REPERCUSIONES SOCIALES DE LA RECAUDACIÓN DE LOS TRIBUTOS Y DE LA COMERCIALIZACION DEL EXCEDENTE AGRARIO
Enviado por jandrit0 • 7 de Diciembre de 2015 • Apuntes • 1.401 Palabras (6 Páginas) • 148 Visitas
2.4 REPERCUSIONES SOCIALES DE LA RECAUDACIÓN DE LOS TRIBUTOS Y DE LA COMERCIALIZACION DEL EXCEDENTE AGRARIO.
La economía romana no era compatible con el capitalismo comercial europeo de la edad moderna sino que mostraba una mayor similitud con los impuestos tributarios asiáticos de los siglos XVI-XVIII.
En estos las actividades productivas dependían de la apropiación por el Estado del excedente agrario producidas en los territorios dominados.
El origen del excedente agrario comercializado procedía de los tributos satisfechos por las poblaciones conquistadas. El tamaño de este excedente dependía de la fertilidad del suelo, nivel tecnológico y del tamaño de la población (Siendo este el más decisivo ya que el enorme volumen del excedente se debía a los inmensos territorios conquistados por el imperio).
Hay que destacar que fue muy importante la eficiencia de los mecanismos políticos, fiscales y administrativos utilizados para la extracción y distribución del excedente agrario por el imperio romano.
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El imperio romano carecía de una integración política y administrativa, no implantó sus instituciones en las provincias sometidas militarmente y las obligo a pagar tributos.
Con el fin de controlar las poblaciones de territorios tan amplios, Roma se limito a obligarlos a pagar tributos permitiéndoles que mantuvieran sus instituciones de autogobierno.
El estado romano se financiaba con los recursos de la Hacienda (La Hacienda se confundía con las propiedades del emperador, que eran inmensas en tierras y minas cuyos ingresos se completaban con los tributos).
Los ingresos procedían de las tierras y minas públicas además de los tributos recaudados y los gastos de la Hacienda se dirigían principalmente a financiar una amplia casa imperial, una reducida burocracia y un numeroso ejército, así como a realizar transferencias a los ciudadanos romanos a través de las donaciones.
En cuanto a la administración territorial del imperio constaba de dos estructuras jerárquicas separadas: Por un lado el gobernador, de cada provincia tenía el mando militar y la responsabilidad de mantener el orden público, por otro lado la recaudación de impuestos era realizada por cargos administrativos nombrados por el tesoro que dependían directamente de Roma.
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2.4.1 RECAUDACIÓN DE IMPUESTOS Y LOS PRÉSTAMOS POR LA NOBLEZA.
LA RIQUEZA ACUMULADA DEPENDIA DEL PODER POLITICO Y MILITAR DE LOS NOBLES.
La riqueza de las elites romanas dependía de su proximidad al poder político en Roma y de los cargos ejercidos en la metrópoli y las provincias, de los que se sirvieron para incrementar sus ingresos, utilizando dos procedimientos: los prestamos y la recaudación de impuestos.
En Roma la actividad política era imprescindible para acumular riqueza, pero era costosa y arriesgada.
Los emperadores recurrían al asesinato y a la proscripción de los senadores y caballeros que se consideraban enemigos para confiscarles sus propiedades y redistribuirlas entre los nobles fieles.
El enriquecimiento de las dinastías de los emperadores procedía también de las donaciones voluntarias de los nobles. Las riquezas de los nobles dependían de su acceso a los recursos del Estado romano, controlados durante la republica por los cónsules y desde el principado por el emperador.
El poder político creó las grandes propiedades de la nobleza romana pero también las destruyo. Los nobles y generales romanos más poderosos adquirieron en las diferentes provincias propiedades enormes, mucho más extensas que las que tenían en Italia.
Los préstamos y los embargos de tierras por la nobleza.
La alta nobleza se enriqueció actuando como prestamista en las provincias donde gobernó, sacando partido de sus prerrogativas públicas. Estos créditos fueron utilizados por la nobleza para hacerse con amplias propiedades en las provincias.
Los senadores con cargos en las provincias pactaban con los magistrados la concesión de créditos con altos tipos de interés a las ciudades para que estas pudieran pagar tributos imperiales.
El sistema judicial favorecería a los poderosos porque en los juicios se ponderaba la posición legal, las relaciones políticas y la influencia social de los litigantes.
La recaudación de impuestos como mecanismo de poder de la nobleza.
Para satisfacer el tributo, las ciudades recurrían al crédito concedido forzosamente por los senadores que ocupaban los cargos provinciales. Esos créditos se devolvían con los pagos de los contribuyentes según las sumas que les hubiesen correspondido en el reparto del tributo.
Si los prestatarios no pudieran devolver el préstamo los nobles romanos se aprovechaban para embargar sus propiedades, de tal manera que el control de los impuestos y la concesión de préstamos fueron dos instrumentos que permitieron la adquisición de riqueza por parte de la nobleza senatorial y local incumpliendo las leyes romanas.
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