LOS MARC EN LA GESTIÓN, TRANSFORMACIÓN Y RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS.

Universidad de Antioquia.

Facultad de Derecho y Ciencias Políticas.

Curso: MARC.

Profesor: Juan Camilo Mejía.

Ensayo: Los MARC en la gestión, transformación y resolución de conflictos.

Nicolás Fernando Molina Arango

Agosto de 2014.

Todo conflicto social o familiar puede verse como un peligro y como una oportunidad al mismo tiempo, dependiendo de las disposiciones psicoculturales de los actores, de sus concepciones

y valores, así como del contexto socio – estructural

que enmarca cada conflicto, y muy especialmente

del manejo que se haga del mismo.

LOS MARC EN LA GESTIÓN, TRANSFORMACIÓN Y RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS.

En su definición, el conflicto es una situación en la que un actor (persona, comunidad, Estado, etc.) se encuentra en oposición consciente con otro actor (del mismo o de diferente rango), a partir del momento en que se persiguen objetivos incompatibles (o estos son percibidos como tales), lo que los conduce a una oposición, enfrentamiento o lucha. (Fisas, 1998: 166). Y solo habrá terminación del conflicto cuando se dé una solución permanente del problema.

En la película Somos Guerreros, observamos los diferentes problemas a los que se enfrenta una familia, donde todos sus integrantes están expuestos a diversas situaciones de violencia. Violencia que genera diferentes tipos de conflictos que son muy comunes en sociedades en desarrollo y por eso es normal que de acuerdo a los intereses ésta se presente en sus diferentes manifestaciones: física, verbal, psicológica, de género, sexual, cultural, económica, religiosa, etc.

En estas sociedades las familias por lo regular están compuestas por numerosos miembros, en la cual se presenta una estructura jerárquica demasiado machista, donde el padre es el que aporta y toma las decisiones, por lo regular de una forma tiránica; se pierde el amor y el respeto hacia los seres más queridos y lo único que importa son las situaciones que él pueda enfrentar.

En la película la relación de pareja se vuelve muy ambivalente, pues los continuos enfrentamientos que se da entre ellos hacen que aparezcan sentimientos contrapuestos: afecto y cariño, odio y rencor. Además de que no se da un reconocimiento a la persona y a sus necesidades.

Los hijos no tienen una buena relación con sus padres y son agredidos constantemente de forma física o verbal, esta situación los obliga a buscar refugio y comunicación con amigos y grupos de pandillas o se aíslan y se dedican a la delincuencia juvenil.

Y aunque para ellos era normal que se presentaran las agresiones físicas, no veían con buenos ojos cuando esta violencia era dirigida contra su madre, ya que ella era el eje cohesionador de la familia. Las agresiones siempre se presentaban luego de reunirse con sus amigos y consumir licor y aunque era en estas situaciones donde se daban mayores expresiones de afecto y cariño, luego venían las discusiones y la agresión por parte del padre, pues no se daba la sumisión o no se estaba de acuerdo con las decisiones tomadas por este, por esto la violencia física y psicológica se daba en forma cíclica: agresión – perdón – reconciliación, periodo de calma y de nuevo se volvía a la agresión.

Esta situación estaba desintegrando la familia, pues varios de sus integrantes pasaron por diversas etapas que marcaron sus vidas y en otras acabo con ella: el hijo mayor buscando aceptación y reconocimiento se unió a una pandilla juvenil, la hija mayor en una de las reuniones que se hacía en la casa fue agredida y abusada sexualmente por uno de los tíos, motivo este que la llevo a aislarse y más adelante al suicidio y uno de los hijos menores es detenido por robo y encerrado en una correccional para menores.

Y

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