El Conocimiento

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo aborda un tema apasionante, del cual se habla muy trivialmente en nuestra sociedad, el conocimiento, esa instancia del saber de la cual todos quieren posesionarse, pero que muy pocos saben como obtener, peor aun, aquellos que consiguen obtenerlo se les hace difícil saber que hacer con él.

El tema se plantea desde puntos de vista de autores destacados en el área, analizados bajo la óptica sencilla del autor, a fin de unificar criterios y de hacer más accesible el tratamiento de los enunciados aquí propuestos.

La finalidad primordial es que el lector comprenda ¿Qué es el conocimiento? ¿Cómo se produce? ¿En que consiste el acto de conocer? ¿Cuáles son los tipos de conocimiento? Y como estas interrogantes involucran al hombre con la conciencia del conocimiento, y a su vez como esta conciencia lo integra con su entorno.

LA RELACION COGNOSCITIVA ENTRE EL HOMBRE

Y LAS COSAS QUE LO RODEAN

El hombre es un ente social, y por lo tanto, su naturaleza lo impulsa a determinar desde muy temprana edad cual es el medio ambiente que lo rodea, esta característica intuitiva le permitirá vincularse a su entorno a través de un proceso de búsqueda y asimilación de información. A esta exploración, a veces fortuita, a veces intencional, le sucede un estado mental o sensitivo al que los teóricos llaman conocimiento.

¿Qué es el conocimiento?

La definición de ¿Qué es el conocimiento?, no es sencilla, ya que en ella convergen puntos de vista científicos, filosóficos e ideológicos que amplían el espectro de definiciones y conceptualizaciones acerca de este tema.

Según el diccionario de filosofía contemporánea (1976), “El conocimiento es un fenómeno con múltiples aspectos. Es un fenómeno psicológico, sociológico, incluso biológico”. (p.97)

Resulta claro en la definición anterior, que existe una expectativa en torno al conocimiento y su definición, más aun cuando encontramos en ella la palabra fenómeno, como elemento característico, el cual obviamente genera muchas variantes acerca de su percepción para unos y otros, dependiendo de la rama en la cual se le estudia.

Una definición práctica de ¿Qué es conocer? Implica la obtención de una información acerca de un objeto. Conocer es conseguir un dato o una noticia sobre algo. El conocimiento es esa noticia o información acerca de éste objeto.

El diccionario Wikipedia, define conocimiento de la siguiente manera:

El conocimiento es un conjunto de datos sobre hechos, verdades o de información almacenada a través de la experiencia o del aprendizaje (a posteriori), o a través de introspección (a priori). El conocimiento es una apreciación de la posesión de múltiples datos interrelacionados que por sí solos poseen menor valor cualitativo. Significa, en definitiva, la posesión consciente de un modelo de la realidad en el alma. (“Conocimiento”, 2006)

De acuerdo a esta definición podemos identificar que el conocimiento proviene de un proceso que involucra al ser humano con su realidad, con su entorno, es una interrelación en la que cada uno aporta elementos, que permiten a las personas crear una conciencia de sí y del mundo, los seres humanos transforman su entorno y éste a su vez les influye y les afecta.

El diccionario soviético de filosofía (1965), define el conocimiento como: “Proceso en virtud del cual la realidad se refleja y reproduce en el pensamiento humano; dicho proceso esta condicionado por las leyes del devenir social y se halla indisolublemente unido a la actividad práctica”. (p.80)

De esta manera, distinguimos que el conocimiento esta vinculado a la sociedad y que puede estar condicionado por la misma.

Ahora bien, si profundizamos un poco más en el tema podemos referirnos al conocimiento como el saber consciente y fundamentado que somos capaces de comunicar y discutir; se corresponde con el término griego “episteme” y se distingue así del conocimiento vulgar o “doxa” que es simplemente recordado y que no podemos someter a crítica. Actualmente se considera que el conocimiento es un proceso, en oposición a la consideración de la filosofía tradicional que lo concebía como algo estático (las formas inmanentes pero permanentes de Aristóteles, el idealismo cartesiano, la teoría de la armonía preestablecida de Leibnitz, las categorías a priori de Kant...). Así lo que caracteriza a la ciencia actual no es la pretensión de alcanzar un saber verdadero sino, como afirma Popper (1985) citado por Marqués Graells (1999), “La ciencia debe conseguir estructurar sistemáticamente los conocimientos en función de unos principios generales que sirven de explicación y poseen a aquéllos, dando una coherencia general y claridad inexistente anteriormente”. (p.68)

