Nuevas Amenazas

El Estado y sus elementos, encontrado en: http://clubensayos.com/Historia/El-Estado-Y-Sus-Elementos/19031.html,

El surgimiento del Primer Orden Económico Mundial, entre el siglo XIV y el XVI, y la posterior firma de la Paz de Westfalia en 1648, constituyen dos hitos de gran relevancia para los temas estudiados a través de esta investigación, pues, a partir de ellos se gesta la globalización y se instituye el sistema internacional, respectivamente. Asimismo, en sus interacciones posteriores encontramos el origen de las amenazas analizadas, particularmente del terrorismo como fenómeno político y del crimen organizado como evento social. El narcotráfico, por su parte, si bien es un problema más reciente, cabe destacar que el consumo de drogas y alucinógenos en determinadas áreas del mundo, también son de larga data.

Es indudable que el actual proceso de globalización facilitó que las actividades de la mafia adquirieran dimensiones transnacionales en la década pasada. A grandes rasgos, la globalización se refiere al acortamiento de las distancias a escala mundial, mediante la aparición y el fortalecimiento de redes de conexiones económicas, tecnológicas, sociales, políticas y ambientalistas que sin lugar a dudas son aprovechadas por la delincuencia para sus fines.

Los primeros 10 años de la post Guerra Fría significaron un cambio estructural distintivo en la naturaleza de las amenazas a la Seguridad. En numerosas partes del globo (y en la mayor parte de Occidente) la consolidación de regímenes democráticos y la construcción de complejos procesos de integración regionales, fueron factores que interactuaron para trasladar el foco de las preocupaciones estatales desde una posible ofensiva militar externa, protagonizada por otro Estado, a episodios que afectan internamente a los países, amenazando vidas humanas y propiedades, y creando un clima de terror. El terrorismo internacional, los tráficos de drogas, las armas de fuego y los explosivos, así como las de destrucción masiva y el crimen organizado, son habitualmente llamadas las nuevas amenazas "no tradicionales o transnacionales".

El Gran Caribe ha sido considerado históricamente como la llave estratégica de América donde las grandes potencia del mundo han buscado el sustento de sus economías, no es fácil obviar el hecho histórico y sus eventuales consecuencias de haber sido una región, en el pasado, el primer centro de penetración Americana, para las potencias Europeas durante el descubrimiento, la conquista y finalmente la presencia de corsarios, acción que se repite en la I y II Guerra Mundial, con los submarinos Alemanes. Esto explica en cierto modo la pobreza de raíces comunes que incrementan la tendencia de las amenazas delincuenciales transnacionales organizadas en el Caribe.

Por ende, existen grandes desafíos que en la actualidad los países del Gran Caribe tienen que enfrentar, ellos son; La pobreza, el narcotráfico, la falta de desarrollo, consolidar la democracia, la integración económica, la prostitución infantil, el SIDA, la corrupción, la desnutrición, desastres naturales, violación de los derechos humanos, trafico de armas, contaminación, presencia de desechos radiactivos, químicos y tóxicos, carencia de tecnología y educación, alta deuda externa, delincuencia organizada, carencia de ética y moral de la dirigencia política, lavado de activos, la piratería, la pesca ilegal, los suelos agrícolas pobres, la carencia de incentivos y estructura jurídica para la inversión, deportación de criminales nacionales a países de origen, aumento del nivel del mar, los recortes presupuestarios, las economías vulnerables, el contrabando, los mercenarios y por ende las empresas que los contratan, los alto costo de los servicios, el robo de automóviles, el aumento de la seguridad privada, la lucha electoral por el poder, la deforestación, el terrorismo en todas sus facetas o manifestaciones, entre otros.

La globalización ha generado una apertura de todos los países al mundo creando nuevos retos y oportunidades para el crecimiento económico abriendo nuevos espacios. Pero ha traído consigo una nueva ola de dramáticas crisis relacionadas con ataques terroristas, violencia, drogas, crimen y crisis económicas. Los nuevos desafíos del mundo actual implican una nueva concepción mundial de la inteligencia para luchar contra las nuevas amenazas de este siglo.

Al ir en aumento las nuevas amenazas, los tipos de delitos transnacionales y el número de grupos delictivos, no hay ningún país que sea inmune a la actividad criminal organizada, la cual se ha convertido en una amenaza contra la seguridad y el desarrollo, teniendo un impacto importante en los sectores de la paz y de la seguridad, los derechos del hombre, la democracia y el buen gobierno. Estrechamente ligada a las zonas en conflicto, a las regiones donde los Estados son débiles, al terrorismo y a la corrupción, se desprende que la delincuencia organizada constituye la principal amenaza a la seguridad. Seguridad que está íntimamente ligada con cada droga, enfermedad, acto terrorista que mata, viaja y destruye silenciosamente y despiadadamente.

Dar a conocer las explicaciones académicas de las amenazas transnacionales, las cuales no presentan una historia demasiado larga y ha estado, por lo general, dividida conforme a las líneas que separan las distintas ciencias sociales, que han tratado de extender sus paradigmas, con algunos retoques, al estudio de estos fenómenos. En ocasiones el grado de refinamiento de estas aproximaciones no supera en mucho las fuentes utilizadas, ya sean éstas procedentes de los medios de comunicación o de las agencias de seguridad.

La consecuencia es que elementos fundamentales de las ciencias sociales o bien han estado ausentes durante mucho tiempo de los enfoques académicos sobre las amenazas delincuenciales transnacionales organizadas y por ende el crimen organizado o bien se han mantenido en los márgenes de la explicación, como un pilar al que se recurre para otorgarle un barniz de seriedad.

En conjunto estas aportaciones pueden situarse en un continuo que va en un extremo en el que se presenta a las organizaciones criminales como un ente altamente jerarquizado con códigos de conducta internos, desviados hasta el límite contrario en el que se sitúa una exhibición en la cual, el crimen organizado es la violación planificada de la ley con el objeto de adquirir beneficios económicos o poder, cuyos delitos son, independientemente o en su conjunto, de especial gravedad y se llevan a cabo por más de dos participantes, que cooperan en el marco de una división laboral por un periodo de tipo prolongado o indeterminado utilizando estructuras comerciales o

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