Niñez

Introducción

A continuación se presentara un texto sobre el desarrollo psicosexual del ser humano a lo largo de sus diferentes etapas ya sea desde la infancia pasando por la adolescencia y llegando a la adultez.

Además de especificar el desarrollo psicosexual se intentara caracterizar a cada etapa de la vida de un ser humano con las distintas fases sexuales y las particularidades de cada una.

Desarrollo:

La organización mundial de la salud, define a la sexualidad del ser humano como una de sus características que involucra esferas más amplias en el ámbito biológico psicológico espiritual y socio cultural. Define la base que nos permite comprender el mundo y vivirlo como hombre o como mujer.

La sexualidad humana tiene una condición única entre todas las especies vivientes, es una manera de comunicación amplia trascendente entre los seres humanos y es la forma de expresión de un sentimiento complejo.

La sexualidad es una necesidad humana expresada a través del cuerpo elemento, básico de la feminidad o masculinidad, de la auto imagen y de la autoconciencia del desarrollo personal.

A continuación se detallara el desarrollo psicosexual más notorio en cada año de vida desde el nacimiento hasta los doce años en el cual comienza la pubertad y la adolescencia.

Desarrollo psicosexual en la infancia

Desde el nacimiento hasta el año y medio de edad: Fase Oral:

Cuando el niño tiene un mes el dolor se expresa por el llanto en función de necesidades alimenticias. A los dos meses aparece la sonrisa como respuesta a la voz humana indiferenciada igualmente, cesa el llanto al acercarse una persona. La conducta sexual es prácticamente nula. A los 5 meses el niño sonríe ante los objetos y comienza a llevárselos a la boca. A este periodo, Freud lo denomina FASE ORAL. Es decir, el contacto con el mundo, es a través de los objetos que lleva a su boca. A los diez meses es cuando aparece un cierto interés por los demás niños. A los siete meses el niño se toca los órganos genitales. A los nueve meses el registro emocional se enriquece ya que cede de forma evidente, aparece la cólera, la ternura y un interés nuevo por el padre. Los quince meses representan el periodo de la autoridad de la independencia que va acompañada de la autoridad negativa.

El primer año de vida a los tres años: FASE ANAL: el niño comienza a interesarse por los otros niños pero no se trata más que de relaciones paralelas. Un poco antes de los 2 años aparece valoración olfativa de las materias fecales; El control de esfínteres se produce en esta etapa y es vivida por el niño como placentera ya que asocia las felicitaciones de sus padres a premios. Vive esta etapa como algo beneficioso y satisfactorio.

De los tres a los cinco o seis años- FASE FALICA.

El “yo” del niño es muy egocéntrico quiere que se le mime y felicite y le gusta ser el primero, se siente más integrado en el papel del sexo. Le gusta enseñar el ombligo y jugar a los médicos. El complejo de “Edipo” es otra característica de esta etapa.

El diccionario de psicoanálisis “Laplanche y Pontalis” define al complejo de “Edipo” al conjunto de sentimientos que afloran del niño en relación del progenitor del sexo contrario. Influyendo este en la estructuración de la personalidad y en la orientación del deseo humano. La castración es otro mito, cumpliendo su función prohibitiva.

La curiosidad por la exploración sexual y el descubrimiento de placeres caracterizan a esta etapa. En el caso de los varones el pene y en el caso de las niñas el clítoris. Cabe aclarar que esta curiosidad se da en mayor medida en los varones.

En esta etapa tiene mucha influencia las actitudes sexuales de los adultos; las represiones en las manifestaciones sexuales de los niños pueden influir de manera determinante en su proceso evolutivo y su posterior proceso de sexualidad.

Sobre la finalización de esta etapa se define la adquisición

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