Eje Social

Eje Social

Frecia N. Rodríguez

Trabajo Social, Universidad Técnica “Luis Vargas Torres” de Esmeraldas

5 “b”

Lic. Ximena Castillo

24 de abril del 2024

Tema: Eje social

Introducción:

En Ecuador, como en muchos otros países, los ciudadanos se enfrentan a una serie de desafíos que afectan su calidad de vida y bienestar. Desde la pobreza hasta la inseguridad, pasando por la falta de acceso a servicios básicos como salud y educación, estas problemáticas han sido identificadas por la ciudadanía como urgentes de abordar. En la intersección entre las demandas ciudadanas y las políticas públicas se forja el destino de una nación. La voz del pueblo, como eje fundamental de la democracia, debe ser escuchada y atendida para construir sociedades más justas y equitativas. En este ensayo, exploraremos las principales preocupaciones expresadas por los ciudadanos ecuatorianos, así como las soluciones propuestas para enfrentarlas, destacando la importancia de la participación ciudadana y el compromiso del Estado en la búsqueda de soluciones efectivas para el desarrollo sostenible en el país.

Desarrollo:

La voz del pueblo ecuatoriano resuena con claridad a través de las diversas problemáticas identificadas en ámbitos concluyentes como la garantía de derechos, la salud, la educación, el desarrollo urbano y la seguridad ciudadana. La creciente pobreza, la falta de acceso a servicios básicos y la inequidad en la distribución de recursos son algunos de los desafíos más urgentes que enfrentan. A pesar de que la Carta Magna reconoce los derechos, muchos ciudadanos sienten que el Estado no está cumpliendo con su deber de garantizar una vida digna para todos, especialmente para aquellos en situación de pobreza y los grupos de atención prioritaria.

En materia de garantía de derechos, los ciudadanos demandan un mayor compromiso del Estado para combatir la pobreza y garantizar el acceso equitativo a servicios esenciales como salud, vivienda y educación. La falta de inversión pública y la deficiencia en la infraestructura sanitaria afectan especialmente a los grupos más vulnerables, exacerbando la desigualdad y la exclusión social.

En el ámbito de la salud, la falta de inversión pública se traduce en una infraestructura deficiente, escasez de personal médico e insumos, y falta de programas de salud mental. Esto se refleja en el aumento de enfermedades psiquiátricas, como la depresión y la ansiedad, así como en el preocupante aumento de los casos de suicidio. Además, la desigualdad en el acceso a la atención médica es evidente, especialmente entre zonas rurales y urbanas y son temas prioritarios que requieren acciones inmediatas por parte del Estado.

La insuficiente inversión pública en salud ha dejado a muchas comunidades ecuatorianas con una infraestructura sanitaria precaria y una falta alarmante de recursos humanos y materiales. Esta situación, como señala el economista Amartya Sen, "no solo afecta el bienestar individual, sino que también socava el desarrollo económico y social de todo el país". Para abordar este desafío, es crucial que el Estado priorice la salud como un derecho fundamental y destine recursos adecuados para garantizar una atención equitativa y de calidad para todos los ciudadanos.

En cuanto a la educación, la ciudadanía enfatiza la necesidad de garantizar el acceso universal a todos los niveles educativos, así como de mejorar la calidad y pertinencia de la oferta académica. La falta de cupos, becas y recursos tecnológicos limita las oportunidades de desarrollo de los jóvenes, perpetuando el ciclo de desigualdad y marginación, aumentando el desempleo y la migración hacia otros países en busca de mejores oportunidades. La falta de conectividad y tecnología en los centros educativos también constituye un obstáculo para el acceso a una educación de calidad.

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