Ley De La Atracción

DE QUE SE TRATA REALMENTE “ LA LEY DE ATRACCION” ¿POR QUÉ, A PESAR DE QUE ME ESFUERZO EN PENSAR EN POSITIVO, NO VEO RESULTADOS?

Lo que todos hemos oído, es que si deseas algo con toda tu fuerza y lo mantienes constante y claro con sentimientos positivos, pronto veras realizados todos tus deseos. Sin embargo, no todos obtienen resultados aunque lo intenten una y otra vez. Por otra parte, vengo insistiendo en que se haga un autoexamen de los miedos que pueden estar afectando nuestras actitudes. Es probable que algunos se estén preguntando, que tiene que ver esto con la ley de atracción. Voy a intentar ser lo mas clara posible y para eso comenzare desde la raíz del asunto. Cuando venimos al mundo, ya somos alguien. Es decir que llega a este mundo un ser con ciertas características, en parte herencia genética que nos da ciertas disposiciones de carácter y en parte algo que es propio de esa alma o espíritu como le queramos llamar. Así nacemos todos no importa en que parte del mundo o de que raza seamos. Todos tenemos en nuestro cerebro algo llamado amígdala, que es donde se graban según nuestras vivencias los resultados de las emociones que vamos experimentando. Según donde hayamos nacido, la cultura donde crecemos, lo que nos transmite nuestro entorno social, los padres, los traumas, etc…. Nuestra amígdala se nutre y se va formando lo que hoy conocemos como “yo”, el ego, nuestra personalidad. Pero que hubiese ocurrido si esta misma personalidad de hoy, naciera en otra cultura, con otros padres y en otra sociedad. Seguro nuestras creencias serian diferentes, igual que nuestros conceptos morales. Por ejemplo sabemos que en algunas culturas, es normal el que un hombre tenga varias esposas y seguramente no entienden porque aquí existe la monogamia. Que hizo que pensáramos tan distinto, si al nacer éramos iguales? Por que hoy nos peleamos por las distintas creencias y pensamos muchas veces que el que piensa diferente a nosotros es nuestro enemigo? Que pasaría si yo pudiera por un rato cambiar de amígdala con el enemigo. Saben que pasaría? Seguiría reconociendo mi entorno, a los que son mis familiares y conocidos ya que la memoria intelectual funciona aparte de la amígdala, pero mis sentimientos hacia ellos ya no estarían porque las emociones de mi amígdala se basarían en las experiencias de otra persona Entonces, donde se encuentra el verdadero yo? Si el ego es en realidad el cúmulo de emociones que forma las vivencias. A no alarmarse, ya que igualmente este ego tiene mucho de el verdadero yo que aunque empañado por estas vivencias le da su toque a cada una de ellas .Por esta razón, dos personas que viven exactamente lo mismo, lo perciben en forma distinta. A que quiero llegar con todo esto? A que nos demos cuenta, que se hace necesario limpiar nuestra amígdala de toda impureza y sacar a luz a nuestro yo más limpio y puro. A que antes de desear nos quitemos los miedos que no son mas que prejuicios que se fueron sumando en nuestra amígdala y nos ha ido creando la idea falsa de que necesitamos esto o aquello para ser feliz. Que si no obtenemos ciertas cosas o no logramos que determinadas personas se queden en nuestra vida, seremos infelices. Todos somos dependientes de algo. En algunos casos, de algo material , de puestos de trabajo, de otras personas, del reconocimiento de otros ,nos sentimos felices mientras mantenemos en nuestra vida alguna o varias de estas cosas, pero si un día no están, sentimos que la vida no tiene sentido.

Peleamos por ellas, discutimos por querer tener la razón, nos matamos trabajando para conservar lo que adquirimos o en algunos casos para aturdir nuestros sentidos. Por todo esto no debemos sentirnos culpables en absoluto, ya que esto es una cadena que viene desde hace miles de años, en que la humanidad desvío su desarrollo. Lo que importa es el aquí y ahora en que tenemos la oportunidad de conocer nuestro propio yo y darle el lugar que le corresponde. Al reconocernos, también reconocemos el yo verdadero que se encuentra en los demás, detrás de ese ego distorsionado, miedoso y algunas veces acomplejado y muy egoísta. De esta forma sabemos que yo podría haber sido tu y a la inversa. Esto requiere de asertividad ya que no se trata de aceptar el atropello o la mala conducta de los otros, pero nos libera del odio la venganza y las actitudes negativas hacia los otros, que luego nos acarrean consecuencias negativas de vuelta a nuestra vida. Reconocernos también significa perdonarnos y perdonar ya que todos somos victimas y victimarios de este sistema erróneo de creencias. Algunos ya han dado algunos pasos mas hacia la liberación de su yo que otros, pero si eso es así verdaderamente, se esta dispuesto a dar una mano a los que vienen mas atrás. Aquel que dice haber avanzado más que los otros y lleva el toque de la soberbia, tratando de apabullar con su supuesta sabiduría y palabrerío técnico, intelectual o científico, a los que considera inferiores, en lugar de facilitarles el camino, es simplemente un ego con complejo de poder, demostrando

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