La economía Latinoamericana

Furtado Carlos, “Primera parte.- De la Conquista a la formación de los Estados Nacionales”, La economía latinoamericana, Editorial Universitaria, Chile, 1969, pp. 17-42

La economía latinoamericana

La expresión América Latina fue utilizada para designar el área geográfica a los países del sur del Río Grande. A parte de su gran historia colonial y una misma lengua con sus excepciones; en América Latina predominan elementos étnico-culturales indígenas que son muy similares. La formación de una conciencia latinoamericana es un fenómeno reciente, consecuencia de los nuevos problemas planteados por el desarrollo económico y social de la región. El desarrollo basado en las exportaciones transformará a los países de la región en una economía competitiva que surgiría en el Pacto Colonial y que se afianzará en la primera fase de la Revolución Industrial. Cuando la industrialización basada en la sustitución de importaciones comenzó, esta evidenció las limitaciones de América Latina poniendo a discusión el desarrollo regional versus el mercado internacional e induciendo a una conciencia regional. Desde la primera guerra mundial hasta finalizar la segunda guerra, Estados Unidos obtuvo una penetración manufacturera importante que configuró una rápida denominación económica regional que se institucionalizó en organizaciones panamericanas, esto contribuyó a consolidar el régimen de tutela por parte de los Estados Unidos pero al mismo tiempo sirvió para acrecentar los vínculos latinoamericanos en relación a las condiciones empleadas por los mismos. En resumen América Latina dejó de ser una expresión geográfica para convertirse en una realidad histórica como consecuencia de la industrialización y la dependencia particular que se estableció con Estados Unidos

Características físicas

Dentro de sus características físicas encontramos tres subconjuntos geográficos:

• México septentrional con elementos de relieve de Estados Unidos.

• El ismo americano, que se extiende por mas de 2000 km., estrechándose en su parte sur hasta alcanzar 70 km. de ancho en Panamá.

• El continente sudamericano, cuyo relieve esta dominado por la Cordillera de los Andes, por grandes planicies interiores, por los macizos guayabo y brasileño y por la meseta patagónica. La barrera andina del extremo norte sur del continente sudamericano, resguardando importantes altiplanos, tales como el bosque boliviano de más de 800 km de ancho y las grandes planicies sudamericanas constituidas por las cuencas de Orinoco, del amazonas y del Paraná

El cuadro demográfico

La población latinoamericana supera los 250 millones y representa un 7 por ciento de la población mundial. La primer característica es su elevada tasa de crecimiento y la segunda es su estructura de edades que oscila entre 15 años o menos, en correlación con el resto del mundo.

El rápido crecimiento de la población latinoamericana es un fenómeno reciente, pero en la época de la conquista y la subsecuente colonización de la áreas densamente pobladas condujo a un verdadera hecatombe demográfica, para comprender esto es necesario tener en cuenta que en la época de la conquista los indígenas se concentraban en regiones montañosas basadas en economías artesanales-agrícolas, sumado a esto la implantación de una economía minera por parte de los españoles exigió grandes desplazamientos de población lo que acarreo la desorganización de una gran parte de la producción de alimentos y además desarticuló la unidad familiar en una parte de la población. Adicional a esto las epidemias diezmaron a la población y se redujo aun más.

Para el siglo XVI la decadencia económica minera y su reemplazo por actividades agropecuarias impulsaron el crecimiento demográfico, pues la formación de una agricultura de exportación permitiría ese desarrollo demográfico que prosigue y se intensifica. A diferencia de la América española en Brasil las cosa fueron distintas. La población aborigen era relativamente escasa y los lusitanos promovieron un flujo migratorio de origen africano que vendría a construir la base de mano de obra de la economía de agricultura tropical al nordeste brasileño. El descubrimiento de oro y piedras preciosas a comienzos del siglo XVIII dio lugar a la formación de una corriente migratoria de Portugal hacia Brasil, dicho flujo modificó el cuadro demográfico y étnico de la región.

Acción individual y encomienda

Un rasgo esencial de la estructura social de los países latinoamericanos tiene su origen en la forma que la conquista y sus instituciones se implementaron para crear una base económica capaz de consolidar su poderío en la región.

La formación de un Estado centralista conservaba un régimen feudal en comparación al desarrollo capitalista en otras regiones de Europa. En Portugal el capitalismo comercial estuvo vinculado con la monarquía; así la monarquía portuguesa encontró una vía de desarrollo autónomo dentro de la península.

La debilidad de los pueblos de América conllevo la conquista en simples actos de pillaje, esta acción vendrá a estructurar el nuevo imperio en un interés privado del conquistador. El Estado español comprobó que la mejor forma de resguardar sus intereses era ceder a los conquistadores lo posibilidad de descubrir y someter los nuevos territorios conquistados y sumarlos a la Corona. A través de estas capitulaciones del Estado se transfería al conquistador algunas prerrogativas al mismo tiempo que lo sujetaba a ciertas obligaciones y la recompensa por parte del Estado español tomaría su forma definitiva en la institución de la encomienda.

El encomendero ejercía sobre un grupo las funciones de derecho público y se colocaba socialmente como un señor feudal de la Europa medieval. La organización social de la encomienda demostró ser eficaz y alcanzó ciertos niveles de desarrollo material, y de estratificación social y el objetivo principal era obtener un excedente que pudiese ser transferido a Europa. A diferencia de la América española en Brasil se optó por una colonización y no una conquista de las estructuras sociales.

La encomienda

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