Mi pequeña mascota
JudMin18 de Junio de 2015
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Mi pequeña mascota.
Día 1.
En un mundo como el actual, dónde ya no sólo humanos compartían vidas y podían convivir. Si no también aquellas mascotas híbridas con formas humanas pero con gestos de animales le eran entregadas a cada amo que gustase pertenecer de una "mascota". Kim Jonghyun, un rico pero frío hombre canta autor, busco una compañía para ver si esta podría hacer de su vida más feliz y con sentido. Entró en aquella tienda grande, era la mejor con mascotas de todos los tipos. Camino por el pasillo nada silencioso, lleno de melodías de diferentes sonidos, en realidad no le interesaba una mascota con exactitud cualquiera estaría bien, pensaba el hombre. Quizá el hecho de que lo que sus ojos vieron causó cierto interés en una al fondo del pasillo, era rara, extraña, pero apesar de eso era única. Se aproximó a acercarse a la jaula mirando fijamente aquel espécimen. -¿Dime cómo te llamas, pequeño? -Le susurro con su voz fria y vacía, a causa de su manera déspota de ser.
-Caminaba de un lado a otro cansado de esperar por un amo, su extraña combinación de gato y zorro no agradaba a cualquiera, como todos solo se acercaban a admirar la bella extraña creada por la naturaleza, ya era común sentirse observado. Más era triste el encierro y la soledad con la que vivía en ese lugar, donde gatos con gatos, zorros con zorros y perros con perros, todos con alguien menos Kibum.
Con semblante callado, elegante y coqueto como era caracterizado Key como los cuidadores le llamaban permanecía a la vista de todos en aquella jaula llamativa al fondo del pasillo, se encontraba recostado como todo un minino acorrucado en su propio cuerpo moviendo solo la punta de su esponjada cola, pues se sentía pacifico, hasta que una voz seca se escuchó resonar en su pequeño espacio, levanto su afilada y gatuna mirada inclinando a un costado su rostro para verle mejor. - Key - comentó en un tonó moderado sin perder de vista las orbes impropias, realizando una muy leve venía con su cabeza agachando un poco sus afiladas orejas, ya que aquello estaba en el reglamento al recibir a un posible amo, más se sentía un poco intimidado por ello el gesto con sus orejas
-Key, ¿que mascota exactamente eres? -Saco su manos de su abrigo, y en un acto curioso de su parte trato de acariciarle con un dedo, como si se tratase de un chiquillo travieso y sin madre. Observó la belleza que caracterizaba a su pequeño animalillo que tenia enfrente, abrió mas sus ojos. Aquella mascota no suya, tenia pomulos altos que le parecieron elegantes como su nariz, sus ojos raros sólo hacían más llamativo al espécimen para Jonghyun. Posaba sus orbes por cada parte del cuerpo del "ojos raros". Era asombroso ante Jonghyun, sin duda ese debería ser su mascota
-Soy la cruza de un zorro y un gato. - Mencionó desviando un poco su mirada pues la gran mayoría de las personas se reían de aquella extraña cruza, ya había escuchado de todo, hasta que era más viable que un perro se cruzara con un zorro a que lo hiciera un gato, levanto un poco si mirada viendo el dedo del humano frente a el acercándose solo un poco para olfatear un poco a este, su esencia era algo seca pero suave al igual que su voz por lo que le permitió acariciarle un poco, sus instintos de felino le hacían acercarse un poco más, pero los de zorro le hacían quedarse quieto por lo que solo se acerco un poco fijando sus orbes en las ajenas, admirando la profundidad de estas.
Muestrame tus ojos, no te escondas. -Le susurro, siguiendo su mirar sin ninguna vergüenza. Para Jonghyun aquella cruza de gato y zorro lo hizo feliz, más sin embargo su rostro no podía demostrarlo, asi que sus ojos sonrieron por sus labios al observar su acto. Ladeo un poco su rostro admirando las orbes tan hermosas y raras que le eran mostradas por el felino y zorro al mismo tiempo. -Eres precioso, Key. ¿Te gustaría ser mi mascota? -Apesar de aparentar frialdad era consiste que nada a la fuerza no traía nada bueno, su madre siempre le inculcó buenos modales, como una buena educación además de eso a ser humano. Pero de alguna manera en lugar de ser un chico alegre se volvió frío sin olvidar su humanidad (?). Hasta que esta salió a flote con una mascota rara, que para Jonghyun era un joya que no se imagino encontrar.
Mantuvo su mirada atenta a las orbes del humano que parecía estarle examinando, extrañas sensaciones le cruzaban por su ser, bajando su oreja derecha al escuchar el alago ajeno, en mueca de agradecimiento ante el alago brindado, le parecía que una bella persona se escondía detrás de ese rostro serio, pudo descartar lo al ver sus pequeños ojos, sin poderlo evitar su cola comenzó a mecerse de un lado a otro mientras le miraba -¿ah?- Aquello le había tomado por sorpresa era la primer persona que le preguntaba aquello, y sobre todo la primera que tenía aquel interés de adquirirle, puesto que los demás solo se lo planteaban a si mismos, más nunca pasaba nada. El minino mimado que escondía dentro salió a flote cerrando sus ojos y restregando un poco su rostro en la mano ajena dando pequeños ronroneos. - Sería una bella experiencia. - Le comentó en un tono suave.
