Un Arte Urbano para la revolución

Un Arte Urbano para la revolución

Las calles de la ciudad de Caracas, epicentro del acontecer  político venezolano, se han convertido en un espacio donde cada vez más los artistas se atreven a mezclar su arte con un mensaje político.  La creciente politización en la sociedad ha llevado a permitir el desarrollo de  estas nuevas formas de  expresión que reflejan las diferentes posturas ideológicas y movimientos sociales en las paredes de la ciudad.  Esta tendencia ha crecido y desarrollado diferentes formas en los últimos años y en la actualidad el arte urbano ligado a la política ha tomado una fuerza destacable. Especialmente en tiempos de campaña o convulsión social, las calles se llenan de propaganda política creativa. Un ejemplo de esto son los esténcils de las figuras más significativas de la política venezolana que representan al oficialismo y a la oposición.  También lo son los grandes murales reivindicando la revolución bolivariana y a sus personajes más importantes.  

El arte urbano ha tomado un papel relevante desde que se lo ha reivindicado como movimiento cultural. Desde tanto el ministerio de cultura y otros ámbitos gubernamentales se ha promovido el crecimiento de los colectivos artísticos, integrados mayormente por jóvenes artistas. Estos engloban no solo artistas plásticos, sino también aquellos provenientes del ambiente de la música, teatro y otras áreas que utilizan el arte como forma de concientización social. Además de apoyar la revolución, estos grupos buscan insertar a los jóvenes en actividades culturales en las cuales puedan tener una identidad y reconocimiento por fuera de los circuitos de violencia que por lo general suelen absorberlos a muy temprana edad.  A su vez, es el arte callejero quién ha tomado el rol de recuperador de espacios públicos y la memoria histórica, decorando diferentes lugares con importantes personajes de la tradición venezolana. Un ejemplo de esto han sido los homenajes espontáneos al líder de la revolución, Hugo Chávez, luego de su muerte.

Un caso representativo  importante de mencionar es el movimiento Otro Beta, que engloba jóvenes  creadores de zonas populares, entre los cuales se encuentras diseñadores, patineteros, raperos, graffiteros, djs, y otros artistas que promueven su postura de que el arte urbano y comunitario son una forma de combatir la realidad de violencia en las zonas más carenciadas. Este colectivo ha tenido reconocimiento a nivel nacional y se han dado a la popularidad por propagar imágenes de Chavez como dj, patinando, andando en moto, entre otras. Estas ilustraciones representan la identificación de estos grupos con la revolución bolivariana.

 El arte urbano busca un impacto directo en la opinión pública, ya que su capacidad visual y su carácter público  hacen que el mensaje penetre en diferentes grupos sociales que transitan por las calles de la ciudad. Es una forma de comunicación alternativa, que sale de los circuitos de los grandes medios de comunicación, que muchas veces sirven como instrumentos de censura de las expresiones sociales o representan las voces de los grandes poderes.  A través de las imágenes se genera una significación política que puede denigrar a líderes políticos y  posturas ideológicas, estas se convierten en representaciones de la realidad social. Al encontrarse en las calles, sus mensajes son autónomos y libres, convirtiéndose en formas de expresión políticas auténticas.

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