La Fragilidad En El Adulto Mayor

LA FRAGILIDAD Y EL EJERCICIO EN EL ADULTO MAYOR

Un anciano frágil se puede definir como una persona que tiene una existencia de un progreso lento, en ocasiones casi indetectable de debilidad y que tiene una edad mayor a 65 años, además de esto el anciano frágil se encuentra en un estado individualizado en el que se pueden ver procesos de complejidad y vulnerabilidad que lo hacen mas propenso a presentar deterioros a nivel cognitivo, afectivo y funcional, se encuentra con una reducción de las reservas fisiológicas que le dificultan mantener una correcta homeostasis y estas condiciones son las que lo hacen más indefenso ante procesos de discapacidad; Frente a este proceso es que el grupo interdisciplinario del área de la salud debe luchar con sus intervenciones puesto que lo que se deben proponer es la realización de terapéuticas y actividades que prevengan y eviten este desarrollo para tener al paciente de edad avanzada en una condición de “éxito” entendido como la falta de fragilidad. En este orden de ideas para obtener los resultados mencionados anteriormente es indispensable detectar la fragilidad en el anciano antes de que esta de lugar a discapacidad, y con esto frenar o revertir el proceso.

Los criterios para diagnosticar fragilidad en este tipo de personas se encuentran establecidos de acuerdo a síntomas y signos que pueden indicar el comienzo de este curso en el envejecimiento; entre estos se pueden encontrar los siguientes:

- Pérdida de peso no intencionada de más de 5kg o 5% del peso corporal en un año.

- Debilidad muscular ajustado al sexo e IMC

- Cansancio o baja resistencia a pequeños esfuerzos

- Lentitud de marcha ajustado al sexo y a la altura

- Nivel bajo de actividad física

Sin excluir estos indicadores, también debemos tener en cuenta la parte sociodemográfica y de génesis por la que pasan estos ancianos, en cuanto a la parte sociodemográficas es importante analizar que la mayoría de estos se encuentran en riesgo al interior de grupos sociales de personas de edad avanzada, bajo nivel económico, bajos ingresos, bajo nivel educativo, soledad y ausencia de un cuidador; Hay factores que intervienen en esta fragilidad como la malnutrición, la depresión y las infecciones; En el análisis de la génesis es valioso intervenir para encontrar aspectos de malnutrición, depresión e infecciones.

Pero, ¿Cómo detectamos que un anciano se encuentra en estado de fragilidad?, debido a los avances y estudios realizados a nivel internacional se destaca la importancia de analizar la funcionalidad de la persona, y en esta parte se hace énfasis en estudiar las diferentes actividades que el paciente puede realizar y sus impedimentos para las mismas. Este estudio debe estar encaminado a la proyección como profesionales de la salud de tener pacientes ancianos que puedan realizar sus actividades cotidianas de higiene, baño, movilidad, continencia etc, y con esto disminuir la probabilidad de obtener en un futuro corto discapacidad, generando en él independencia

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