COMEDORES POPULARES PERUANO

COMEDORES POPULARES

Sólo en Lima los comedores populares proporcionan alimentación diaria a medio millón de personas. Más de cien mil mujeres trabajan todos los días para dar de comer a sus hijos, y lo hacen de forma colectiva, buscando el apoyo mutuo para superar la pobreza. Con la pendiente el arenal se convierte en duna gris; como el cielo eternamente gris de Lima. Dejamos el centro de Villa El Salvador, la periferia pobre mejor organizada de Lima, para acercarnos a Lomo de Corvina, periferia de la periferia, donde hace 13 años se instalaron cientos de familias en un barrio que por alguna misteriosa razón denominaron Oasis.

En medio del inhóspito desierto se levantan cientos de casuchas de esteras coronadas por banderitas peruanas, que es la forma como los más pobres intentan disuadir la acción policial cuando ocupan terrenos de forma ilegal.

El comedor es una pequeña habitación con suelo de cemento, una mesada, una cocina de gas y otra de carbón. Al costado, un minúsculo salón donde guardan la comida y un fondo sin plantas, suelo marrón bajo cielo gris. “así es un comedor popular en lima desde hace 20 años”.

Según varios análisis, el comedor comunal o popular es, como organización popular femenina, una experiencia “sin paralelo a nivel latinoamericano y probablemente mundial”. Se trata de la forma elemental de la organización colectiva del más abajo; espacios donde no sólo se soluciona la sobrevivencia sino también “una escuela donde muchas mujeres se han adiestrado en actividades de organización, práctica de democracia, en superar conflictos y en el trato con instituciones y funcionarios”.

Los primeros comedores nacieron a fines de la década de 1970. Era un período de grandes movilizaciones sociales cuando finalizaba el régimen militar (1968-1980). El sindicato de maestros (SUTEP) presionaba por mejores salariales entre 1978 y 1979 y los maestros tomaron colegios en los barrios populares. Las mujeres comenzaron a preparar ollas comunes en solidaridad con los huelguistas: “Durante semanas las escuelas se convirtieron en lugares de discusión política, en espacios de encuentro entre el barrio, la escuela y los conflictos sociales y políticos del momento”.

Con la crisis económica y el primer ajuste estructural, entre 1988 y 1989, los comedores crecieron de forma explosiva: pasaron de 1.800 a 3.000. Con el brutal ajuste económico de Alberto Fujimori (1991) superaron los 5.000. Los barrios se llenaron de ollas populares improvisadas y la demanda de alimentos en los comedores fue el doble que el año anterior. Con los años, y pese a una notoria mejoría en la situación económica del país, el número de comedores siguió en la cifra alcanzada en el pico de la pobreza. Una encuesta realizada en 2003 revela que en Lima Metropolitana siguen existiendo unos 5.000 comedores con una 150 mil socias.

Los comedores alimentan alrededor del 7% de la población de Lima, estimada en unos 7,5 millones. Pero ese medio millón de platos que reparten diariamente supone casi el 20% de la población en situación de pobreza extrema.

EL FINANCIAMIENTO público, basados en recursos provenientes de impuestos o prestamos de organismos multilaterales que obtiene el estado y destina para el funcionamiento de comedores populares, y el financiamiento privado a cargo de la comunidad: las integrantes de la organizaciones sociales de base y los beneficiarios que consumen los menús del comedor popular, este financiamiento proviene entonces de:

a) Los aportes vía pago del bolsillo, pago del menú que realizan los consumidores por el menú.

b) Aportes que realizan en el trabajo las socias de las organizaciones sociales de base.

c) Aportes a través de actividades que hacen las socias para cubrir los gastos de los “casos sociales”.

MODELO DE FINANCIAMIENTO

Durante los últimos años el Perú ha experimentado uno de los periodos de crecimiento económico más sostenido nunca antes visto. Por tanto, el gobierno ha disfrutado de recursos públicos (gasto social) para poder apoyar a los más pobres. Según nuestros estimados, anualmente S/.267 millones se han asignado óptimamente debido a la inexistencia de una gerencia social de calidad.

EVOLUCION DE LA DESNUTRICION CRONICA INFANTIL EN EL PERU

(1975 – 2012)

Costos de oportunidad

• En el caso de los Comedores populares, el costo de la filtración sería de alrededor de S/.24.209.290,46.

• Los fondos anteriores sólo servirían para atender a un 2,15% de los 13,8 millones de subcoberturados.

Beneficios potenciales

• Para el programa de Comedores populares podría ampliarse la cobertura a 297.858 personas adicionales.

• Incrementar el mercado para los productos de cultivos andinos.

Comedores Populares

En el año 2011, las municipalidades registraron 17 842 comedores populares, estos beneficiaron a un total de 1 millón 172 mil 120 personas.

Los departamentos en los que se observa mayor número de Comedores Populares son: Lima con 4 468 comedores y 358 282 beneficiarios, Piura con 1 476 comedores y 82 916 beneficiarios, Cajamarca con 1 076 comedores y 61 302 beneficiarios, Ancash con 1 014 comedores y 67 276 beneficiarios y Ayacucho con 987 comedores y 59 501 beneficiarios.

En Lima Metropolitana se concentran 3 946 comedores que atiende a 332 637.

Es importante resaltar que entre el periodo 2005 y 2008 a nivel nacional, el número de Comedores Populares se incrementó en 23,3% y el número de beneficiarios se incrementó en 30,8%. Por otro lado, en Lima Metropolitana, el número de comedores disminuyó en 9,0% y el número de beneficiarios en 6,4%

REQUISITOS PARA APERTURA DE COMEDORES POPULARES

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