantasmas, los arañazos de monstruos debajo de mi cama, temiendo por mi vida. Me atacan los enemigos de siempre, dolores, pérdidas, vejaciones, culpa. Encender la luz equivale a darme por vencida, ya no dormiré en el resto de la noche, porque con luz la casa no sólo respira, también se mueve, palpita, le salen protuberancias y tentáculos, los fantasmas adquieren contornos visibles, los esperpentos se alborotan.”

“A veces, en las horas del insomnio siento el pinchazo de la culpa por todo lo que hice antes, pero se disipa al amanecer con el olor de la leña en la estufa, la pata del Fákin arañándome para que lo

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