La Cultura como transmisora de Valores

“La Cultura como transmisora de Valores”

El presente trabajo tiene como objetivo, desarrollar la temática de la cultura como transmisora de valores es decir, que durante el proceso de nuestra infancia, la cultura funge un papel muy importante, no solo para mantener un diverso legado cultural, si no para asegurar una inserción social y mediante esta obtener el control por medio de la subjetividad creada por la misma cultura en cada uno de los seres humanos que habitamos este planeta.

Esto lo podemos ver ejemplificado desde que nacemos, ya que nuestros padres son los que se encargan de marcar las pautas a seguir conforme a la cultura (sea esta de una ideología Occidental, Hinduista, Islamista, Oriental, etc.) en la que ellos han sido educados, trasmitirán los valores que les fueron dados a ellos como reales y absolutos. De esta manera el Ser humano comenzara un proceso de internalización y sedimentación de los valores tanto cívicos como religiosos, y que son ordenados y transmitidos, por tres instituciones fundamentales las cuales son: La religión, la educación (cultura), y la familia.

Recordemos que todo Ser humano, no se hace miembro de una sociedad, nace con una predisposición hacia la socialidad, para luego llegar a ser parte de una sociedad. En la vida de todo Ser Humano existe una secuencia temporal, en cuyo curso el humano es inducido a participar en la dialéctica de la sociedad. El punto de partida de este proceso lo constituye la “internalización” , que se refiere a la aprehensión o interpretación inmediata de un acontecimiento objetivo en cuanto expresa significado, o sea, en cuanto es una manifestación de los procesos subjetivos de otro que, en consecuencia, se vuelven subjetivamente significativos para el Humano. La internalización en sentido general, constituye la base, primero, para la comprensión de los propios semejantes, y segundo, para la aprehensión del mundo en cuanto realidad significativa y social. De esta manera el humano no solo comprende los procesos subjetivos momentáneos del otro, si no que comprende el mundo en el que él vive, y este se vuelve parte del mismo humano.

Es en este punto retomo el concepto de “Socialización primaria” acuñado por Peter Berguer y Thomas Luckman (1968, p.166) donde menciona que dicha socialización “es la primera por la que el individuo atraviesa en la niñez; por medio de ella se convierte en miembro de una sociedad.” Esta primera etapa es la más importante para todo ser humano, ya que sentara las bases para una socialización secundaria o bien los roles específicos que se van a desempeñar en un futuro dentro de una sociedad establecida.

Este proceso se desarrolla de la siguiente manera: Recordemos la etapa de nuestra infancia, en la cual nosotros mismos consideramos a nuestros padres, como el ejemplo a seguir conforme a lo que nos decían y hacían, dicho en otras palabras nosotros imitamos la conducta y o comportamiento de nuestros padres conforme a su propio comportamiento social, ya que en esos primeros años de nuestra vida, aún no tenemos una conciencia sobre la realidad, que mas adelante será llamada vida cotidiana, mediante la internalización vamos aceptando normas, actitudes, comportamientos, se nos comienza a enseñar un lenguaje, y mediante el mismo objetivamos el mundo que nos rodea, de esta manera también se nos señala quienes son nuestras figuras protectoras, es decir que nuestros padres fungen el Rol de padres y nosotros acudimos a ellos en cuanto algo nos es desconocido.

Mediante el lenguaje es posible que todo pensamiento humano sea conciente, además de que no retrata la constitución propia de lo que llamamos realidad, ya que las palabras son solamente signos de representaciones. Entendiendo

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