Asi fue como una extraña mueca apareció en los labios del chico aparentemente frío. Una sonrisa que a el mismo le pareció algo incapaz de hacer, extrañamente el comportamiento de su al parecer nueva mascota y sus ronroneos hicieron "click" dentro de él. - ¿Experiencia? -Se pregunto por ello, pero dejo en segundo plano a la pregunta dando prioridad a obtener rápidamente a su nueva mascota, aunque en realidad era su primer mascota en toda su vida. Hablo fuerte y claro, de un momento a otro los tramites estaban hechos y fueron dadas la indicaciones como papeles necesarios para adquirir a dicha mascota exótica. Aquel felino con cruce de zorro era suyo, eso le decía un pedazo de papel. Abrió la jaula en la que estaba el muchacho híbrido, y extendió su mano invitandolo a salir. -Vamos, Key.
Al notar aquella mueca su cola se meció un poco más siendo suave, sin dejar de sonreírle con una cálida sonrisa, era la primera vez, que se sentía feliz, como lo llamaban los humanos y muchos de sus compañeros cercanos; recordó cuando su amigo un cachorro fue adoptado, fue quien le explico aquella sensación que ahora el gato con cruza de zorro experimentaba. Asintió a la pregunta que le fue formulada, pues con una experiencia sería una bella enseñanza en un unión, como lo decía el cuidador. Vio con atención como hacían papeleos, y su ahora amo firmaba estos con cierta prisa. Mantenía sus orejas erguidas en señal de atención esperando que todo finalizará. Al ver como esa Jaula se abría sus ojos soltaron un destello de emoción, pues por fin tendría una familia, como tanto lo soñó, más sintió un poco de miedo, que tal que si pasaba algo malo, agachó un poco sus orejas bajando su mirada, más al ver aquella mano tendida a el, quiso confiar en que todo estaría bien, tomó la mano ajena con delicadeza, saliendo despacio de aquella jaula, su esponjada cola se movía de un lado a otro mostrando su felicidad. -Vamos...- hizo una pequeña pausa inclinando su rostro a la izquierda- ¿Como se llama? - cuestionó a su nuevo compañero de vida.
-Soy Evan Connor. Puedes también decirme Jong, o como gustes. -Se saco el abrigo que traía en cima, colocándole la prenda sobre los hombros de su delgada mascota, apesar de ser mas alto que él. Aún asi le pareció adorable y sintió la necesidad de proteger si desnudez.
Le regalo una amplia sonrisa asintiendo a lo dicho por su amo, siguió con su mirada cada acción que realizaba dejándose cubrir por el, aquello fue extraño ya que acostumbraba a estar desnudo, más fue una bella sensación como si estuviese siendo protegido, sin poderlo evitar agacho un poco su cabeza restregándola en el hombro ajeno en señal de agradecimiento-
Aquello le había sorprendido, no estaba tan ligado al afecto físico. Sin embargo eso le hizo sentir bien. Camino y espero que este lo siguiera hasta su auto estacionado frente a la tienda a la que Key ya no pertenecía, abrió la puerta del copiloto. -Sube. - Su voz sono mas suave de lo normal, quería que el pequeño ser que era suyo no se asustará con su forma de ser.
Al verlo avanzar caminó con porte como todo un zorro orgulloso, moviendo la punta de su cola en una forma tranquila como el minino que llevaba dentro; al ver aquel auto observo a su amo, era la primera vez que veía uno de cerca, era la primera vez que salía del lugar donde ya no vivía más, como le fue indicado subió tomando asiento acomodando su cola en sus largas piernas viendo con suma atención y curiosidad el interior del auto buscando una manera cómoda de estar.
Suspiro, y cerro la puerta de su auto. Subió, y condujo por las largas calles hasta su apartamento, en ocasiones sus ojos se desviaba hacia su acompañante, observando cada pequeño detalle de aquel ser. No odiaba el silencio, ya estaba acostumbrado a aquello, pero está vez le parecía incómodo al ser dos seres compartiendo un mismo espacio y por ahora lo único que tenían de común era el silencio.
-veía el espacio reducido con extrañeza buscando comodidad para estar, con destreza se paso al asiento de atrás siguiendo sin encontrar su lugar por lo que regreso al antiguo, olfateando todo lo que se encontraba en el lugar, fijó sus orbes en su amo- No sabia como tener una conversación larga pues, su vida siempre era silencio, más se sentía curioso por lo que con sus delgados dedos busco llamar la atención de su amo tocando delicadamente su brazo- ¿ Vivimos lejos? ¿En nuestra casa hay arboles? -Preguntó con cierta emoción ya que tenía ansias por conocer todo lo que se encontraba en su nuevo mundo fuera
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