ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Salud Del Suelo


Enviado por   •  17 de Mayo de 2014  •  1.923 Palabras (8 Páginas)  •  324 Visitas

Página 1 de 8

SALUD DEL SUELO

Un suelo saludable es como una persona sana. Cuando éste está bien alimentado puede producir cultivos saludables y abundantes. Un suelo suave y suelto puede retener el agua como una esponja. Esta habilidad de retener el agua permite que las plantas continúen creciendo aunque haya sequías.

En general, un suelo sano es profundo, de color oscuro, suave y húmedo cuando se toca. Además, se deshace fácilmente cuando se toma entre los dedos y al cortarlo se encuentran insectos y lombrices. La coloración oscura y la sensación grasienta se debe a la cantidad de años durante los cuales las plantas han crecido, han muerto y se han descompuesto en el suelo. Las plantas en descomposición no solamente proveen alimento a los insectos y lombrices, sino a otros pequeños seres vivos que muchas veces no se ven. Éstos son los “microorganismos”, o sea animalitos y plantitas muy pequeñas que no los podemos ver a simple vista, que ayudan a proteger las plantas contra las enfermedades y a proveerles nutrientes, así como a descomponer la materia orgánica.

Al igual que una persona, el suelo debe tener acceso los nutrientes (su propio alimento), acceso al agua sin contaminantes y descanso para mantenerse saludable. Debe estar libre de agentes dañinos o sustancias peligrosas. Para nutrirlo, es indispensable regresar los residuos de las plantas o las excretas (estiércol) de los animales al suelo. La materia orgánica que se produce con los residuos de plantas y excrementos, los cuales descompuestos e incorporados al suelo, proveen de alimento a los microorganismos y mantienen el suelo suave y oscuro. Aplicar fertilizantes sin retornar la materia orgánica al suelo, es como tratar de mantener una persona saludable dándole solamente vitaminas, sin proveerle otros alimentos nutritivos.

La importancia de mantener en el suelo un equilibrio químico (cantidad y proporción adecuada de nutrientes), físico (porosidad, capacidad de retención de agua, drenaje, temperatura y respiración) y biológico (todos los organismos visibles y no visibles del suelo), ha sido subestimada por los sistemas de producción convencional y su efecto ha traído como consecuencia suelos pobres y enfermos que no son capaces de sostener un buen rendimiento por sí mismos. La continua labranza para la producción de cultivos debe ser acompañada de medidas protectoras del suelo, evitando así su empobrecimiento o deterioro y, por ende, su capacidad para soportar los cultivos. El buen manejo del suelo permite que éste sea capaz de producir cultivos con buenos rendimientos, no sólo una vez, sino para las siembras futuras.

Al trabajar demasiado el suelo, éste pierde su saludable coloración negra, pues los residuos de las plantas son continuamente removidos durante la cosecha o quemados en la preparación del suelo. La tierra puede empezar a debilitarse o endurecerse si el suelo queda desnudo y expuesto a los golpes de la lluvia, ya que ésta endurece la superficie y lava su contenido. Por otro lado, la aplicación continua de plaguicidas también puede enfermar el suelo, pues éstos pueden matar los insectos, lombrices y microorganismos que ayudan a descomponer la materia orgánica

Principios para desarrollar estrategias sobre el manejo de suelos

Hay algunos principios generales que se deberían considerar como lineamentos básicos para desarrollar estrategias agroecológicas sobre los sistemas de manejo de suelos:

1. Aumentar la cobertura de los suelos

Es el principio más importante en el manejo sostenible de suelos porque conlleva múltiples beneficios:

Reduce la erosión hídrica y eólica

Una cobertura sobre el suelo lo protege de la fuerza de las gotas de lluvia y disminuye la separación de las partículas de los agregados de suelo, que es el primer paso en el proceso de erosión hídrica. Existe evidencia que un 40% de cobertura del suelo reduce las pérdidas de suelo a valores menores de 10% de lo que ocurriría en el mismo suelo desnudo (Figura 1), si bien esto se refiere sólo a la erosión por salpicadura.

Cuando la erosión es causada por una combinación de los procesos erosivos, como erosión por salpicadura y erosión en surcos, es muy probable que se requiera una cobertura más elevada del 40% para reducir las pérdidas de suelo a sólo 10% de lo que ocurriría en el mismo suelo desnudo. Investigaciones en Kenia sobre el efecto de diferentes coberturas orgánicas sobre las pérdidas de suelo con lluvias simuladas que provocaron erosión por surcos y salpicadura, mostraron que se requiere entre 67 y 79% de cobertura para reducir las salpicaduras (Cuadro 2).

Cuadro 2. Cobertura orgánica y pérdidas de suelo en dos lluvias simuladas (Barber y Thomas, 1981)

Tratamiento % cobertura Pérdida de suelo (t/ha)

1a Lluvia 2a Lluvia Promedio

0

1

2

4 0

46

67

79 1,40

0,22

0,12

0,03 6,27

1,70

0,83

0,26 3,84

0,96

0,48

0,15

Promedio 0,44 2,27 1,36

En pendientes muy inclinadas la velocidad de la escorrentía aumentará con la pendiente, y también aumentará la capacidad de transporte de las partículas sueltas por la escorrentía. En esta situación la cobertura que está en contacto con el suelo, es muy importante, más aún que la cobertura aérea; la cobertura de contacto no solamente disipa la energía de las gotas de lluvia, sino que también reduce la velocidad de la escorrentía, y consecuentemente las pérdidas de suelo por un menor transporte de partículas (Paningbatan et al., 1995).

Reduce la pérdida de humedad por evaporación y aumenta la humedad disponible

La combinación de mayor infiltración y menor pérdida de humedad por evaporación resulta en mayor humedad disponible para el cultivo.

Baja la temperatura

La

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (12.9 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com