Una llamada Perdida

Una llamada Perdida Capitulo 1.

Era de noche, estaba sola en mi casa, hacia frio, estaba terminando mi informe para la universidad sobre la desaparición de las personas, en mi opinión me parecía que ese no era un tema adecuado para mi carrera, pero no tenía nada más que hacer, así que lo termine. En el momento en el que lo acabe, sonó mi celular, pero me pareció algo extraño, porque es no era mi timbre de teléfono, y al revisar, tenía una llamada perdida, no decía quien era ni cuál era su número, no sabía qué hacer en ese momento. Me fui a mi cuarto, necesitaba descansar, pero de nuevo sonó el celular, re vise y al igual que la anterior vez, no decía quien era, me asuste, es ese momento de repente sonó el timbre, baje, era Emma, una amiga, la hice pasar, se le notaba algo asustada, estaba pálida, de inmediato le pregunte que sucedía, ella me dijo que también, al igual que yo recibió dos llamadas sin identificación, Emma entro al baño y de nuevo sonó mi celular y al mismo tiempo el de Emma, cuando revise el teléfono de Emma y antes de que yo alcanzara a ver su teléfono, se oyó un grito proveniente del baña, era Emma, inmediatamente subí a buscarla, a llegar al baño.. ella, ella se encontraba más feliz que nunca y se estaba maquillando, le pregunte que porque había gritado no me respondió, le pregunte de nuevo pero no dio resultado, tomo su bolsa, se despidió y se fue, unos minutos más tarde sonó de nuevo el celular, pero me di cuenta de que no era el mío, era el de Emma, de todas formas conteste, y fu muy raro, la voz que se oía era la mía en el momento que oí a Emma gritar cuando el pregunte que sucedía, todo era tan extraños ahora, ya no sabía que era mentira y que era verdad, apague los celulares y me fui a dormir.

En la mañana al amanecer desperté, abrí mis ojos y no estaba en mi cama, estaba en el de Emma, sudaba demasiado, luego vi entran a un joven con una navaja, se dirigía a mí, cuando estábamos a un centímetro de distancia pronto me di cuenta de que todo era una simple pesadilla. Eran las 10:00am, debía alistarme rápidamente para ir a la universidad, arrégleme mi cuarto, tome mi desayuno y tome un baño, pero sonó el celular de Emma, era un mensaje:

“Hola Shannon, solo quería pedirte un favor ¿me podrías llevar mi teléfono? Gracias, te espero”

Me alisté, y fui rápidamente a la Universidad, busque a Emma y le devolví su teléfono. Estaba buscando a mi novio Edward pero él me encontró primero, le conté lo que me había sucedido la anterior noche y me dijo que esta noche el me acompañaría. Pasaban las horas y yo seguía recibiendo esas extrañas llamadas, así que opte por cambiar de teléfono. En la tarde Emma me llamo y muy asustada me dijo que Edward se encontraba mal, se encontraba en una acera cerca a la universidad, fue velozmente en busca de él, al llegar, lo halle tirado en el piso con los ojos completamente abiertos, no tenia pulso, había muerto, en su mano tenía su teléfono, me estaba llamando, en ese momento regrese prontamente a mi casa.

No sabía qué era lo que sucedía, porque esas llamadas, ¿Por qué a mí? debía haber alguien detrás de todo esto, pero como podía saber quién era, he ahí el problema. Fui a buscar a Emma, necesitaba hablar urgentemente con ella, iba a investigar por mi propia cuenta quien me estaba habiendo esto y porque.

Cuando llegue a su casa su madre mu ofreció una taza de café, subí el cuarto de Emma y le conté todo lo que había sucedido estos dos días, ella lucia algo extraño, no sabía que decirme pero me contesto que a lo mejor era que yo me sentía muy ansiosa, trate de confiar en ella y me dirigí a m casa a dormir un poco más, pero al parecer todo lo que sucedía era realidad y no como Emma decía ansias, mi teléfono sonó de nuevo, pero yo no conteste y opte por seguir durmiendo. Más tarde me desperté por un vaso de agua y por curiosidad revise mi teléfono, tenía un mensaje de voz de Emma así que lo oí:

“Hola Shannon, espero que estés disfrutando de mi juego, veraz, todo lo tengo perfectamente calculado, yo te vigilo aunque tú no me veas, se que quizá no entiendas este mensaje, pero lo único que yo quiero es jugar contigo, porque en este momento la vida de los demás depende de las tuya. ¡Buena suerte!”

Después de oír este mensaje, sabía perfectamente que esa no era lo voz de Emma, la voz del mensaje se oía algo cortada, no entendí muy bien lo que decía, entonces tome la opción de traducir lo que el mensaje decía, fui a dormir para al día siguiente tomarte todo el tiempo posible para traducir este mensaje y poder entenderé el mensaje. Amaneció, me duche y me puse en el trabajo de traducir aquel mensaje, fui por mi teléfono pero no lo encontraba, busque por todas parte y no estaba, era como si supieran lo que hago y donde estoy, esa persona no me quería ver feliz y lo logro.

