Discriminacion racial

Introducción

La discriminación es un problema mundial que está enraizada en nuestra sociedad, vulnera la integridad de la persona y la paz social. Nuestro país no es ajeno a este fenómeno transnacional. En este año se registró un nuevo caso de marginación, donde una mujer afroperuana fue víctima de racismo por parte de las autoridades en una tienda “Tai Loy”. Con lo que conllevo a que la mujer agredida haga una denuncia tras este caso. Este caso generó la indignación de muchas personas que se manifestaron por redes sociales, mediante “Twitter” surgió el hashtag: #TaiLoyRacista. Esta mencionada empresa respondió a este agravio a través de un comunicado sin trasfondo que no asume culpa, afirmando que fueron sus protocolos de seguridad, y mostrando incapacidad de sustentar la defensa. Así logrando un rechazo por parte de la ciudadanía peruana a este tipo de ofensas y que la ciudadana sea apoyada por las personas y las entidades correspondientes. Debido a esto surge la siguiente controversia: ¿Es un problema grave el racismo en el Perú? Nuestra postura es que, estamos en contra de todo acto que agravie y discrimine a las personas por su raza, etnia y pigmentación de piel ya sea por parte de autoridades y ciudadanos. Los temas que hemos decidido tocar para este caso serán: El concepto de ciudadanía, la interculturalidad, la sociedad en el Perú y el estado de derecho. A continuación, presentaremos argumentos que sustentarán con solidez la postura mencionada.

Argumentos.

En primer lugar, El Perú en la actualidad sigue viviendo distintos casos de racismo y exclusión social, esto es algo inaudito ya que en pleno siglo XXI esto ya no debería existir ya que sabemos que en nuestro país tiene una inmensa diversidad cultural, y la sociedad debe conocer estás culturas.

[….]La sociedad alberga una profunda y compleja diversidad cultural, el Estado debe reconocerla y en perspectiva convertirse en intercultural y las ciudadanas y ciudadanos interculturales son quienes deben sostenerlo. La interculturalidad es, pues, una práctica de respeto y valoración de nuestras diferencias. Esto refleja que de forma espontánea no tendemos al conocimiento por el diferente. El Estado intercultural debe promover la práctica intercultural en sus ciudadanas y ciudadanos e incluir de manera especial a los servidores públicos. Finalmente, la diversidad cultural debe ser vista —desde una perspectiva intercultural— como una oportunidad de desarrollo en tanto disponemos de un acervo importante de creencias, imaginarios, saberes, prácticas y formas de afrontar los retos de la vida cotidiana. (Ministerio de Cultura, 2014)

Entonces, podemos afirmar que el estado es el responsable de promover la enseñanza y dar a conocer la diversidad de cultura que existe en el Perú para

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