PLAN AGROPECUARIO

En muchos países, diversos investigadores han relacionado los sistemas de producción agropecuaria con la seguridad alimentaria y con el alivio de la desnutrición y la pobreza, sobre todo en familias desfavorecidas y con escasos recursos económicos y naturales. En este sentido, se le han atribuido a dichos sistemas la capacidad de producir alimentos para el autoconsumo y una obtención de ingresos monetarios a través de la venta o intercambio de excedentes, además de generar dentro de las familias roles que caracterizan sus funciones de género y que contribuyen a que las unidades productivas sean catalogadas como empresas familiares debido a sus interacciones con el medio que los rodea.

Los municipios del viejo caldas poseen una amplia vocación y diversidad agrícola, pecuaria y ambiental con condiciones agroecológicas aptas y distribuidas en sistemas productivos con alturas desde los 900 hasta los 3800 msnm; la vocación agropecuaria y el conocimiento tradicional de la comunidad en el manejo de los cultivos, hacen que los Municipios tengan un gran potencial para el desarrollo de la zona rural, dinamizando la economía de las familias, fortaleciendo el papel de la mujer campesina y generando empleo a través de los sistemas de producción campesinos. No obstante, se presentan limitantes estructurales que han impedido que el dinamismo económico de los últimos años se refleje de la misma manera en las condiciones de vida de los pobladores rurales y en el desempeño de sus actividades económicas, principalmente las agropecuarias. En ese orden de ideas las Oficinas de Desarrollo Agropecuario son las dependencias encargadas de brindar las herramientas necesarias para que el pequeño y mediano agricultor pueda acceder a los diferentes programas que dentro de los planes de ordenamiento territorial contempla el Estado.

El propósito del Plan Nacional de Desarrollo 2014 - 2018: “Todos por un nuevo país” es el de construir una Colombia en paz, equitativa y educada. Para el logro de los objetivos de dicho plan el Gobierno Nacional plantea como estrategia fundamental la “Transformación del campo”, una transformación que requiere pensar en una visión en la que el territorio rural sea un espacio en el que convergen la igualdad de oportunidades para la población junto con el crecimiento y la competitividad de las actividades económicas rurales, principalmente las agropecuarias. En este sentido el Estado se propone como objetivos 1) Ordenar el territorio rural buscando un mayor acceso a la tierra por parte de los pobladores rurales sin tierras o con tierra insuficiente, el uso eficiente del suelo y la seguridad jurídica sobre los derechos de propiedad bajo un enfoque de crecimiento verde; 2) Cerrar las brechas urbano-rurales y sentar las bases para la movilidad social mediante la dotación de bienes públicos y servicios sociales que apoyen el desarrollo humano de los pobladores rurales; 3) Acelerar la salida de la pobreza y la ampliación de la clase media rural a través de una apuesta de inclusión productiva de los campesinos; 4)Impulsar la competitividad rural a través de la provisión de bienes y servicios sectoriales que permitan hacer de las actividades agropecuarias una fuente de riqueza para los productores del campo; 5) Contar con un arreglo institucional integral y multisectorial que tenga presencia territorial de acuerdo con las necesidades de los pobladores rurales y los atributos del territorio, y que además permita corregir las brechas de bienestar y oportunidades de desarrollo entre regiones rurales.

De otra parte en el Plan Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (PNSA) 2012 – 2019, el Estado Colombiano se propone como objetivos, metas y estrategias: 1) Proteger a la pobla¬ción de las contingencias que conllevan a situaciones indeseables y socialmente inad¬misibles como el hambre y la alimentación inadecuada; 2) asegurar a la población el acceso a los alimentos en forma oportuna, adecuada y de calidad; y 3) lograr la inte¬gración, articulación y coordinación de las diferentes intervenciones intersectoriales e interinstitucionales.

Teniendo en cuenta éstos objetivos de orden nacional, la Oficina de Desarrollo Agropecuario, plantea el programa de Asistencia Técnica Agropecuaria, que ha sido considerada como uno de los procesos clave para orientar el desarrollo productivo y tecnológico del sector agropecuario y en general del sector rural, puesto que este proceso se ha enmarcado en dos firmes propósitos: 1. proponer y validar alternativas tecnológicas que permitan optimizar la producción agraria partiendo de las potencialidades y limitantes de los actores rurales y de sus condiciones de vida, y 2. promover procesos organizativos y de gestión comunitaria, con el firme propósito de gestionar modelos de producción agraria competitivos, sostenibles y equitativos y así contribuir a mitigar los problemas tecnológicos, gerenciales y organizativos más sentidos de los productores rurales, con el fin de mejorar las condiciones de vida de los habitantes rurales del municipio de modo que éstos cuenten en todo momento con acceso físico y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades alimenticias, y así lleven una vida activa y sana.

Desde el punto de vista de la seguridad alimentaria, es necesario resaltar que los sistemas de producción agropecuaria, de acuerdo con la definición de la FAO, contribuyen al objetivo general de “asegurar que todas las personas tengan, en todo momento, acceso físico y económico a los alimentos básicos que necesiten” y que dichos sistemas cumplen con los tres propósitos específicos que esta organización establece: “asegurar una producción adecuada de alimentos, conseguir la máxima estabilidad en sus flujos y garantizar el acceso a los alimentos disponibles por parte de quienes lo necesitan”. En este sentido se hace necesario la planeación y ejecución de proyectos productivos acordes a las necesidades de cada comunidad en particular, con el fin de impulsar las economías familiares campesinas y que a partir de dichos proyectos, se propicie en estas familias la capacidad de generar excedentes, lo cual conducirá a mejorar sus condiciones de vida.

De otra parte en los últimos años el Gobierno Nacional y Departamentales han enfocado esfuerzos en el establecimiento de una base empresarial, basada en modelos de innovación, cooperativismo y asociación. En este sentido es necesario contar con un modelo de acompañamiento para el desarrollo de negocios rentables sobre la base de los saberes locales y regionales, así como impulsar la innovación a partir de la incorporación de buenas prácticas productivas y comerciales que faciliten el acceso a los mercados en condiciones justas y competitivas. Para esto, se requiere el desarrollo de planes de negocio y el fortalecimiento de las figuras asociativas que mejoren las capacidades productivas en el marco de apuestas agropecuarias de impacto regional. Esto implica, entre otros aspectos, la capacitación en planes de negocio, la formalización de la actividad empresarial de las asociaciones rurales, y la implementación de un sistema de información sobre la actividad empresarial en el sector rural

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