Vecinos Distantes

Capítulo 1. Los mexicanos

¿Qué es ser mexicano?, esta pregunta es tratada de responder por el autor, dando como ejemplo; la plaza de la tres culturas igualmente conocidas como Tlatelolco. Donde aún se pueden observar los restos de una pirámide prehispánica junta a una iglesia novohispana y un moderno edificio gubernamental. Símbolo de la unión de diferentes culturas; la española y la indígena. Fruto de esta mezcla es el mestizaje, no solo de sangre, sino de entendimiento, y como consecuencia, de contradicción.

Donde el mexicano más bien, llega a meditar y filosofar, encerrándose en una singular soledad sin dejar mostrar su verdadero rostro, es más, porta mascaras para toda ocasión. Tal es su percepción, que el mundo exterior le es de desconfiar y se vulva evasivo y orgulloso con todo. Paradójicamente si uno traspasa esta barrera se encontrara con alguien amable y abiertamente cálido.

Los mexicanos son seriamente espiritualistas, la preparación de alimentos, el trabajo y las relaciones tiene un aspecto de ritual. Todas sus acciones derivan de pasos a seguir. Igualmente es individualista, desordenado y creativo. Puede por ello, ser más pasionales y melancólicos que mucha gente. Solo las fiestas y el júbilo que provoca lo pueden confrontar, proporcionándoles un pequeño respiro a su desordenada vida.

Más que eso, se puede referir al espíritu mexicano como una conjunción de lo moderno con lo tradicional, la realidad y el misticismo, lo típico y lo vanguardista, ser mexicano es un ORGULLO, es un placer portar el símbolo de México, pero sobretodo es de FELICIDAD comportarse como buen mexicano en todos los aspectos.

Capítulo 2. Las raíces de la nación

Una total retrospectiva de la historia nacional, hablada desde el asentamiento de la primera cultura mesoamericana hasta la revolución.

Desde la olmeca, pasando por la maya y la tolteca, hasta llegar a los aztecas quienes recibieron a los españoles. La conquista significo la primera derrota y sumisión del mexicano. De hecho, Hernán Cortez al ser confundido por un dios, se llenó de regalos de oro que enfermo de codicia a él y sus acompañantes, convirtiéndolo en un hombre egoísta y ambicioso.

A la derrota del imperio azteca, los vencidos sumieron rápidamente su rol de que les ordenaban y ellos obedecían en pocas palabras esclavos en el nuevo orden social.

Como colonia de España trajeron consigo a la iglesia católica que haya lugar entre los conquistados y sus religiones, habiendo un sincretismo seguro y alcanzado gracias a la imagen de la virgen de Guadalupe.

Mientras crecía el poder económico de la Nueva España igualmente aumentaba la idea de independizarse de la corona española. La oportunidad surgió en Europa poco después, gracias a las conquistas napoleónicas y la constitución de Cádiz. Para 1810 un grupo de criollos comandados por un párroco dan inicio a la independencia. Aunque hubo resistencia al principio, un cambio político en España consolido la independencia, gracias también a dos hombres, Vicente Guerrero y Agustín de Iturbide con el plan de Ayala que reconocía la creación de un nuevo estado el 21 de septiembre de 1821.

Se habló entonces de los crecientes problemas que sufría el nuevo país. De las guerras contra Estados Unidos, Francia, el crecimiento económico y la estabilidad política se vino a dar con otro, el general Porfirio Díaz, Díaz se relegía cada vez que podía para mantener el poder en sus manos.

Capítulos 3. De revolución a institución.

Aunque Francisco I. Madero había triunfado al colocarse como presidente del país, no conocía la verdadera magnitud de sus actos. Él pensaba que solo con un cambio de régimen iba a ayudar al país, cuando en realidad era todo un sistema que debía cambiar para poder tener un mejor orden social, así como una adecuada forma de Gobierno.

Emiliano Zapata al verse traicionado por Madero, reinicio la lucha armada, no abandonando las tierras tomadas, el general Victoriano Huerta fue el encargado de detenerlo, sin embargo, Huerta traiciono a Madero y lo mando a asesinar junto con sus colaboradores, desde ese tiempo se comienza a reflejar lo que hoy en día es visto diario en México, la traición, la hipocresía.

Ascendiendo el poder bajo el desencanto generalizado. Zapata y Francisco Villa, líderes campesinos, no reconocieron al gobierno y se alzaron contra él. Por el norte, aparecieron fuerzas armadas

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