ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Relato De Un Naufrago


Enviado por   •  2 de Octubre de 2013  •  2.074 Palabras (9 Páginas)  •  373 Visitas

Página 1 de 9

RELATO DE UN NAUFRAGO

Gabriel García Márquez

PLANTEAMIENTO:

La tripulación del Caldas estaba de permiso en Mobile. Era el último día, al día siguiente zarpaban. Ese día fueron al cine, y vieron una película en la cual un barco naufragaba, y al día siguiente, 24 de febrero, zarparon.

NUDO:

Todo iba bien en el barco, pero Velasco (el protagonista) tenia un mal presentimiento. A las 23:55 del 28 de febrero, una ola provocada por un golpe de viento hizo que el barco volcase. Ya en el agua Velasco subió a una balsa, intento ayudar a sus compañeros, pero la balsa era demasiado grande y pesada, y no lo consiguió. Así estuvo 10 días en la balsa sin comer ni beber.

DESENLACE:

Al décimo día legó a tierra firme (Uraba, Colombia), donde le recogió un hombre que le llevó al pueblo, nadie sabía lo del naufragio. Le llevaron a que le visitara un médico.

Se hizo famoso, le tomaron por un héroe, y se hizo rico gracias a la publicidad. Pero al cabo de un tiempo fue olvidado para siempre.

RESUMEN POR CAPITULOS:

Capítulo 1

Desde la página 15 a la página 22. El 22 de febrero, el día que se les anunció que regresarían a Colombia, después de haber permanecido en Mobile, Alabama, en Estados Unidos 8 meses mientras el A.R.C. Caldas era sometido a reparaciones electrónicas y de su armamento a la vez que los miembros de la tripulación recibían una instrucción especial. En los días de franquicia, iban al cine y a tomar algunas copas a una taberna. Un día fueron todos al cine, sus amigos con sus novias y él con la suya, vieron El motín del Camine, lo que más les impresionó fue una tempestad que hubo en la película. Desde ese momento estaban asustados por si algo al estilo a la película les podía suceder a ellos en el camino de vuelta Colombia. La mayoría de sus amigos más cercanos de la tripulación comenzaron tomar una determinación tan pronto como llegasen a Cartagena, dejarían la marina. En el embarque todos lo pasaron bastante mal.

Capítulo 2

23 a la 31. Ya estaban en el Golfo de México y la mayor parte de la tripulación tenía la misma sensación, el mareo. Estaban dudando si llegarían bien a tierra. El baile comenzó a las diez de la noche; lo peor era salir a la borda de guardia. A la once y media de la noche comenzó el barco a inclinarse peligrosamente a estribor y lo que hicieron fue ponerse a babor. Ya estaban todos nerviosos, pensaban que avisarían para cortar las amarras de la carga, por la cual se estaba hundiendo el barco. Unas inmensas olas les bañaban. Todos los que estaban en cubierta cayeron de repente al agua. Ellos no se dieron cuenta hasta que no se vieron en el agua.

Capítulo 3

33 a la 40. Pensaba que estaba sólo en el mar; apoyado en unas cajas de la carga, escuchó las voces de sus amigos que pedían socorro. De repente aparecieron unas balsas, se montó en una de éstas e intentó socorrer a sus compañeros que estaban gritandole. No lo pudo conseguir aún estando a dos, tres metros de distancia, el oleaje era muy fuerte, era imposible. Se vio impotente viendo como sus compañeros se ahogaban en el mar y él no podía hacer nada por mucho que intentaba. Se vio solo en el mar, lo único que le quedó fue su medalla de la Virgen del Carmen, su reloj y algunas tarjetas de un almacén de Mobile.

Capítulo 4

41 a la 50. Fue su primera noche solo en el mar. No sabía dónde se encontraba, la balsa avanzaba gracias a la brisa que corría, el sol impregnaba en su espalda un tremendo calor. Pensativo estuvo la mayor parte de la tarde. Siguió mentalmente el viaje del destructor, habrían dado cuenta a Cartagena del accidente e irían en busca de sus compañeros y de él. El miedo y la angustia fueron sus primeros enemigos contra los que le fue imposible luchar en una noche tan oscura y tenebrosa. Su reloj era también otro enemigo al que miraba cada minuto. El amanecer fue diferente al de cada día en la tierra, ya habían transcurrido doce horas desde su naufragio, le era inverosímil haber permanecido tantas horas en la mar. De repente vio como se le acercaba un punto negro en el cielo. Era un avión.

Capítulo 5

51 a la 59. Agitó la camisa desesperadamente durante varios minutos pero no lo vieron, iba demasiado alto. Luego se fue por el mismo lugar por donde había venido, perdiendo de vista el avión y su esperanza de que fueran a rescatarlo, se desanimó y volvió a lo suyo. Un rato más tarde apareció otro avión, ese si venía en su búsqueda, era un guarda costa. Vio perfecta- mente como un hombre miraba con unos prismáticos, estuvo volando muy bajo y cerca de la balsa pero no lo vieron, pasaron varias veces, él creía que le habían visto, de nuevo la ilusión de que le rescatarían volvió en él. Esperando bastantes horas aún seguía con la esperanza de que lo rescatarían. Eran las cinco de la tarde y fue su primer animal que vio casi treinta horas después de estar en la balsa, era un tiburón, llegaron más y para él fue una experiencia diferente; ya no se sentaría más en la borda después de las cinco, son unos animales muy puntuales. Ya de noche, a las once, comenzó a remar. A las dos de la mañana tuvo una alucinación, vió a uno de sus compañeros más antiguos dentro de la marina, era Jaime Manjarrés. Lo curiosos de esto es que tuvo una charla con él.

Capítulo 6

61 a la 69. La desorientación era total, no sabía si avanzaba hacia adelante o hacia atrás, no tenía muy claro los días que llevaba en la balsa. Se colocó la camisa en los pulmones ya que el instructor les dijo que no expusieran demasiado los pulmones al sol, les perjudicaría. Los tiburones llegaron a las cinco de la tarde, puntuales. Todas las noches cuando iba a dormir veía a

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (11.4 Kb)  
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com