Estaba en el sillón pensando acerca de todo lo que estaba sucediendo y preciso en ese momento sonó mi teléfono, estaba en la entrada de la casa, era la misma persona, me decidí y conteste, no dijo nada, me colgaron, era extraño, al parecer esa persona me estaba dando pistas para algo, frente al teléfono me dejaron un sobre con un teléfono nuevo, no sabía qué hacer con este, estaba muy confundida, no era fácil para mí afrontar esto. Estaba nerviosa, salí a tomar un poco de aire pero era como si los teléfonos me estuviesen persiguiendo, me senté en el prado pensando que iba a hacer, a la primera persona que tendría que cuestionar seria Emma, porque si la llamada provenía de su celular ella tenía que ser una cómplice, me quede unos minutos más afuera y luego fui a la casa de Emma.

Al llegar su madre me dijo que ella había salido a verme a mí, eso fue aun más extraño, de tal forma que debía ir de nuevo a mi casa, y cuando llegué a mi casa no paraban de suceder cosas extrañas, Emma se encontraba ya dentro de la casa, entre y le pregunte como había entrado a mi casa y ella respondió que porque estaba abierto, pero yo sé muy bien que jamás dejaría la puerta abierta. Últimamente Emma había sido todo un misterio, su llamada, su forma de expresarse conmigo, el haber estado dentro de mi casa, debía hacerle un gran interrogatorio porque no iba a dejar me jugara broma de esta tamaño.

De todas las preguntas que le hice ella me dijo que no sabía nada, y además lo dijo con toda sinceridad, me dejo completamente atontada, no sabía que decir, no sabía si lo que me decía era verdad o mentira. Ya no tenía más opción que esperar a que esa persona me diera todas las pistas para terminar el juego. Me fui decepcionada y sin nada que hacer a mi cuarto, trate de alejarme de todos los teléfonos y espere a que llegara la siguiente pista, fui a mi cuarto, espere dos… tres… cinco horas hasta que por fin sonó de nuevo el teléfono que me habían dado, al bajar decía: ‘1 llamada perdida de Shannon’, esto se volvía cada vez peor pero debía saber afrontarlo, ya quería acabar con esto; cuando entre a mi cuarto encontré sobre mi cama otro sobre, lo abrí y lo leí:

“Querida, querida Shannon, veo que ya no tomas en serio este juego y que lo único que quieres saber es quién soy yo, pero debes saber que esto no es así, este juego ya tiene unas reglas y tu no las estas cumpliendo, así que yo jugare este juego a mi manera. ¡Buena Suerte!”

Después de leer esto quede peor, como que no estaba siguiendo las reglas, entonces cuales eran las reglas, yo no sabía nada de eso, y ahora sí, ya estaba mucho más difícil salir de este lio. Estaba muy estresada, tenía muchas cosas en que pensar y n podía pensar en todo a la vez, primero debía tranquilarme y tratar de adivinar cuales eran esas reglas que yo no estaba cumpliendo para luego aplicarlas, tena que hacer lo posible para que esa persona viera que yo estaba interesada en el juego. Luego me puse a pensar y caí en cuenta que la única persona que me decía ese ‘¡Buena Suerte!’ al final de todas sus oraciones era Edward, pero... el no podía ser porque el ya estaba muerto, tendría que ser otra persona, alguien que está tratando de imitar a mis amigos.

Ya era de noche, me iba a dormir, pero antes, no falto el teléfono, era un mensaje:

“Así que ya tienes sospechosos, creo que te interesa demasiado saber quién soy yo ¿verdad? Pues tristemente no lo podrás saber porque este juego ya acabó, no seguiste las reglas, el juego se acaba, así de simple… ¡Buena Suerte!”

Un mensaje más, debía procesar todas mis ideas mientras dormía para mañana estar preparada para un nuevo día. Al día siguiente desperté tranquilamente, lo pensé muy bien y tome una decisión, al no saber qué podía hacer, lo mejor fue escribirle una carta a esa persona:

“Hola, quien quiera que seas, no sé si te interese leer esto, pero quiero continuar con el juego, quiero que sepas que yo no conozco, no sé que es este juego, ¿Qué quieres de mi? ¿Qué pasa con todas esas llamadas perdidas?, por favor, solo entiéndeme, debo continuar jugando”

Sabía que si enviaba la carta, esa persona me dejaría jugar de nuevo, deje la carta en un sobre en la entrada de mi casa y me fui a la cocina a prepararme algo, unos minutos después, sonó el teléfono, esta vez decía ‘1 llamada perdida de Edward’. Esto se ponía cada vez más difícil de resolver, la puerta se encontraba abierta, así que supuse que debía seguir en busca de alguna otra pista, y si, estaba en lo correcto, había otro sobre justo en la salida de la casa, lo tome y entre de nuevo a la casa, lo abrí y leí lo que decía:

“Shannon, veo que tienes

...