Tema de los Negocios en Internet: ¿una mina de oro?

Competencias comunicativas y aprendizaje autónomo grupo 3

Autores

Oscar Mauricio Contreras Vega, Christian David Pacheco Rodríguez y David Guerrero Fernández

Negocios en Internet: ¿una mina de oro?

En un mundo tecnológicamente interconectado como es el que en la actualidad vivimos, donde la tecnología se ha vuelto una parte indispensable y esencial de nuestras vidas, cada actividad humana ha visto la necesidad de avanzar hacia nuevas plataformas virtuales para poder continuar existiendo o claramente morir en el intento. Casos como los de Blockbuster, que representaron un hito en el mundo de los negocios muestran como el cambio es indispensable para sobrevivir en el nuevo orden mundial. Como lo indica Wisniewski N., (2011) cuando Netflix le propuso a las directivas de Blockbuster LLC la idea de llevar el negocio al mundo virtual, solo recibieron las burlas y cuestionamientos sobre la iniciativa. Al día de hoy Netflix es considerada por la revista Forbes como la decimotercera (30) compañía más innovadora del mundo (Forbes.com LLC, 2014), aún por encima de Coca-Cola mientras que Blockbuster LLC cayó en bancarrota el 23 de septiembre del 2010. Paradójicamente la idea era la misma, la única diferencia fue el canal de distribución; el éxito de Netflix fue ciertamente en haber analizado el cambio que se estaba presentando y adelantarse a éste. Pero el fenómeno no es solo un caso aislado. Revisando el reporte de las compañías más rentables del año 2014 (Kottasova, 2014), se puede identificar que las más rentables son empresas de tecnología (Apple y Google) pero lo más destacado es que existen empresas en el reporte que operan casi exclusivamente en internet; tal es el caso de Amazon, (puesto 15), E-bay (puesto 28), Facebook (puesto 29) y además de esto han sido catalogadas como las de mayor crecimiento. Existe pues una fe justificada en las empresas virtuales o mejor aún comercializar productos por internet garantiza un margen alto de rentabilidad lo que representaría un negocio estable y con pocas probabilidades de fracaso. El reporte anteriormente revisado podría indicarnos una respuesta afirmativa. Sin embargo no siempre todo lo que brilla es oro.

Es necesario contextualizar la afirmación bajo tres aspectos importantes: histórico, geográfico y cultural. Sobre los tres conceptos se puede indicar que ciertamente en la actualidad existe una mayor estabilidad y credibilidad en la industria a los negocios virtuales como lo indican las cifras presentadas y a estar internet exento de fronteras geográficas habría solo que analizar el componente cultural. Analicemos el caso puntual de la realidad colombiana. Según los datos presentados por la revista Semana (PUBLICACIONES SEMANA S.A., 2014) el crecimiento del comercio electrónico en Colombia en el 2013 fue de 40% con relación al del 2012 y se espera que el crecimiento siga en aumento exponencialmente en el 2014. Claramente existe una fe en las tiendas en línea que ha provocado que las personas de edades entre 25 y 45 años se hayan volcado a realizar la mayoría de sus compras por internet. Pero antes de sacar conclusiones es preciso tener en consideración casos como el de Webvan ^[1]cuyo fracaso en el 2001 al montar la tienda de abarrotes en línea más grande en Web implicó una pérdida de 1000 millones de dólares (Laudon & Traver, 2014). Sin embargo cuatro años después como lo indica Laudon y Traver (2014) con una idea similar llevada a cabo por FreshDirect ^[2]en el 2005, la empresa pudo obtener ganancias por $3.3 millones de dólares y una expectativa de crecimiento al 2008 de casi el 50%. La diferencia entre las dos empresas, se podría pensar que fue el momento en que fueron concebidas pero la realidad es que el éxito de FreshDirect  fue por la infraestructura y la distribución que fueron lo que los diferenciaron de Webvan. Existe como en el caso de FreshDirect y Netflix muchos otros ejemplos que nos pueden empezar a mostrar un patrón claro en el comercio por internet. No por ser virtual un negocio está exento al fracaso o para debatir la tesis no por ser virtual el éxito está garantizado, lo importante no es la plataforma, es la idea y el modelo del negocio, si no existe una buena idea, la empresa está destinada al fracaso y una buena idea si un modelo robusto que la soporte sufrirá el mismo destino. El modelo de negocio sugerido por Laudon y Traver (2014) consta de ocho (8) aspectos que deben ser tenidos en cuenta: proposición del valor, modelo de ingresos, oportunidad del mercado, entorno competitivo, ventaja competitiva, estrategia del mercado, desarrollo organizacional, equipo administrativo. Analizando cada uno de los anteriores aspectos, se puede ver que no son propios del modelo virtual, estos aplican también para la organización física así que una tienda virtual tiene las mismas posibilidades de fracasar que una tienda física. Sobre la anterior afirmación me gustaría comentar un caso ampliamente conocido por mi experiencia, el caso Alkosto virtual. La tienda virtual de Alkosto surgió aproximadamente en el año 2010 como un experimento interno para explorar nuevos canales de venta al que las directivas apostaron con mayor fuerza a partir del 2012 cuando se creó formalmente el Ciclo de Comercio Electrónico y cuando se adquirió la plataforma Magento^[3] para soportar la operación. Para noviembre del 2012 la meta de ventas para este canal era de 500 millones de pesos; una meta ambiciosa para un canal nuevo, pero que se pudo cumplir a cabalidad. Aunque las directivas de la organización celebraron el logro, lo que no supieron fueron los problemas que se presentaron durante el mes de noviembre, en especial el conocido “Black Friday” que sería el día de mayores ventas para el mundo virtual. La plataforma fue inaccesible durante todo el día, solo funcionó durante unas pocas horas en la tarde, se presentaron problemas en la toma de pedidos y la conexión con el sistema POS fue muchas veces intermitente, lo que generó muchos pedidos perdidos y la pérdida de credibilidad de la marca frente al cliente. El problema anteriormente presentado fue recurrente y sin embargo se llegaron a cumplir las metas establecidas, lo que indica que al parecer existe un riesgo menor que una empresa virtual fracase. Otro ejemplo que sustenta esta tesis sería el caso de Facebook, que al ingresar la acción a la bolsa de valores se desplomó pasando de 42 dólares la acción en su estreno a menos de 31 dólares en cinco (5) días y ahora, solo dos años después del suceso, la vemos como la decimonovena (29) más lucrativa del mundo. En síntesis se puede asegurar que existe una masificación y crecimiento tecnológico que es aprovechado por la industria en sus nuevos aspectos virtuales y que se encuentra soportados sobre plataformas cada vez más robustas. 

...