Orientación vocacional del estudiante en la educación técnica venezolana

Orientación vocacional del estudiante en la educación técnica venezolana

En la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela (1999), se consagra a la educación técnica, como un proceso educativo estrechamente vinculado al trabajo, a fin de armonizar la educación con las actividades productivas propias del desarrollo social, local, regional y nacional, por medio de las orientaciones de niñas, niños y adolescentes, formándolos para el trabajo productivo, con visión científica y humanitaria, que permita satisfacer las necesidades básicas, contribuyendo con esto al desarrollo regional y nacional.

De acuerdo al currículo básico nacional (2007), la educación básica trata de atender el aspecto vocacional del alumno a través de los ejes transversales donde se plantea la valoración, vivencia y satisfacción del trabajo bajo las premisas de calidad y productividad, labores y ocupaciones. Se considera, que la orientación no debe ser vinculada solo con la capacitación para el trabajo y el desempeño de un oficio, también el potencial que realmente el alumno posee sus habilidades, sus destrezas, sus intereses; características que a medida que se van descubriendo forman lo que se llama aptitud o rasgo general y propio de cada individuo que facilita el aprendizaje de tareas especificas y distingue al alumno de los demás lo que hace las diferencias individuales.

Es importante que las escuelas técnicas orienten su trabajo hacia la formación personal y profesional de los estudiantes, el desarrollo de las habilidades que requieren para su formación técnica, la creación de hábitos correctos de trabajo, la consolidación de conocimientos teóricos adquiridos y su vinculación con la práctica. Esto con el fin, de preparar al alumno para el trabajo independiente, vinculando y relacionando a los educandos con las condiciones reales de la producción y aplicación de las nuevas tecnologías, así como despertar en ellos intereses mediante la práctica. De allí pues, la educación técnica se orienta a entregar a los estudiantes la capacidad y los conocimientos necesarios para desempeñarse en una especialidad de apoyo al nivel profesional o bien desempeñarse por cuenta propia.

Según Aguirre, citado por Sánchez (2003), la orientación puede definirse como una serie de fases para llevar a cabo el desarrollo vocacional es decir como un:

Proceso de ayuda al orientado para que al conocerse a sí mismo y al mundo del trabajo, se prepare y acceda a una profesión adecuada a sus aptitudes, intereses, rasgos de personalidad, teniendo en cuenta las posibilidades de estudio y de trabajo existentes.

Con referencia a lo expresado por el autor, la orientación vocacional proporciona al estudiante vivencias, pensamientos que por ente son afectivas a la voluntad espontanea de cada persona, debido a que cuando el alumno ejecuta las acciones a un trabajo donde se sienta a gusto, este activa una serie de procesos que actúan en forma conjunta dentro de su personalidad.

En este sentido, podemos decir que la orientación vocacional, es un proceso de formación integral del alumno ya que le permitirá fortalecerse en una determinada labor, además como ser humano para vivir en sociedad, pensar, actuar y formar parte de las diversas situaciones que las personas enfrentan a diario.

Por consiguiente, al considerar la vocación del

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