Ensayo Ley Empleo

La ley de empleo

La Ley 1429 de 2010, tiene por objeto la formalización y la generación de empleo, con el fin de generar incentivos a la formalización en las etapas iniciales de la creación de empresas; de tal manera que aumenten los beneficios y disminuyan los costos de formalizarse, estableciendo importantes modificaciones de orden tributario, comercial, laboral y administrativo. Para las Pequeñas se fijaron múltiples incentivos tributarios en la tasa del impuesto a la Renta y Complementarios, de Industria y Comercio, las tarifas para el registro de la matrícula mercantil y su renovación y, pago de aportes parafiscales (SENA, ICBF Y Cajas de Compensación Familiar, así como el aporte en salud a la subcuenta de solidaridad del FOSYGA), bajo un esquema de progresividad, en el cual durante los dos primeros años gravables será del 0% del total de los aportes, aumentando al 25% para el tercer año gravable, al 50% para el cuarto, al 75% para el quinto y finalmente, al 100% a partir del sexto año gravable.

Estos beneficios se aplican para las Pequeñas Empresas que inicien su actividad económica principal a partir de la promulgación de la Ley, es decir, de acuerdo con el Articulo 2°, que se haya realizado la inscripción del registro mercantil en la correspondiente Cámara de Comercio a partir del 29 de diciembre de 2010, con lo cual es claro que se busca que todas las empresas informales se sujeten a las normas comerciales de registro y puedan ser objeto de control y supervisión de las autoridades.

La nueva regulación consagra incentivos de orden tributario, parafiscal y otras contribuciones de nómina, para la generación de empleos de personas pertenecientes a grupos vulnerables, definiendo como tales a los menores de 28 años, personas en situación de desplazamiento, en proceso de reintegración, en condición de discapacidad y mujeres mayores de 40 años que durante los últimos 12 meses hayan estado sin contrato de trabajo. Estos incentivos consisten en la posibilidad de tomar los aportes parafiscales, el aporte en salud a la subcuenta de solidaridad del FOSYGA y el aporte al Fondo de Garantía de Pensión Mínima como descuento tributario para efectos de la determinación del valor del Impuesto de Renta y Complementarios, siempre y cuando el empleador incremente tanto el número de trabajadores en relación al número de personas que cotizaban a diciembre del año anterior, como el valor total de la nómina en relación con el valor de la nómina del mes de diciembre del año gravable inmediatamente anterior, entendiendo por nómina la suma de ingresos base de cotización de todos sus empleados.

En los mismos términos se encuentran beneficiados los empleadores que vinculen laboralmente a personas con bajos ingresos, considerando bajos ingresos los inferiores a 1.5 salarios mínimos mensuales legales vigentes. Es de advertir que estos beneficios solo se aplicarán para cada nuevo empleo que se genere a partir de la entrada en vigor de la norma y por el término general de 2 años, excepto para el caso de mujeres mayores de 40 años, el cual corresponde a tres años.

Finalmente, la norma disminuye las tasas de retención en la fuente

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