Control Biológico de Nematodos Fitoparásitos

Control Biológico de Nematodos Fitoparásitos
(César Alberca López)

INTRODUCCION

Los fitonematodos como organismos habitantes del suelo están en competencia constante con otros componentes de la biología del suelo. Cuando se analizan las curvas de desarrollo poblacional de muchas de las especies de fltonematodos de importancia económica se puede concluir que estas especies tienen un potencial reproductivo casi ilimitado. En el caso de los nematodos de las agallas (Meloidogyne spp.) la capacidad de producción de huevos es tan elevada que, considerada en conjunto con un ciclo de Vida relativamente corto (3-6 semanas), lleva a pensar que debieran ser siempre especies predominantes del suelo. Sabemos que no es así y que existen mecanismos reguladores en el suelo que mantienen las poblaciones de fitonematodos dentro de ciertos niveles determinados por el equilibrio dinámico existente en el suelo entre todos los organismos. Es decir que los fitonematodos tienen "enemigos" muy eficaces que limitan sus niveles poblacionales.

CONCEPTO DE NEMATODOS Y CONTROLADORES BIOLOGICOS

Los nematodos son los organismos pluricelulares más numerosos en los agroecosistemas; se conocen unas 20 000 especies y se pueden encontrar en densidades de hasta 30 millones por metro cuadrado. Se encuentran como organismos de vida libre y se alimentan de hongos, bacterias, protozoarios u otros nematodos, o como parásitos de plantas y animales; además, forman parte importante de las cadenas tróficas del suelo (Rodríguez, 1998, p. 192).

A escala mundial, existe una gran abundancia de antecedentes que permiten aseverar que los nematodos son atacados por numerosos y variados organismos del suelo, pero la acción de ellos aún es poco conocida (Jiménez, 1979, p. 49).

De acuerdo con Arauz (1998, pp. 467- 468), el concepto de control biológico es definido como el control de enfermedades mediante el uso de organismos. Los agentes biocontroladores como los organismos que interactúan con los nematodos fitoparásitos en el suelo deben tener algunas características básicas: No deben ser patógenos de plantas, hombres o animales, capaz de reducir o suprimir eficientemente las poblaciones de nematodos por debajo del nivel crítico, capacidad de adaptación a diferentes ambientes del suelo (textura, grado de humedad, composición química y materia orgánica), buena habilidad competitiva, alto potencial de reproducción para obtener una población alta, capacidad de sobrevivir en épocas difíciles.

Por ejemplo, Verticillium chlamydosporium tiene clamidosporas y puede sobrevivir a condiciones adversas del ambiente, capacidad de producir antibióticos u otros compuestos que inhiben nematodos u otros organismos para mejorar su oportunidad de supervivencia, habilidad para afectar a más de una especie de nematodos, dispersión efectiva en el suelo, capacidad para reproducirse in vitro en grandes cantidades a nivel comercial y de fácil aplicación, resistencia a la fertilización y a algunos plaguicidas; el producto biológico debe aumentar la producción con respecto al testigo sin aplicar.

BACTERIAS, HONGOS Y OTROS ORGANISMOS COMO CONTROLADORES BIOLOGICOS

• Bacterias y Protozoos

Existen en la naturaleza no sólo especies bacterianas que son directamente patógenas o parásitas de fitonematodos sino también muchas otras cuyas actividades metabólicas dan lugar a la producción de compuestos tóxicos para los fitonematodos.

Los cianuros son metabolitos de ciertas bacterias del suelo que, como los sulfuros, son inhibidores del transporte de electrones en los procesos de respiración de organismos aeróbicos. La producción de cianuro de hidrógeno (CNH) por especies de Chromobacterium ha sido correlacionada con las actividades nematicidas de estas especies de bacterias. Wilt, G. R. (1970).

La exotoxina termoestable producida por Bacillus thuringiensis var. thuringiensis es nematicida in vitro, aunque no es eficaz en el suelo; al parecer, esta proteína es destruida rápidamente en el suelo sin tener efectos duraderos sobre fitonematodos. Prasad, S. S. (1979).

Thorne G. (1940), describió un protozoo parásito de nematodos al que denominó Dubosqia penetrans. Estudios anteriores llevaron a pensar que este organismo no era un protozoario sino una bacteria que denominó Bacillus penetrans. Más recientemente Sayre y Starr designaron la bacteria como Pasteuria penetrans. Esta bacteria es un parásito obligado y común de especies de Meloidogyne y de otras especies de importancia económica en géneros como Pratylenchus, Xiphinema, Helicotylenchus. Rodriguez, K. R. (1984, p. 10-25).

Considerables progresos se han obtenido en los últimos 10 años para comprender la biología de Pausteria penetrans y la importancia de este organismo, el cual es capaz de suprimir a nematodos formadores de agallas. Pasteuria spp. está distribuida a escala mundial y ha sido reportada en 323 especies de nematodos. El potencial de Pasteuria spp. ha sido demostrado en 20 cultivos. Dentro de los nematodos que atacan se encuentran Belonolaimus longicaudatus, Heterodera spp, Meloidogyne spp y Xiphinema diversicaudatum. Pasteuria penetrans desempeña un papel importante en los suelos sorpresivos. Aproximadamente 10 000 endosporas / gramo de suelo proveen un control inmediato contra el nematodo agallador del maní. Chen y Dickson (1998, pp. 313-340)

Por otra parte, en Perú, Ciancio y colaboradores (1998, pp. 706-710) lograron aislar al género Pasteuria asociado con el nematodo Hoplolaimus galeatus. Se encontraron progágulos adheridos tanto en adultos como en juveniles y también endosporas que llenan los cuerpos de machos y hembras. La endospora y el punto central de la endospora tuvo un diámetro de 4,5 +/- 0,4 μm y 1,9 +/- 0,2 μm respectivamente, lo cual difiere con otros aislamientos reportados en Norte américa sobre el mismo nematodo. Lo anterior demuestra que en años algunas varias variantes de Pasteuria han sido descubiertas. La biodiversidad a nivel fenotípico sugiere un complejo proceso entre el hospedero y la coevolución y especiación del parásito.

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