Vecinos Distantes

VECINOS DISTANTES

“La corrupción”, la corrupción es un tema tan amplio y tan pronunciado en la actualidad en México que hasta nos estamos acostumbrando a vivir con ella. Hoy en día la mayoría de la personas sabemos o hemos vivido algún acto de corrupción, y tenemos la idea de que el principal culpable es el gobierno junto con los políticos que forman parte de él. Pero no solo debemos centrar la atención en el gobierno, sin querer buscar sus raíces más profundas en la sociedad misma.

Todos creen saber sobre la corrupción incluso desde sus orígenes pero si nos ponemos a escuchar existen muchas, muchas hipótesis de la famosa corrupción algunos mexicanos dicen que la corrupción inicio en épocas prehispánicas destacando que el emperador Moctezuma trato de comprar con oro al dios Quetzalcóatl (cuando lo confundió por Cortes). Los nacionalistas insisten que la corrupción fue traída de España señalando que los conquistadores veían en México un botín a saquear. Los marxistas por otro lado le echan la culpa al modelo capitalista impuesto por Alemán, mientras que los empresarios se defienden sosteniendo que la falta de honradez fue estimulada por los excesos populistas de Echeverría y Portillo.

En conclusión a todo esto es que nuestro grandioso sistema nunca ha vivido sin corrupción y se desintegraría, o cambiaria tanto que resultaría imposible de reconocerlo, en caso de tratar de eliminarla. Pero no crean que no se ha intentado quitar a la corrupción del gobierno ya que se han adoptado leyes rígidas, pero han sido promulgadas en un entorno donde no se podrían aplicar, mas sin embargo tal parece que la permanencia de la corrupción se podría medir de acuerdo con la frecuencia de las “promesas políticas” para manejarla; -Calles “moralización”- Camacho “Fortalezcamos la moral pública”- Alemán “la moralización publica será la base del gobierno”- Echeverría “La presidencia de la república no es un botín”, claro que durante su sexenio la corrupción floreció y el país se amargo por la devaluación monetaria - Portillo “la corrupción es un cáncer devorando nuestra sociedad”; no hay que olvidar que de hecho fue en el gobierno de Portillo donde se dio el mayor símbolo de la corrupción: el grande Arturo Durazo Moreno, quien fue el jefe de la policía convirtiéndola en un imperio de negocios turbios, etc.

Muchos mexicanos consideran que los mismos funcionarios son una “bola de rateros” pero ¿qué eso ya no lo sabíamos? Lo que verdaderamente interesa es la repuesta a la famosa queja “Sabemos que los funcionarios roban, pero ¿por qué tanto?”; bueno, la respuesta a esto es que cuando estas en el poder intentas llevarte todo lo que puedas para cuando ya no lo estés.

El nepotismo, naturalmente, prospera en este ambiente: los funcionarios escogen a los miembros de su numerosa familia por ser las únicas personas en quienes pueden confiar, y los parientes menos afortunados esperan que un primo colocado se acuerde de ellos. Según el dicho, toda familia rica tiene un ladrón en su pasado.

Un acto de nepotismo claro fue el elaborado por López Portillo durante su mandato, quien parecía que estaba asegurando a toda su familia por varias generaciones ya que nombro a su hijo subsecretario de Programación y Presupuesto, también de dio un cargo a su amante, a sus hermanas, a sus primos, a su esposa y casi casi al amigo del primo del vecino.

En cierto sentido el hecho de que la corrupción siga favoreciendo en cientos de formas en diferentes puntos de la sociedad confirma que el problema es cultural, no moral.

Por otro lado no hay que confundirse, la corrupción no solo se hace en los aspectos grandes de México con las empresas o los funcionarios del gobierno, no, la corrupción nos ataca día a día en nuestra vida cotidiana; la forma más visible de corrupción es la famosísima “mordida” que es cuando un agente de tránsito extrae un soborno en lugar de una multa, Pero también hay otros ejemplos, como el sistema jurídico que es lento y los burócratas y jueces están mal remunerados, los sobornos cumplen hay su función. La mayor parte de la corrupción a pequeña escala involucra sobornos para acelerar la tramitación de documentos, sea para una licencia de conducir o un permiso de construcción o uno de importación

Ahora que llego el momento de la reflexión, que no todos hemos visto la corrupción con nuestros propios ojos y no hemos hecho nada e incluso volvemos al ejemplo de la “mordida” con el policía, algunos se han involucrado con la corrupción en este simple hecho, pero claro nos gusta quejarnos de la corrupción; de como existen grandes delitos económicos por culpa de la corrupción siendo que nosotros mismos propiciamos estos delitos y aunque se piense que por una mordidita para salir de un enrollo de transito no pasa nada hay que recordar que aunque el soborno puede ser pequeño, el movimiento es enorme y se pueden amasar pequeñas fortunas.

“Donde sea que pongas el dedo – comentó sombríamente un procurador general en cierta ocasión – brota pus. Decir que toda la sociedad mexicana es corrupta es una exageración; no obstante, la corrupción está presente en todas las regiones y los sectores del país. La verdad es que el fenómeno no se puede explicar fácilmente, pero todos sabemos en sí que es la corrupción, al igual que sabemos que está aquí y ahora y para ser honestos (y aunque duela) la corrupción es esencial para el funcionamiento y la supervivencia del sistema político, la corrupción proporciona el “lubricante” que permite que los engranes de la monarquía política giren, y el “engrudo” que sella las alianzas políticas.

Un sistema que nunca ha funcionado debidamente sin la corrupción ya no funcionara fluidamente en razón de la corrupción excesiva. Simplemente, lo que se tiene activado es el refinado instinto de auto conservación del sistema.

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