Implícito en la referencia anterior, podemos destacar que existen varias formas de conocimiento: el conocimiento sustentado en el sentido común también llamado conocimiento vulgar, el conocimiento sustentado en la ciencia y el conocimiento sustentado en la ideología. De igual manera podemos inferir que ha existido un cambio en la percepción acerca del conocimiento, que ha llevado a los estudiosos a afirmar que está en evolución constante, por ejemplo, en el conocimiento sustentado en el sentido común siempre se van acumulando los saberes cotidianos que vienen dados por las experiencias diarias; en el conocimiento sustentado en la ciencia se perfeccionan las estructuras sistemáticas que apoyan la obtención y producción de conocimiento, y a su vez se van integrando estos conocimientos a los ya existentes; y en el conocimiento sustentado en la ideología se modifican y reestructuran sus ideales con la finalidad de adaptarlos a la sociedad actual.

Es evidente que el conocimiento representa un elemento trascendental para el hombre, porque a través de el puede crear la conciencia de sí mismo y puede también constituirse en parte de una sociedad, es por consiguiente necesario ampliar nuestra información en cuanto a dos interrogantes fundamentales ¿En qué consiste el acto de conocer? y ¿Cómo se produce el conocimiento?, para interpretar de forma más concreta la relación que existe entre hombre y el conocimiento.

¿En qué consiste el acto de conocer?

En todo conocimiento podemos distinguir cuatro elementos:

• El sujeto que conoce.

• El objeto conocido.

• La operación misma de conocer.

• El resultado obtenido que es la información recabada acerca del objeto.

Dicho de otra manera: el sujeto se pone en contacto con el objeto y obtiene una información acerca del mismo. Cuando existe congruencia o adecuación entre el objeto y la representación interna correspondiente, decimos que estamos en posesión de una verdad.

Según Cervo y Bervian (2006), “¿Qué es conocer? Es una relación que se establece entre el sujeto que conoce y el objeto conocido. En el proceso del conocimiento, el sujeto se apropia, en cierta forma del objeto conocido”.

De este modo el conocimiento siempre implica una dualidad, de un lado, el sujeto cognoscente y del otro, el objeto conocido, que es poseído en cierta manera por el sujeto cognoscente. Mediante el conocimiento penetramos las diversas áreas de la realidad para tomar posesión de ellas.

Según el punto de vista de Berthier (2006), señala:

La reflexión acerca del conocimiento se basa en dos premisas fundamentales: 1. Aquello que podemos identificar como el conocimiento no es algo que pueda separarse de las condiciones sociales en que éste se genera, ya sean lógicas, biológicas, psicológicas o culturales y 2. No debemos entender por conocimiento únicamente al saber producido por la ciencia sino que debemos considerar seriamente como tal a toda construcción humana material y conceptual tendiente a organizar y encauzar nuestras experiencias en el mundo.

En efecto, se asevera una vez más que el conocimiento esta ampliamente influenciado por la sociedad y sus características, de tal manera que el producto final dependerá en gran parte de las condiciones en las que el mismo se produzca.

Según, Bellorín y Rivas (1992), “El hombre encuentra solución a los problemas en base a las experiencias que pueda poseer sobre el comportamiento de determinados hechos y situaciones”. (p.27)

De esta manera, en el proceso de observación del ambiente que lo rodea, el hombre comienza a experimentar y poner a prueba cuales son las cosas que le son útiles para su subsistencia, por ejemplo: alimentos, clima, instrumentos, entre otros. Además de identificar lo que ha demostrado que es perjudicial y lo que puede desechar.

Por otro lado, Bellorín y Rivas (1992), expresan que: “En esta misma forma de adquisición de conocimiento está el hecho de conocer cuando insistimos en la repetición como forma de aprender”. (p.28)

Desde este punto de vista, en el momento en que se fija una acción o un hecho, el hombre fija mecánicamente lo aprendido, como por ejemplo, cuando el niño comienza a repetir la palabra “mamá”, al pronunciarlo varias veces, lo fija mecánicamente y puede identificar quien es su mamá. Otro ejemplo podría ser el del campesino que sabe cuando es el momento apropiado para la siembra de algún fruto en particular.

Según, El diccionario soviético de filosofía (1965), “El fin del conocimiento estriba en alcanzar la verdad objetiva. En el proceso del conocimiento, el hombre adquiere saber, asimila conceptos

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