La dictadura en diecisiete episodios críticos.

Universidad Adolfo Ibáñez

Facultad de Artes Liberales HIS 111

Historia de Chile

Primer Semestre 2016

                       Ensayo Nº1

                                    La dictadura en diecisiete episodios críticos

                                                        Raimundo Achondo

A mediados del año 2012 existió una polemica en nuestro país a la cual se le llamó la “polémica del contexto”, esta tuvo como principales actores a Magdalena Krebs, que en ese momento encabezaba la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM), y a los directivos del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. El conflicto se bazó en que existieron diferentes corrientes de opinión acerca de la función pedagógica que tiene este museo y su razón de ser.

En una carta al mercurio Magdalena Krebs enfatizó que su punto de vista es, a grandes razgos, que la función principal de los museos es el educar a sus visitantes, y que en este no se estaba cumpliendo. Ella, junto a muchos otros, piensan que el hecho de solamente mostrar lo susbcrito a las violaciones de los derechos humanos en el período del régimen militar no permite abarcar la magnitud de lo que fue el conflicto, por lo se debería mostrar a cabalidad el contexto en el cual este problema estuvo incerto. ¿Por qué se ocacionó este problema? ¿Cuáles fueron las causas? ¿En que situación se encontraba el país? Quienes fueron los principales actores? Preguntas como estas y muchas otras debieran ayudar a entender este conxtexto de mejor manera para que los visitantes verdaderamente puedan aprender de este momento histórico para nuestro país.

En respuesta a esta carta, el directorio del museo enfatizó que la misión real no se encuentra en mostrar este contexto político en el cual estuvo incerto el problema, sino que es abarcar la moralidad de este y recalcar que situaciones como ésta no debieron ocurrir en el pasado y menos volver a ocurrir en el futuro, ya que su función principal es mostrar más que contar. Entonces, ¿Debiera la gente pensar que por esta razón el museo pierde su función pedagógica? ¿Es necesario poner y explicar una línea explicativa para que esta misión se cumpla? Preguntas como estas intentaré responder en este pequeño ensayo para dar a entender mi punto de vista acerca de la función real que debiera tener este museo.

Quiero partir mi argumento diciendo que mi postura se inclina más hacia la posición que toma el directorio más que la de Magdalena, por varias razones que iré describiendo más adelante.

En primer lugar, a mi parecer, el hecho de no mostrar este contexto que explicaría (solo explicar, nunca justificar) en cierto sentido lo ocurrido y ayudaría a los visitantes a no perderse, no implica directamente que el museo pierda su función pedagógica, ya que por el simple hecho de mostrar explicitamente esta violación a los derechos humanos, moralmente uno debiera aprender que estas cosas son inhumanas y que no debieran ocurrir nunca más, teniendo en este sentido un claro ejemplo de educación cívica para el país cumpliendo a cabalidad su misión.

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