La Calidad De La Educación Y La Gestión Escolar

LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN Y LA GESTIÓN ESCOLAR:

UNA MIRADA AL CAMINO

OREL SALINAS ROBLES

INTRODUCCIÓN

El término calidad es muy usado en nuestros días para dar a conocer que algo es mejor que otra cosa, en este sentido, es como competir, lo que a mi juicio me parece relevante, ya que, si más bien en ese afán de querer ser mejor se tiene que competir, pues no queda otro remedio que hacerlo. Esta situación lo encontramos muy remarcada en las empresas quienes luchan desesperadamente por hacer mejor sus productos que una empresa de la competencia.

De esta manera, reconozco que el término calidad surge con el objetivo de mostrar que se es mejor, y aunque parezca increíble, al menos a las empresas les ha dado buen resultado presentar artículos de calidad ya que son los que más se venden en el mercado.

Ahora bien, qué sucede cuando el término calidad hace acto de presencia en la educación, pues hasta hoy no hemos visto nada claro; considero que una de las causas es por el desconocimiento que tenemos acerca del concepto, o, al menos, no sabemos con qué fin se incluye en la educación.

En este tenor, el presente trabajo intenta dar a conocer algunos puntos de vistas acerca de cómo se ha interpretado dicho término y cómo se incluye en el ámbito educativo, con el firme propósito de que estas ideas puedan analizarse y sirvan como punto de partida para una discusión más amplia.

Asimismo, se rescata de manera subjetiva cómo la calidad educativa se da en el ámbito educativo, precisando que hasta hoy la calidad es meramente un solo reflejo que dista mucho para que se dé de manera real en la educación, pero que a su vez, posibilita la oportunidad de hacerla efectiva en nuestra tarea educativa. Intenta también dar cuenta de las posibilidades de asumir con compromiso y gestión, la búsqueda de la calidad educativa, misma que se puede generar mediante el trabajo colegiado, en donde la apertura al diálogo y la interacción será fundamental en la construcción de las estrategias apropiadas que puedan posibilitar la calidad en la educación.

De esta manera, el primer apartado trata de comentar sobre el concepto de –calidad y su relación directa con la educación; el segundo, da cuenta de cómo se observa en la realidad el uso de la calidad y se posibilitan intencionalmente algunas ideas que pueden apoyarnos para reconocer que algo hay que hacer. Finalmente en el tercer apartado, se precisa una posibilidad de acción para hacer real la presencia de la calidad en la educación.

QUÉ ENTENDEREMOS POR CALIDAD

Resulta sumamente interesante cuando escuchamos hablar de calidad en la educación, pero, ¿será qué sabemos realmente lo que este concepto significa? Pienso que muchos de nosotros no sabemos que quiere decir calidad educativa; nos vamos únicamente con la idea de que calidad se refiere a mejor, a bueno, pero esto no nos queda claro, ya que si bien sabemos que algo que es mejor, es bueno, cuando hablamos de algún objeto o alguna cosa, por ejemplo: si nos referimos a un carro y empleamos el término de calidad, rápidamente pasa por nuestra mente, que el carro es sumamente bueno y que todas sus partes que la componen son las mejores y por ser de calidad pensamos que no va a fallar, en este sentido, el carro es de calidad, pero que pasa cuando nos referimos a calidad educativa, pensamos que se refiere a que la educación es buena o es la mejor, pero hasta ahí, porque si observamos la realidad sucede otra cosa.

De esta manera, considero que para empezar a entender de manera precisa lo que significa calidad educativa, lo primero será trabajar un poco acerca del concepto de calidad, y en este sentido tenemos que la palabra calidad posee una variedad de significados. Puede ser un término más descriptivo que normativo. O sea, simplemente, a un rasgo o atributo. Así, un alumno o un profesor, una escuela o una zona escolar, pueden tener un cierto número de cualidades o de características definitorias.

Es posible también emplear calidad como término más gregario o colectivo; ya no simplemente como sinónimo de atributo o característica, sino más bien a la esencia definitoria de una entidad. De esta manera, es más adecuado hablar de la calidad de aquello a lo que se alude. Es decir, una clase, una escuela o una zona escolar. Pero esto no significa que sea de calidad para todos, quizás alguien tenga una opinión diferente y es válida. Por lo que al referirme a calidad estoy anteponiéndome a mis propios juicios de valor, aunque si puede lograrse que esta calidad sea vista y tratada de igual manera por lo demás, esto quiere decir que si es de calidad puede serlo para todos.

Es muy importante insertar el término de calidad en la educación, sin embargo, se tiene que precisar, qué es lo que nos indicará si realmente es de calidad, por ello, si localizamos en un diccionario el término, éste incluirá definiciones de la palabra tales como “grado de excelencia o naturaleza relativa o tipo de carácter”, en estos casos tendremos que calidad significa grado de excelencia, si comprende dos aspectos: un juicio de valor y una escala implícita de bueno y malo. Para juzgar la calidad de una escuela, se puede utilizar los siguientes calificativos: pobres, mediocres, o excelente, pero esto supone aplicar, grosera o exactamente, tanto una cierta noción de mérito como identificar también más o menos en dónde está situada la escuela con relación a otras.

En este caso, tendremos que el término calidad significa también competencia o aquello que nos invita a competir, en el sentido de tener que hacer comparaciones con otras escuelas, y de esta manera dar calificativos según sean las características que se reflejen en las instituciones. Considero que es importante retomar el término de esta manera, ya que con ello, invitará a las escuelas a fomentar la calidad a través del trabajo. Esto sí se encuentra una escuela que permita avanzar a las demás, con ello quiero manifestar que la calidad puede sernos útil para lograr un mejoramiento educativo.

Por otra parte, calidad puede denotar implícitamente lo bueno o lo excelente en expresiones tales como: profesor de calidad o la escuela de calidad… Resulta difícil separar lo cualitativo de lo cuantitativo, y en expresiones habituales, calidad puede emplearse como distinción en contraste con cantidad. Las valoraciones cualitativas son en este sentido aquellas efectuadas intuitivamente, porque la naturaleza y la complejidad del fenómeno observado desafía la fragmentación

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