Los criterios de evaluación de la educación

Cuando se habla de mala educación es importante tener en cuenta los criterios a partir de los cuales esta se califica como buena o no.

Es buena si fomenta valores, si produce un verdadero entendimiento, si se aprende a conocer, transmitir saberes y destrezas. Pero los esfuerzos que se han hecho por lograr esta verdadera calidad en educación han fracasado; y ¿a qué se debe esto? Generalmente se ha creído que con el aumento en la inversión de la infraestructura se lograra mejorar a la educación.

Sin embargo es evidente que de nada sirve una buena infraestructura, si la calidad no está al mismo nivel.

Pera tener una mejor calidad, se debería pensar entonces en invertir en capacitaciones de los encargados de la labor educativa, pues solo con la actualización va ser más posible esto.

El rezago educativo por otra parte va retroalimentando y haciendo crecer cada vez más las desigualdades económicas y dificulta el objetivo de dejar de ver a la educación como la manera de invertir en un capital humano, para así tener una mejor vida. Esta concepción de la educación suele ser muy errónea, pues se ha comprobado que el tener un mayor nivel educativo no asegura para nada un mejor nivel de vida.

A pesar de esto será difícil que la sociedad deje de ver a la educación como una mercancía, pues es la misma familia la que por lo general fomenta a los jóvenes esta idea.

El estado ha venido generando una idea a través de la cual se puede aspirar a una buena educación y esto consiste en combatir la mala educación de las élites del poder y la riqueza que dudan de lo básico o se oponen a lo clásico.

Dentro de los problemas del desarrollo educativo y económico habrá que tener en cuenta que también se deben al desperdicio de recursos existentes y en formación en el sistema educativo superior, que se fugan al empleo informal o por otra parte enriquecen a los países ricos.

Es por lo tanto el mal desempeño de la economía lo que nos lleva a una mala educación y no la mala educación lo que lleva a un lento crecimiento de la economía como por mucho tiempo se ha venido pensando.

Es indispensable entonces que se empiecen a tomar en cuenta estos planteamientos lo más pronto posible, para poder salir de la ruinosa situación en la que se encuentra la educación de nuestro país; pues de otra manera lo único que se va a lograr es seguir contribuyendo a que los problemas educativos se hagan más grandes, ya que al no existir una buena educación muchas personas caen en el erróneo pensamiento de tomar como alternativas otras maneras de información; como por ejemplo los medios de comunicación, que solamente se encargan de desvalorizar más a la cultura.

Los jóvenes por otra parte forman parte de una esperanza, una esperanza basada en que sean ellos los que ayuden o contribuyan al desarrollo y crecimiento

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